c i n c o

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La pizzería Garden tiene muchos comensales el día de hoy y una música desconocida para Eli, reproduciéndose en los altavoces.

Hoy fue el desfile "Dominicano" -«sí, esa bandera azul, roja y blanca debe de ser suya»- en New York.

New York es una de las ciudades con mayores diversidades étnicas de los Estados Unidos, por lo que es normal ver personas de diferentes nacionalidades que, después de hacer su desfile - alabando a su país mientras están ausentes de este-, vayan en busca de pizza después de que las más famosas pizzerias están llenas. En resumen, Eli está caminando de aquí para allá en la pizzería atendiendo ordenes y poniendo atención a lo que éstas personas dicen en otro idioma, quien sabe si lo están insultando o algo parecido...

-¡York!

Solo una persona lo llama así y ese es Lance. Aunque sea el gerente de la pizzería es muy malo aprendiendo los nombres, pero, como sus colores de piel, pelo y ojos son inconfundibles, Lance siempre inventa un apodo basado en estos.

¿Por qué digo todo esto si solo lo llamó por su apellido?

Eli es el único que tiene ese apellido y, tomando en cuenta donde viven, Lance lo aprendió de un dos por tres; aunque algunas veces -este no fue el caso- se le pasa y simplemente lo llama "Blondie".

Volviendo al tema, en el momento que Lance golpea cinco cajas de pizzas sobre el mostrador, Eli lo ve como si fuera su marihuana, pues se relaja y quita el delantal de una vez para hacer las entregas, que nunca le parecieron más encantadoras.

Ya le resulta rutina ir a entregar pizzas al Empire State, pero en el momento en que la recepcionista le dice-:

-No hay nada hoy, rubio -dijo esta mientras le pasaba el dinero correspondiente.

«Qué extraño», quiso decir, pero de sus labios no salió nada.

Eso no debería importarle ¿o sí? Al fin y al cabo el siempre vota las notas, excepto por aquella de la marihuana que le resultó graciosa... Y...

-¿Qué demonios, Eli? No es importante. -Se dice a sí mismo - No. Es. Importante.

Pero algo dentro suyo le dice que sí lo es, incluso cuando vuelve a la pizzería y encuentra a Leila hablando con Brooke...

Esperen, ¿Leila está en la pizzería y Champagne Papi no tiene el día libre? ¡Oh, pero qué oportunidad!

-Hola, Lei -saluda Eli, mientras Dre se acerca a la barra en busca de otra pizza. Antes de que se aleje a la mesa el rubio pasa su brazo sobre los hombros de el tatuado y lo apega hacia él.

-Eli casi...

-Lei, ¿recuerdas cuando nos encontraste haciéndolo en la cocina?

Leila toma la pizza que le pasó su prima como siempre lo hace cada vez que va a ese lugar. Ella no es de las personas que aman mucho la pizza, pero suele pedir una para llevar cada vez que pasa por la pizzería Garden, pues al tener una prima que trabaja allí, siempre tiene un descuento.

-¿Te refieres al mismo día en que dejaron fluidos corporales que luego tuve que limpiar? Sí, lo recuerdo bien.

Los labios de Dre se aprietan en una fina línea debido a la risa.

-Sí, perdón por eso... Pero mi amigo aquí -palmea fuertemente el pecho del mencionado- siempre nos descubre cada vez que terminamos. Por lo que Drake Housser, ella es Leila Miller, la...

-Prima de Brooke. Es un gusto, ¿me dejas llevar la pizza? -Poco a poco el chico se va deshaciendo del agarre de Eli sobre sus hombros para terminar su tarea.

-Lindo -murmura la chica que ahora tiene el cabello a la altura de las orejas y es completamente rubia-. Te veo en casa. -Se despide de Brooke antes de abandonar el lugar.

Eli se queda estático unos segundos para después sentarse en uno de los taburetes del mostrador, esperaba algo más que eso. No sé, algo como que se comprendieran y empezar a charlar y luego tuviera sexo duro contra el muro... O tal vez una cita, tampoco está pidiendo mucho.

-¿De verdad creíste que sería así de sencillo?

-De hecho esperaba que más. -Le responde a la pelinegra de la cual nota que no tiene sostén puesto bajo aquella blusa ajustada.

Relame y muerde lentamente los labios ante el pensamiento de su lengua sobre estos...

-Después... -susurra Brooke, pero por dentro está tan desesperada porque se desocupe esa bodega tanto como él.

Lo malo de que haya un desfile es que el trabajo se multiplica, por ello en la bodega siempre aparece alguien buscando algún ingrediente, lo que deja a Eli sin lugar para el sexo fugaz que suele tener con Brooke, debido a que no hay otro lugar disponible, pues si van al baño o aunque sea fuera de la pizzería, sufren el riesgo de ser vistos por los clientes, lo cual no le conviene para nada.

Ey, ya se le olvidó la nota... Olvidénlo se acaba de acordar. Pero algo bueno hay de esto, no se levantará su "amiguito" frente a toda la pizzería mientras se pone a trabajar.

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Heeeeeyyy! ¡He vuelto!

Los tenía botados pero en mi defensa, planeaba actualizar para Nochebuena, pero es que la universidad y eso...

En fin, disfruten este capítulo que no sé ni como lo hice pero... ¡Esta hecho!

Hugs n' Kisses,
Lissy.

P.D.: Tal vez haya capítulo mañana.

P.D.2: Ojo, dije TAL VEZ :v

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