1 march

2.1K 328 16
                                    

Estaba fastiada, realmente lo estaba, mirar hacía la derecha te hacía ver un animado parque con niños correteando por todos lados. Y entre que tenía media hora más caminando, que los dedos de los pies estaban helados y que no aguantaba a los niños, todo era genial.

Rode los ojos porque de nuevo pillaba un semáforo en rojo, no tenía ganas de mucho más que tomar ese examen e irme.

Miré el reloj en la pantallita de mi teléfono: 11:32, vale, como mucho media hora más.

Después de todo, salir una hora antes de lo habitual iba bien.

Cruce sin mucho devoción aunque con la idea de pisar de nuevo el tan helado suelo. Y no fue hasta llegar al otro lado que el claxon de un coche me hizo dar un bote.

Giré alarmada, ¿había tardado mucho en cruzar?

Incline mi cuerpo hacía la ventanilla que ahora se encontraba abierta.

— ¡InHa!

— ¿MinHo? —Parpadeé asombrada y podría decir que hasta mi yo interior soltó un susurro de alivio.

— No serás capaz de ir andando.

— Ese era mi plan. La verdad.

Su gesto fue entre gracioso y tierno, haciendo que mi media sonrisa apareciera.

— Sube, igual vamos al mismo lugar.

Dios, menos mal, mi mente lo soltó de sopetón. E iba a dar la vuelta para subirme al copiloto aunque frené volviéndome sobre mis pasos.

Yoongi iba de copiloto.

— ¿Hacías psicología?

— Incorrecto, hago, no la he dejado.

Dirigí la mirada al espejo viendo la sonrisa perspicaz del moreno aunque enseguida se dirigió a los ojos gatunos del chico de al lado.

— Ya se que Yoongi hace tecnología. ¿Qué estudias tú?

— Derecho.

— Woh. No te pega.

— A MinHo no le pega nada. —Alargó Yoongi haciéndonos callar a ambos.

Mi mirada se dirigió totalmente hacía él, porque siempre que hablaba solía dejarme sorprendida.

— La universidad no es para ti.

— Ya lo sé. —El moreno inclinó la cabeza hacía Yoongi y negó divertido.

¿Qué clase de amistad llevan estos dos? Pensé dirigiendo la mirada hacía los dos chicos y fue allí donde me quedé de público mientras estos conversaban.

— Sung.

Os puedo jurar que mi corazón dio tal bote que el teléfono de mis manos resbaló cayéndose en el suelo del coche.

— Puedes llamarme InHa. —Añadí inclinándome buscando el teléfono o aguantando los nervios tonto que habían salido.

— No te tengo tanta confianza para llamarte por el nombre.

— Ah, claro.

— Quería preguntar, —Yoongi no subía la mirada del teléfono pero me hablaba a mi.— ¿también debes presentar la tesis este año?

— Ah, sí.

Asentí con frenesí, por los malditos nervios. Y el coche se asumió en un gran silencio.

— Pero no tengo tema aún. —Chasqueé porque realmente quería hablar más con él, bueno, con los dos.

— Entiendo.

— Eso tiene mala pinta. —MinHo añadió sin pensarlo.

Y de nueve ese silencio.

Les agradecí más de tres veces por el haberme llevado y haber salvado a mis pies de una severa congelación.

Y me disponía a subir las escaleras que daban paso a la entrada de la facultad cuando la voz de MinHo resaltó de nuevo.

— ¡Eh, oye! ¿Has oído hablar de Jules Cotard?

— ¿Cotard? Mhm, no.

— Pues deberías.

Mi ceño se frunció ante aquello y me quede estática viendo cómo subían la cuesta hasta el campus tecnológico.

cottard › min yoongiWhere stories live. Discover now