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Había acabado la escuela y yo estaba amenazada de muerte por Loan.

-¡Tienes que contarme todo!- Me decía en susurro mientras entrábamos a la biblioteca por sus libros para sus clases particulares. Ella era la maestra, tenía que ayudar a unos chicos que estaban en extraordinario, ya que era tutora. Muchos chicos la eligieron a ella pensando que podría tener clases con ella pero no para estudiar, si no para otras cosas. Sin duda se equivocaron de californiana.

-No fue la gran cosa. Solamente fue un beso....- Dije mientras observaba uno de los estantes en el área de Historia Universal. Me alejé un poco de ella para que no escuchara mi siguiente murmullo. - Su primer beso.-

Se paró en seco y me encaro.-¡¿Qué?!- Dijo casi gritando. La señora Smith le dijo que guardara silencio, por lo cual se puso roja. La pobre no está acostumbrada a que le llamen la atención los profesores.- ¡¿Fue su primer beso?! ¿Estas segura?- dijo ya susurrando.

-Sí.- dije y le explique todo lo que había pasado, desde su reacción al primer ensayo, hasta cuando había vuelto el profesor.

-Puede que... - empezó a hablar peor la interrumpí, mirándome a los ojos.

-Ni si quiera lo pienses. Eso nunca fue cierto y lo sabes. - Cerré los ojos tratando de olvidar aquella estúpida posibilidad. Era una tontería tan si quiera pensarlo.- Ahora vayámonos, es mi cumpleaños y quiero una pizza.

...

-¡JAJAJA!- Newton reía muy alto y estaba a punto de llorar de la risa, sus ojos se veían más azules cuando reía. Darle azúcar a un chico con tantas ocurrencias para los chistes nunca es bueno.

-Ya... Mucha... Azúcar... Para... Newton- dijo Jacob alejando los dulces de Newton, estaba jadeando de tanto que habíamos reído. Sin duda ver vídeos graciosos juntos, mientras toda la pizzería sé nos queda viendo es la mejor manera de pasar un cumpleaños. Estos chicos son lo mejor.

-Pero haber ¡Ya!- Dijo Grace con su voz aguda que hacía que su acento japonés se notara un poco, agarró la malteada y la alzó como si fuera a brindar- Hayley Gregman, hoy cumple años y por eso estamos aquí, sabes que te adoramos y te apoyaremos a ganar el concurso y puedas ir a conocer a su mayor inspiración ¡Por nuestra painter!

-¡Por nuestra painter! -dijeron Loan, Newton y Jacob al mismo tiempo, mientras yo me ponía más que roja. Eran una bola de cursis cuando querían.

Todos me abrazan y decían cosas lindas, mientras que la sonrisa no desaparecía de mi rostro, pero entonces se me ocurre mirar hacía la ventana y veo que en ese momento se estacionó "El camión", que era más bien una camioneta pero todos le decía camión, y entró el equipo de fútbol de nuestra pequeña ciudad. Lo que significa, Carter estaba ahí con sus engreídos amigos.

Sé que me vio, sentí su mirada, pero no quería voltear a verlo, sabiendo que nos habíamos besado...Más de una vez. Ya había entendido por las malas que era capaz de todo por ese estúpido equipo.

-Tranquila Hay.- Murmuró Jacob, él también se sentía tan tenso como yo por la presencia de todos ellos.- No te hará nada de nuevo, no importa que ahora trabajen juntos. Si te vuele a lastimar. Solamente dile que soy cinta negra en karate.

Lo abracé y le dije al oído- Gracias, te prometo que lo haré.- cuando me separé le sonreí y miré a los demás.- ¿Nos vamos?

Todos asintieron. Newton y Loan empezaron a hacer las cuentas. Mientras yo evitaba cualquier contacto visual con ellos. Jacob y Grace me dijeron que se veía que ninguno de ellos estaba interesado en nuestra presencia ahí, excepto Carter. Sentía su mirada clavad en mi nuca. Jacob dijo que parecía un poco distraído. Recordé nuestro beso, pensando que tal vez él estuviera pensado en lo mismo. Me reí mentalmente, obviamente era todo menos eso. Una vez que ya habían pagado mi comida, agarramos nuestras cosas y nos fuimos. Fue el único momento en que sentí la mirada de todo el equipo de fútbol, me recordaba tanto a aquella vez... Que apresure mi paso para salir a lo más rápido posible.

Actuemos como si nadaWhere stories live. Discover now