Lo que nunca te canté ; Shawn Mendes (Pruébalo parte 2)

Tres (Parte II).

Miro a Courtney y sus ojos hablan por sí solos como si me dijera "lo siento". Debí adivinarlo, maldita sea. Shawn es el "amigo" que Courtney ha invitado. Por eso estaban cuchicheando ella y Bruce, porque no sabían cómo podría actuar yo cuando me diera cuenta.

Al parecer todavía soy muy, muy mala con las indirectas.

Miro una vez más a Shawn, quien saluda a Bruce sonriendo y él le devuelve el saludo con un simple asentimiento de cabeza, y pongo mi mirada en la chica que sigue cantando. No voy a amargarme la noche. Con que no le hable, todo estará bien.

La canción acaba y todos aplaudimos, felicitándola. Cuando ella baja del escenario puedo ver a Reed directamente. Me guiña un ojo y me manda un beso con la mano. Hago que lo atrapo con mi mano e imagino que lo arrugo para después, imaginariamente, tirarlo a un lado. Él me mira con una expresión dolida, en broma, y se toca el corazón, negando con la cabeza. Sonrío como una estúpida.

Luego es el turno de que otra chica suba al escenario. Toma el micrófono rápidamente y todos aplaudimos.

—Bueno, creo que ha sido mucha asquerosidad romántica por el momento, ¿no creen? Bien, mi turno. Esto es para todas las chicas que han sufrido por un chico —las chicas, incluyéndome, gritamos. Por el rabillo del ojo puedo ver a Courtney escrutándome con la mirada—. Y también necesito una acompañante, ¿quién se le mide?

De repente todo lo que tengo y siento dentro de mí en este momento me obliga a que me levante. La yo loca toma control sobre mi cuerpo y antes de que me lo piense mejor, me encuentro arriba del escenario junto a la chica, quien me sonríe. Reed, detrás, asiente con la cabeza, golpeando la batería con las baquetas. Tomo el micrófono que me tiende Harry y la chica se me acerca.

—Soy Mónica —se presenta, guiñándome un ojo—. Avril Lavigne, ¿la escuchas? —me pregunta, por encima del ruido de la gente alentando.

— ¿Quién no? —ella ensancha su sonrisa y vuelve a asentir con la cabeza.

Se lleva el micrófono a la boca y grita para el público: — ¡Esto es Everything back but you!

Desde aquí arriba puedo ver a Abel sonríe como un maníaco y correr hasta al escenario, dejando a Jane en la mesa (quien no se ha dado cuenta que el amor de su vida está justo al lado) y toma su guitarra para pararse junto a mí y tocar con la banda.

—Desquítate todo lo que quieras, ya sé que está aquí —me dice en el oído. Mis ojos van hacia Shawn, quien no deja de mirarme—. Haz que llore.

Mentalmente me doy miles de aplausos a mí misma por haberme levantando precisamente con esa canción. La adrenalina recorre mi cuerpo, desde las puntas de los dedos del pie hasta el último pelo de mi cabeza.

Reed hace sonar la batería y Abel y Harry mueven sus dedos en las cuerdas de las guitarras para dar comienzo a la canción. Me muevo de un lado a otro, con Mónica a mi lado. Ella comienza cantando. Y yo sonrío cuando me doy cuenta de mi línea.

—Today was the worst day: I went through hell. I wish I could remove it from my mind —canta.

Miro a Shawn directamente: —Two months away from you, but I couldn't tell. I thought that everything was gonna be just fine

Esta vez ambas cantamos al unísono.

—The postcard that you wrote with the stupid little note, something wasn't quite right about it —pienso en todos sus maditos mensajes sin respuesta que me envió—. Smelled like cheap perfume, and it didn't smell like you. There is no way you can get around it. Because you wrote