Capítulo 5

1K 95 35
                                    

Todo transcurre con normalidad. El fresita desde aquel día aunque se veía dolido y enojado no se acercó más a Jimin y por fin podía sentirme en paz. Tampoco ha vuelto a visitarnos hasta donde sé, no es como si estuviera muy pendiente de su estúpida vida.

Suspire con desgana. Jimin y los demás chicos se habían marchado, a excepción de Taehyung pero no se que estará haciendo. Por lo menos yo, estoy acostado en mi cama sin saber que hacer, pensando en dónde rayos está Jimin y por qué no ha regresado con los demás, supuestamente fueron de compras pero ya se están tardando.

Di varias vueltas con pereza. Quizás lo mejor sea buscar a Taehyung sin importar que esté haciendo. Me levante rápidamente y cerré la puerta detrás de mí con llave. Si llego a salir, hay que ser precavidos. Me acerque con seguridad hasta la habitación de Taehyung y toque dos veces, sin obtener respuesta. Volví a tocar unas cinco veces más hasta escucharlo chillar.

—¿Qué quieres? —espetó, sin expresión en su rostro.

Fruncí el ceño, confundido por su actitud.—¿Hablar con mi mejor amigo, tal vez?

—Lástima, tu mejor amigo no quiere hablar contigo.—se encogió de hombros, prosediendo a cerrar la puerta.

Metí el pie en una pequeña abertura antes de que pudiera cerrarla evitando así, que lo hiciera. Él apretó su agarre en la manilla y me lanzó una mirada frustrante.
—¿Podrías apartar tu pie, por favor? —masculló entre dientes.

—¿Qué sucede, Taehyung? Sabes que puedes decirme, soy tu amigo, ¿No eras tú él que hablaba de confianza?

Lo vi arrugar la nariz, pensándolo. Tardó unos segundos en los que solo pestañeaba y se hizo a un lado para dejarme pasar. Me deslice con agilidad evitando que se arrepintiera de su decisión. Lo escuché soltar un suspiro de resignación.

—Si molestas.—se quejó, sentándose en el borde de su cama.

Me senté a su lado y con un destello de broma, le dije:—Mira quién habla, nada más y nada menos que Kim Taehyung.

Me reí con gracia. Me detuve abruptamente al ver que él no reía. Su expresión seria y distante me puso los pelos de punta. Trague saliva audiblemente con la preocupación a flor de piel.

—¿Qué pasa, Taehyung?—murmuré en su oído.

Sus ojos se humedecieron y su cuerpo comenzó a temblar ligeramente. Me quedé paralizado, un hueco en mi estómago me hacía sentir tan impactado. No quiero ver a mi amigo de esa forma. Lo agarre de los hombros girando un poco su cuerpo en mi dirección. Él abrió los ojos sorprendido por mi acción y yo sólo pude abrazarlo.

—Dime, Tae, ¿Qué está pasando?—inquirí con suavidad, tratando de transmitirle toda la dulzura posible.

Apretó su agarre en mi espalda jalando un poco ni camiseta. Me tense al oír sus sollozos y sentir la humedad de sus lágrimas en mi hombro. Cerré los ojos con fuerza, conteniendo el dolor que me causa verlo de esta forma.

—E-Es Hoseok... Él... Él me oculta algo y cada vez que Le pregunto, n-no me dice... No sé que pensar, ya no... —balbuceó, con su voz quebrada.

Lo abracé aún más fuerte.—Tranquilo, Taehyung. Si él no te lo ha dicho, pronto lo hará.

—¿De verdad?—me miró esperanzado, considerándolo por un momento.

Sonreí con alegría, y me alejé dejándole espacio.—Claro que sí, tú sabes como es él.

—B-Bueno... —titubeó, limpiando con el dorso de la mano sus lágrimas.—Quizás tengas razón. Gracias, Jungkook.

Back to you ↛ Jikook (2da temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora