8.

1.5K 56 3
                                    

De : Kenny Ackerman.

Para : Mi dulce hermanita, Kuchel.






Qué estúpido es esto.

Ah... Kuchel, Kuchel, Kuchel...

Tenias que ser tu, mi tonta hermana menor, tu siempre has sido tan diferente a mi, tan frágil y delicada, tan amable, buena y dulce demasiado pura e inocente para este mundo tan asqueroso y cruel.
Este asqueroso mundo que arrebató aquella inocencia, y yo no fui capaz de hacer algo por ti, hacer algo, cualquier cosa, lo que fuera con la intención de salvarte, de hacer algo por ti para que nunca hubieras tenido que huir y dedicarte a aquellas cosas tan... Tan horribles, permití que quien sabe cuantos malditos hombres asquerosos te tocaran y se atrevieran a poner sus repulsivas manos en ti...
Lo lamento tanto, Kuchel.
Lamento no haber sido un buen hermano mayor, lamento no haber podido protegerte como se debía, como me correspondía como hermano mayor, proteger a mi linda hermana a la que tanto quise, lamento no haber podido ser capaz de ayudarte en todo lo que tuviste que pasar.
Pero no creas que eso quita el hecho de que seas una idiota tu también.
Tonta.
¿Como demonios se te ocurre morir de esa manera y ni siquiera avisarme que tenia que cuidar a un mocoso?
¿Sabes todo lo que tuve que soportar cuando entre en aquella habitación y te en esa cama?
Quería saber de ti, tenia que verte desde hace días quería hacerlo porque había soñado contigo varias noches, así que fui a verte y fue entonces cuando ese hombre me dijo que habías enfermado y que ya no te habían podido vender... Qué estúpido fue ese tipo, juro que en ese momento quise matarlo por hablar así de ti, como si fueras un objeto pero me trague mi orgullo y entre en aquel lugar, una habitación sucia, un asco pero era mejor que de donde yo venia, fue entonces cuando te en postrada en aquella cama, tan delgada que se te notaban los huesos y tan pálida que parecías un fantasma, te hable pero no recibí ninguna respuesta, de nuevo intente despertarte y nada, temía lo peor y fue entonces cuando una voz en el rincón de aquella habitación me hizo dar cuenta de la triste realidad.
Un mocoso delgado, demasiado, desnutrido diría yo, estaba sucio, no parecía una persona, parecía un animal a punto de morir.
¿Como había sobrevivido tanto tiempo? ¿Qué hacia allí? ¿Te conocía? Y fue cuando recibí aquel choque tan brutal, te di una ultima mirada ¿Era enserio? ¿Eso era lo que me habías dejado? ¿Un crió todo descuidado? «Dios Kuchel, eres realmente increíble» fue lo que pensé en aquel momento.
Podía ser la peor persona del mundo, un asesino que no temía matar a nadie, un abusivo, un bravucón, podía ser muchas cosas pero jamas seria lo suficientemente inhumano como para dejarlo allí solo con el cadáver de su madre para que el terminara igual. No sabes cuanto me dolió cerrar la puerta de esa habitación aquel día.
Jamas creí que yo seria el responsable de un niño, yo no seria capaz de criarlo pero me encargaría de enseñarle lo necesario para que pudiera sobrevivir en aquel lugar.
Pasaron los años y fue cuando caí en la cuenta que yo ya no debía involucrarme en su vida, que si el saldría de aquella vida lo haría solo, con sus propias alas. que me mataras por haberlo dejado pero el debía estar solo porque conmigo jamas alcanzaría una vida mejor.
Lo hizo.
Y me alegra saber que lo hice un buen trabajo, me alegra haber visto a ese chico en una vida mejor  quiero decir ¿Has visto como esta ahora? Aunque supongo que siempre estarás velando por el y que ahora mismo estas inflando el pecho de orgullo, yo también.
Estoy orgulloso de ese niño al que crié, de mala manera pero me enorgullece saber que ahora es conocido como "El soldado mas fuerte de la humanidad" El gran Levi Ackerman, quien fue hijo de una prostituta y criado por un delincuente ahora sirve para los demás, es feliz, no creas que no averiguo sobre el, claro que pregunto por el.
¿Sabes algo? Cuando antes yo veía a ese niño y ahora que veo a ese hombre, veo a mi hermana, te veo a ti reflejada en el, son tan parecidos que me llega a doler
Lamento no haber podido darle una mejor crianza pero al menos el pudo volar con sus propias alas en busca de libertad.
Cosa que me enorgullece y nunca dejara de hacerlo porque yo conocí los orígenes de aquel hombre y me alegra haber sido parte de ellos.
Todo gracias a ti...
No te preocupes hermanitame asegurare desde lejos de que el este bien.

Con cariño y un gran orgullo, Kenny.  

Cartas de amor a los muertos      Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum