Tú mi hogar.

CAPITULO 1 - Nacimiento de Anne

CAPITULO 1

El día había ido muy bien. Me había despertado de buen humor, para tomar mi desayuno e irme al colegio, me despedí de mamá con un intento de abrazo, ya que tiene la barriga muy grade por el embarazo. Ya lleva los nueve meses, así que mi hermanastra, Anne, estaba muy cerca de nacer. Decidieron colocarle el nombre Anne en honor a mi abuela materna, quién fue una gran mujer, trabajadora y humilde.

El autobús escolar no tardó en llegar, subí lo más rápido posible para encontrar la misma escena de todas las mañanas, Sharol sentada junto a la ventana con su mochila en el asiento de al lado, apartando mi lugar. Me apresuro hasta llegar a ella, quién me mira y sonríe apartando su mochila para darme lugar a mí. Todas las mañanas eran iguales, sentados juntos camino al colegio, ambos cursábamos cuarto grado de primaria.

-Jake tiene novia, Jake tiene novia- Cantaban el resto de los niños que nos rodeaban al unísono, casi todas las mañanas era lo mismo. Un grupo de imbéciles molestándonos siempre con lo mismo.

-¡Sharol y Jake son novios!- Gritó Niklas en medio del autobús, a lo que todos empezaron a reír. ¿Niklas? Bueno, Niklas es la clase de niño millonario, el cual se burla de los demás para así llamar la atención. Provenía de una familia alemana, la cual era muy adinerada, poseían grandes empresas muy importantes para el país, y eso me llevaba siempre la misma duda, ¿Qué hace un imbécil como aquel, en este colegio? No lo sé. Supongo que nadie lo sabe.

Aparto las risas y comentarios de todos los niños con respecto a mi "relación" y empiezo a ver por la ventana. Sharol está distraída leyendo un libro que le regalaron hace unos meses en su cumpleaños, lo sé porque estuve presente al momento en que se lo entregaron y lo recibió con gran alegría.

El resto del camino fue rápido, viendo los árboles pasar y las montañas a lo lejos. Esta ciudad no era ni grande, ni pequeña, era del tamaño perfecto para la cantidad perfecta de habitantes. El autobús estacionó en la parada estudiantil y poco a poco fueron bajando los alumnos de él. Me dirigí rápidamente a mi aula de clases, en esta aula, los pupitres eran dobles, es decir, debías elegir un compañero para sentarte a su lado por el resto del año escolar, en este caso, como cosa rara, Sharol era mi compañera. Siempre lo había sido.

La clase empezó con historia, una charla muy interesante sobre como los antiguos egipcios drogaban a los niños con chicha. Al parecer esta bebida contenía algo que adormecía a las víctimas.

La mañana continuó con arte, donde debíamos retratar nuestra familia como la veíamos. El dibujo de Sharol era muy hermoso, solo con tres pequeños muñequitos de palitos, una pequeña familia compuesta por mamá, papá y ella, se observaban corazones por doquier. En cambio mi dibujo era muy diferente. En mi dibujo se veía una señora con un gran círculo en su estómago en representación a su embarazo, junto a ella un niño. Al lado del niño se podía observar una tumba la cual decía "papá" junto con un corazón roto, y al lado de la mujer embarazada, había una especie de monstruo, el cual decía "padrastro".

Así es, considero a mi padrastro un monstruo. Un bicho feo que lo único que ha traído a mi vida, es tristeza. Robándome a mi madre, y el amor de ella.

-Chicos, quedan cinco minutos. Entreguen.- Dijo la profesora encargada de la clase, ya que como había dicho, quedaban cinco minutos para el cambio de clases. Todos entregaron sus dibujos, yo me ahorre el tiempo y no lo hice. No quería que lo viera nadie.

Tres golpes en la puerta fueron mi salvación antes de que la profesora notara que no había entregado.

- Buenos días. Vengo a llevarme a Jake. Jake Korns –Dijo aquella voz, muy familiar. Y si que era familiar, mi padrastro estaba ahí. Primera vez que me retiraba del colegio.

-Ah, usted debe ser Dave, ¿no?- Preguntó la profesora, a lo que él solo asintió con la cabeza.

Tomé mi mochila apresurándome a la puerta -¿Qué pasa?- pregunté confundido.

-Tu madre rompió fuente- Dijo seco –No sabremos hasta que hora estaremos en el hospital, así que lo mejor era buscarte.- Solo asentí con la cabeza y apresuré mis pasos hacia la camioneta.

Diez años de ser hijo único nunca me enseñaron que es ser un hermano mayor, ni cómo tratar con un bebé. El hecho de que mi madre tuviera un hijo con aquel hombre me molestaba, me ponía celoso, pero por otro lado, saber que tendré una hermanastra, me ponía feliz y nervioso al mismo tiempo.

El camino al hospital fue muy silencioso, nunca me gustó hablar con Dave, y la mayoría de las veces en que hablábamos, mi madre terminaba dándome una charla sobre respeto a los mayores. Pero aún así, puedo asegurar que Dave es un viejo, estúpido y amargado.

Llegamos al hospital y el resto de la mañana fue muy aburrida, sentado en la sala de espera, esperando a que finalizara el parto. Finalmente, luego de dos horas por fin salió una enfermara indicándonos que podíamos pasar a ver a mi madre y hermanastra.

Pasé junto a Dave a la habitación para encontrar a mi madre en una camilla, y a Anne en una pequeña incubadora junto a ella. La bebé era muy blanca, con cabello oscuro abundante. Mi madre estaba exhausta.

Para el final del día, ya estábamos todos juntos en casa. Con una hermosa nueva integrante.

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