El mejor postor | Luke E.

41

-No puedo creer que estemos aquí...- estoy frente a él, y simplemente el hecho de tenerlo cerca, me causa una sensación de vomitar. -, juntos y solos.

-Al grano.

-Sigues siendo esa chica segura de si misma- extiende su mano para tocar mi mejilla pero me alejo. El cierra el puño regresando su mano a sus pantalones y los recuerdos regresan. -. Estás muy hermosa.

-Maldición, termina con esto de una buena vez.

Se acomoda en su asiento relajando su espalda, esta conversación estaría larga y las ganas de no matarlo, se están esfumando. Se que, tiene al personal de la cafetería a su poder. Tyler siempre está un paso más adelante de todos.

-Bien- me mira con sus penetrantes ojos grisecos. -. No te he olvidado. Desde ese maldito día que entre a la cárcel, estuviste en mi memoria día y noche, ¿sabias? Creí que me irías a visitar y me dejaste solo, como un maldito perro- su voz se vuelve más gruesa y eso aumenta mi nerviosismo. -. No me he olvidado de lo que nos hiciste.

-¿Lo que le hice a lo que teníamos?- exclamé con un toque de gracia. -. Me golpeaste hasta desear matarme.

-Fueron tan solo unos cuantos moretones y rasguños.

-Si la policía no hubiera llegado...

-Si la policía no hubiera llegado, tu y yo hoy seguiríamos juntos y yo no hubiera pasado años pudriendome en la cárcel por haberte tocado un maldito pelo.

Los recuerdos me invadieron como una película de desastres. Él, arruinando mi vida. Él, dejándome marcada para siempre. Hoy como todos los días desde ese entonces, me pregunto; ¿por qué lo tuve que conocer?

El rencor me llenó y las lagrimas empezaron a mojar mis mejillas, impidiendome verle su horrible rostro. Las ganas de gritar se estaban acumulando y estaba segura que algún día explotaría. Sentí el calor por mis orejas hasta llegar a mi cabeza. Me estaba conteniendo con todos esos recuerdos que seguían dentro de mi.

-Me violaste- hablé con todo el rencor en mi voz.

El no me mira. Tiene su mirada fija en algún punto de la mesa y la cabeza gacha. Se estaba perdiendo en sus pensamientos.

Después de unos pocos segundos, se endereza y esta vez me mira, con valentía y desafío.

-No me arrepiento de nada.

Claramente no.

-No tenemos nada más de que hablar- me levanto de la silla decidida a irme. Estaba gastando mi tiempo y se que no llegaríamos a ningún punto en donde yo saliera beneficiada. -. ¡Maldición! ¡No me vuelvas a tocar en tu vida!- exclamo una vez que el me toma por ante brazo para girarme a verle.

-Esto no ha terminado- me mira directamente.

-Esto ya terminó. Si te vuelves a acercar a mi, yo...

-¿Tu que? ¿vas a regresarme a la cárcel?- pregunta con cierto toque de burla. -. Perfecto, me sacaran de nuevo. Ya conoces la rutina; mi padre tiene muchos contactos.

-No te acerques más a mi.

-¿O que?

-O yo misma te mato.

Doy media vuelta y salgo de la cafetería con un nudo en la garganta, lagrimas escurriendo y unas ganas inmensas de gritar.

(...)

-¿Y eso que regresaron temprano?- pregunta Luke una vez que Nathan y yo entramos a la casa.

-No hubo nada de su gusto- responde Nathan a base de las mentiras que le dije al estar arriba de la camioneta. -. Ya sabes como son las mujeres.

-Claro que si.

Me tiro en el sofá sin decir algo o hablar con alguien. Luke se percata de mi acción y se encamina hasta el sofá para sentarse a mi lado.
No lo miro, estoy concentrada en algún punto de la habitación. Estoy totalmente perdida y hundida, no siento la necesidad de parpadear. Así que no lo hago.

-¿Y mi beso, amor?- pasa su brazo por mis hombros.

No le contesto. Quiero hacerlo, pero estoy disfrutando el estar perdida sin que nada me afecte.

-¿Sucede algo?- pregunta.

Muevo la cabeza negativamente.

-Entonces, ¿que te pasa?

-Nada, estoy bien.

-Ya entiendo- se acomoda en el sofá. -. Estás así desde que te dije lo de Irina.

-Ni siquiera he pensando en eso en todo el día.

-Pero ni siquiera me has dicho algo al respecto, ¿que piensas?

¿Era en serio esa pregunta?

-¿Que quieres que piense?- elevo la voz sin darme cuenta al momento de ponerme de pie. Ahora le estaba prestando toda la atención. -. Mi novio me dijo que será papá, sinceramente no me causa emoción alguna.

Guardé silencio cuando repetí lo que ya había dicho, en mi mente. Y al parecer, Luke no había prestado atención más que a la palabra «novio» pues su expresión había cambiado totalmente.

-Lo siento- hablé nuevamente.

-Me gustó esa parte de novio- responde levantándose del sofá y posandose frente a mi, mientras me abraza por la cintura.

-Fue una equivocación.

-Pero lo soy.

-Ni siquiera me lo has pedido.

Hace una mueca. En ese momento paso mis brazos por su cuello.

El timbre suena y los dos giramos a ver a Nathan quien camina hasta la puerta para ver quien estaba detrás.

Después de unos largos minutos en la puerta; Nathan entra con un ramo de rosas muy grande.

-Kate, esto es para ti- habla Nathan viendo la tarjeta blanca que se encontraba entre las rosas. -, de un tal Tyler.

Me separo de Luke rápidamente y este me mira extrañado.

Mierda.

| × × × |

No es por presumir pero, PASE TODAS LAS MATERIAS EN PRIMERA OPORTUNIDAD, O SIIII. ME AMO.

Era todo, grax por sus felicitaciones xd.