PANSEXUAL [ TAEKOOK ]

CAPITULO UNO [Calcetines]

– Mierda, mierda, mierda — La alarma no sonó, no a tiempo.— sabía que pasaría esto.

La noche anterior, Jungkook se había quedado hablando con algunos amigos, y no, esa no era la causa de su desvelo, no completamente.

– Calcetines, por favor, salgan... Oh, mierda, ahí estás — Mientras se colocaba el calcetín que recién había encontrado, su cabeza golpeó.— No, dios, dios, esto es malo ¿y tu pareja? no puedes dejar desamparado a alguien.

Já, como si pudiese escucharlo.

– Tengo veinte minutos, veinte, veinte, calcetín ven, por favor — Pedía, mientras regateaba todo dentro de su recámara.— ¡que te den, entonces! — Alzó la voz frustrado.— llevaré a tu pareja y a tu hijo, ahg, como sea, cuando te encuentre te correré, quedarás en la calle.

Frustrado, se colocó otro calcetín, un poco -muy- distinto al que ya traía. Para ser padre e hijo no se parecían en nada.

Seguro que la extraviada lo engañó.

Ya sabía que era raro que un día, su calcetín desapareciera y cuando apareció al siguiente día, ya había un par nuevo de calcetines totalmente diferentes, si, muy sospechoso.

¡Ajá! no para él.

Corriendo se dirigió hacia sus zapatos, y los acomodó para poder colocárselos.

– Diez, diez, diez min... ¡maldita sea, jódete! — Gruñó al ver dentro de un zapato, el calcetín faltante.— te dije que te echaría, el aparecer ahora no cambiará mi opinión, estoy explotando a tu hijo sólo porque a ti, se te ocurrió irte con otro ¡y fuera de tu alcance, por mucho! Hubieses aparecido mañan...

– Jungkook, te espero... – Se escuchó cerca la voz de su madre.— ¿otra vez peleando con el pobre? — Frunció el ceño.— como sea, te esperó en el coche, tu desayuno y dinero en la mesa, rápido — Chasqueó los dedos y salió.

— No entiendo como mi señora esta a tu favor y te toma por hombre — Se levantó sacudiendo los pies.— yo bien sé tus mañas, eres mujer abandona hijos, que si no.

Jungkook recogió su celular, llaves, y justo antes de salir del cuarto, regresó sobre sus pasos, tomando el calcetín y metiéndolo en su bolsillo delantero.

– Esta vez no te salvarás — Fue lo último que dijo, antes de salir de su cuarto, recoger lo que su madre había dejado en la mesa y dirigirse al coche.— listo — dijo dirigiendo su vista a su reloj de mano.— ¡Faltan tres minutos! Vamos, ¡acelera! ¡Mamá acelera!

Justo como lo había dicho -o gritado- su madre lo hizo, riendo.— ¡Yah, Jungkook! Te hice una broma anoche, pero estarás a tiempo.

– ¿Un-una broma? — su rostro se ablandó.

– Sabes, ayer cambió el horario — Sonrió.— así que atrasé algo tus relojes — Su madre habló con tanta tranquilidad que casi hacia a Jungkook reír con ella, casi.— imaginaba que no te acordarías y por es...

– Señora mía — Pronunció Jungkook en un tono bajo, como si estuviese controlándose.— yo ya sabía del cambio de horario.

– ¿Ah, si? — Preguntó removiéndose en el asiento, incomoda.

– Si, señora mía ¿y sabes que más? — Okay, lo que venia no era bueno, la señora Jeon lo sabia, pues su hijo le decía 'señora mía' cuando había algo malo, cuando estaba algo enfadado para ser concretos.— la hora debía adelantarse, no atrasarse — la madre de Jungkook palideció.

– Oh no.

– Si.

– No, no, no, no — Un frenón.— Te juro, Jungkook, que si esta es una broma yo...