Un Secreto Que Ocultar [Editando]

Cap.14/Una tarde juntos

Nr:Kai

Lloyd ha ido muy bien con sus estudios y, para nuestra suerte, Zane esta ocupado reconstruyendo el cuerpo de Pixal, así que Lloyd y yo nos solemos quedar solos. Hay que aprovechar que nadie nos molesta... Tengo pensado una tarde con Lloyd, en un lugar que creo que es casi tan hermoso como él.

Nya:Kai, ¿en qué piensas? -me preguntó Nya en un susurro-, ¿en Lloyd? -dijo casi riendo.

Kai:Cállate, te pueden escucha -la "regañé" en voz baja, pues estábamos en el living con los demás.

Nya:Hablando del rey de Roma -dijo viendo atrás de mí.

Miré detrás y era Lloyd entrando.

Lloyd:Hola, chicos. El sensei me dijo que que Nya, Jay y Cole tienen una misión en la ciudad. Algo sobre... -dejé de escuchar cuando salieron en dirección a la salida.

Y así es: convencí al sensei de que Lloyd merecía un regalo por ir muy bien en sus estudios. Le dije que lo llevaría a algún lado (sin poner la parte de que somos novios), pero que necesitaba que los demás no supieran si no querrían ir y... Puedo ver que sí me ayudó, ya que Zane y el van a salir.

Era el plan perfecto, sin duda alguna.

[...]

Ya en la tarde invité a Lloyd a aquel lugar, él no tardó en aceptar, así que fuimos.

Con sus ojos tapados y sin saber a dónde íbamos, sería una sorpresa para el ninja verde.

El lugar era un pastizal muy grande, donde había un Sauce, un gran árbol que daba mucha sombra. Debajo de él puse un picnic: una sábana de color rojo y blanco con una canasta encima, unos platos y unos vasos. Un poco lejos de allí se encontraba un lago; reflejaba la luz del sol y le daba cierta belleza al lugar.

Kai:Ya puedes ver -le dije, poniéndome detrás de él y quitando la tela que ocultaba sus ojos.

Lloyd:Es... -Su rostro se llenó de asombro, mirando el escenario con los ojos muy abiertos y una pequeña sonrisa-... es hermoso, Kai.

Me acerqué a él, abrazándolo por la cintura y recargando mi barbilla en su hombro.

Kai:¿Te gusta? -Movió su cabeza para verme de reojo.

Lloyd:Me encanta.

Lo solté cuando sentí que Lloyd giró para quedar de frente uno al otro. Me regaló una sonrisa al mismo tiempo que se acercó y tomó mis mejillas con sus manos. Cerré mis ojos, sintiendo sus labios posarse sobre los míos. Dos sonrisa se formaron entre el beso.