Back to you ↛ Jikook (2da temporada)

Capítulo 4

Jimin abrió los ojos sorprendido y alarmado. Negó con la cabeza repetidas veces, impresionado. Trague saliva con fuerza conteniendo el temor que se aloja en todo mi cuerpo.

—N-No, claro que no quiero terminar, Jungkook.—balbuceo, acercándose lo más posible a mí.

Sus ojos quedaron frente a los míos y sus labios se juntaron con los míos. Tan suaves y calientes como siempre lo han sido. El calor se extendió por mis mejillas y mis ojos se perdieron en algún punto fijo, sólo podía sentirlo.

Se separó de mí con lentitud, sin dejar de observarme.—Lo siento, Jungkook, yo no—

El crujido de la puerta lo interrumpió. Dirigimos la mirada en esa dirección y me mordí la lengua al ver que era el fresita de nuevo. Solté un bufido de frustración, cuanto lo detesto.

Me levante con mis manos hechas puños y pude sentir como mi expresión sombría entró en lo más profundo de su ser. Me di la vuelta dispuesto a irme pero me detuve al ver como Suk camina hacía mí.

—Acompáñame.—ordené, jalandolo del brazo.

Me dirigí a la puerta sin reparar en el fresa. Vi por el rabillo del ojo como Jimin me observaba fijamente hasta que salí de la casa.

—¿A dónde vamos?—cuestionó Suk, comiendo unas patatas fritas.

Me detuve por un momento, no se a donde podría ir. Pase una mano por mi cabello, pensativo. Un viejo recuerdo de Jimin en el bar vino a mi mente. Podríamos ir allí, no, mejor dicho, lo haremos.

—Conozco un lugar.—me encogí de hombros, con la mirada en el suelo.

—¿Qué pasa entre Jimin y tú?—inquirió, su voz directa y firme.

Me sorprendió su sinceridad, no dudo en preguntarme. Volví a mirar al suelo, cabizbajo. No sabría decirlo, no estoy molesto con él, sólo... Me duele. No quiero que esté tan cerca de ese chico, tengo miedo de perderlo.

Negué con la cabeza, un nudo comienza a formarse en mi garganta. Tome una gran bocanada de aire y comencé a desahogarme. Antes ya le había contado algunas cosas, pero hacía falta detalles.

—Ese tipo es un idiota. No temas, Jimin no te engañará.—sonrió con seguridad haciéndome sentir confiado.

—No lo sé... Se que ese chico es capaz de hacer cualquier cosa y yo, ya no se que hacer o como reaccionar.

Deje de hablar al ver que habíamos llegado. Suk soltó un silbido de admiración al adentrarnos en el lugar, nada ha cambiado. El chico que aquella vez había hablado con Jimin, está limpiando los vasos detrás de la barra. Le hice señas a Suk de que me siguiera y no dude en sentarme frente a él.

—Hola, que de tiempos.—llamé su atención, extendiendo mi mano.

Él se giro confundido y abrió los ojos sorprendido al recordar:—Mucho, la verdad.

—Él es mi amigo Suk.—señale a mi compañero.—¿Y tú eres?

—Soy Jackson Wang, a su servicio.

Sonreí al escuchar su nombre, nada mal. Hace sólo unos meses eras mi rival y debo aceptar que valió la pena estar celoso de ti, este si es digno de combate, no como el fresa de mierda ese.

—¿Y el chico ese... Jimin?—preguntó dudoso.

—Está bien, estamos casados.—le mostré mi anillo con arrogancia.

Jackson abrió la boca impactado. Me reí de su expresión al igual que Suk lo hizo también. Mis ojos se detuvieron en el anillo, la hermosa joya en el centro me llevó a aquellos recuerdos. Cuando me lo propuso.