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Era la primera vez que Jihoon escuchó que alguien le extrañaba.

Todas las personas importantes en su vida estuvieron cerca los últimos dieciocho años, en el mismo lugar, a toda hora. Sus padres y Seokmin. Ellos nunca lo extrañaron y Jihoon nunca los extrañó.

Jihoon comprendió la naturaleza de su enfermedad a los diez años, cuando los únicos libros que tenía a disposición eran infantiles y a la vez huecos; no hablaban de problemas reales, porque se suponía que los niños por ser niños no atravesaban dificultades reales. Entonces el primer libro que leyó respecto a la realidad, describía la vida como un corto viaje donde conocías a muchas personas nuevas.

Pero para Jihoon la vida no es un viaje corto, es un largo adiós.

Todas las noches saludaba a sus padres como si no fuese a despertar. Todos los días decía lo que pensaba. Y él, orgulloso y satisfecho, creía que de ése modo estaba sacándole el jugo a su vida en la situación más crítica. Aún sin salir a la calle, aún sin conocer a personas maravillosas, aún sin pedirle respuestas al mundo mirándolo de frente.

Los cambios en su vida sucedieron todos a la vez, justo después de dejar la adolescencia. Sin embargo no era una nueva vida, porque si no hubiese vivido del mismo modo desde que nació, la llegada de Kim Mingyu no tendría el impacto que tuvo.

Pero ahora que ya empezaba a convirtirse en adulto y sabía todo lo que debe saber sobre la vida, él necesitaba entender qué era el amor.

-Vamos a ver una película, Mingyu...

Mingyu iba a visitar su casa ésa noche junto con Joshua y festejarían todos juntos la Navidad. Seokmin estaba histérico, ya le había mostrado siete conjuntos de ropa y no parecía cercano a decidirse.

-Claro, ¿cual quieres ver?

-Una porno.

-¿Cómo?- Mingyu tartamudeó y Jihoon se aguantó la risa.- ¿Es en serio...? Es broma, ¿no?

Entonces Jihoon echó una carcajada.
-Le diremos a nuestros hermanos que vamos a ponernos eróticos y nos dejarán en paz... Sólo no quiero mirarlos besarse frente a nosotros o susurrandose cosas cursis.

-Apoyo la moción. Pero Joshua me dará un sermón si le digo que voy a ponerme erótico contigo...

-¿Aún no tuvieron 'la charla'?

Hubo silencio del otro lado de la línea por varios segundos.
-¿Se supone que tengo que charlar de éso con él?- Cuestiona Mingyu asombrado.

Jihoon recordó con un escalofrío de humillación la charla de educación sexual que sus padres le dieron justo después de anunciarles que estaba de novio.
-No se supone que nada, si ni nos vemos tan seguido... Todos son tan exagerados.

-Además... No es que vayamos a hacerlo, ¿verdad?

-Ellos ya lo hicieron, seguro.- Aseveró Jihoon.

-¿Joshua y Seokmin?- Mingyu sonaba alarmado y estupefacto.- ¿Cómo sabes?

-Por favor, Mingyu... Hace meses que salen, no seas tan ingenuo...

-¿Tienes pruebas?

-Buena pregunta, voy a conseguirlas...

Sol Blanco [JiGyu/GyuZi]Where stories live. Discover now