Capítulo 19

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Al cuarto mes ellos compartieron historias.

Era un día domingo y realmente no tenían nada que hacer más que besarse sobre el sucio sofá de Damon, lo cual no se ve como una mala idea hasta que digo que sus labios terminaron adormeciéndose y se vieron obligados a tomar un respiro.

- Cuéntame de ellos -pidió Damon aun recostado sobre el sofá y colocando el cuerpo de Graham sobre el suyo.

- ¿Quiénes? -se veía confundido.

- De tus padres, Grem, los de verdad.

- Patricia y Wilson son mis padres de verdad.

- No es cierto -se negó de inmediato- ni siquiera los llamas papá y mamá, los quieres pero aun no has olvidado a los padres que tenías antes.

Graham soltó un suspiro porque Damon tenía razón.

- Se llamaban Pauline y Bob Coxon -comenzó a relatar- eran muy jovenes aún cuando me tuvieron, fui un error en realidad. Ellos siempre me lo decían... Mamá fumaba porros todo el tiempo y papá llevaba drogas a la casa, nací en Alemania, por cierto. Ellos estaban en un viaje de "negocios" cuando las contracciones de mamá empezaron...

El tatuador casi sentía sus lágrimas en sus mejillas, pero aun así seguía hablando.

Hablar es necesario de vez en cuando.

- Solo me mantenían a su lado porque los ayudaba a conseguir dinero, a veces me alimentaban con sobras, y yo estaba tan delgado en ese momento, me insultaban, me golpeaban, y jamás me enviaron a la escuela.

- Grem, no tienes que hablar si no quieres -lo detuvo Damon claramente preocupado.

- Quiero hacerlo -aceptó mientras se sorbía la nariz- no quiero ocultarte nada... confio en ti, Damon.

Silencio.

- Cuando Viv nació comenzaron a tratarla igual de mal, ella no lo recuerda, por suerte. Un día unos hombres armados interceptaron el auto en el que papá nos llevaba junto con su droga. Yo iba atrás junto a Viv, ellos odiaban sus gritos y lloriqueos. Ese día mataron a mamá y papá, la policia llegó poco después y nos encontró a Viv y a mí, nos llevaron al orfanato de inmediato, y allí aprendí a leer y escribir, era extraño ya que yo tenía ocho años y le pedía ayuda a niños de cinco. Luego de unos días conocí a Patricia, ella limpiaba los baños, dijo que en cuanto me vio supo que tenía que adoptarme. Le pedí que adoptara a Viv también, ella solo rió y me dijo que lo habría hecho sin que se lo hubiese pedido.

- Ella... Patricia debe ser increíble -murmuró Damon mientras le secaba las lágrimas a su novio y lo abrazaba como si no fuese a soltarlo más.

Como si nada fuese a suceder cuatro meses después.

- Lo es -afirmó- su corazón es tan grande, podría haber dejado que otros se ocuparan. Podría...

Pero Damon lo calló con un beso.

- No lo hizo ¿Bien?... No te dejó allí, nos lo dejó allí... no pienses en una vida distinta. No pienses en como sería todo si no estuvieses aquí, porque eso me obligaría a pensar en como sería mi propia vida si tu no estuvieras aquí -murmuró- ¿Qué es vivir sin ti? -y mientras dijo esto su voz se quebró como una copa de cristal al golpear contra el suelo.

El tatuador sintió que su corazón se encogía en su pecho y lo abrazó torpemente aun en la posición en la que se encontraban. Besó su hombro y luego sus labios, el corazón de cada uno palpitó rápidamente que podrían haberse salido de su lugar.

- Damon, tu...

- Estoy solo, Grem... veo a mis padres muy poco, mi hermana se pierde en su mundo, la única amiga que tengo es Viv y sin ti nunca la habría conocido.

El chico del tatuaje; gramon.Kde žijí příběhy. Začni objevovat