Ethereal [TaeGi]

Capítulo 10

Solo por una vez,
quiero que alguien tenga miedo de perderme

[Narra Yoongi]
Tarde un rato en darme cuenta de lo que acababa de hacer, pero cuando lo hice todo mi cuerpo se quedó helado por la enorme metedura de pata, de la misma manera en que me quedé completamente sorprendido de mis propias palabras. Y todo fue a peor al ver la reacción de Tae y es que mi cuerpo no reaccionó a las señales que mi cerebro mandaba frenético hasta que Tae se encontraba ya algo lejos de la orilla.

Salí corriendo tras él, vistiéndome a la velocidad de la luz sin importar si mojaba la ropa o si me llevaba media playa en los zapatos.

El sol, amenazante con salir, tornó el cielo de un anaranjado picante que se mezclaba con la oscuridad que había, dejando una fina capa de color morado allá donde los colores se mezclaban. Hubiera sido bonito ver el amanecer juntos, pero ahora no era más que un sueño roto, un recordatorio de algo que podríamos haber hecho, de un momento que podríamos haber compartido pero que por culpa de mi insensatez no era más que eso, un sueño.

Apresuré el paso, buscandolo por las calles para poder entablar una conversación con él. Algunas veces lo veía doblar esquinas y yo lo seguía desesperado gritando su nombre sin obtener respuesta.

Llegamos al motel y entró en su departamento, y doy gracias al mal establecimiento en el que vivíamos por tener esas puertas de mierda ya que la puerta principal no se cerró bien.
Cuando entre, Tae y yo entramos en contacto visual por dos segundos antes de que cerrara la puerta del baño desde dentro acompañado del ruido de un mueble moverse.

-  ¡TAE, NO!- Grité mientras cerraba.

Cerré la puerta principal de un portazo y corrí contra la del baño, estrellandome con mi hombro por delante contra esta para intentar abrirla sin éxito. Ahogué una queja.

-  ¡Tae!- Golpeé la puerta mientras decía su nombre preocupado, una y otra vez.- ¡Tae, por favor abre!

-  ¡VETE!- Oí que decía desde dentro.

-  ¡TAE ABRE LA MALDITA PUERTA, POR FAVOR!- Supliqué alterado.

-  ¡HE DICHO QUE TE VAYAS, JODER!- Oí varios ruidos y cosas caerse al suelo, cosas metálicas.

Reconocía ese ruido.

-  Tae por favor... no lo hagas...- Apoyé mi frente contra la puerta cerrada. Traté de hablar más calmado, sincero. - Lo siento... siento mucho todo esto. Por favor...

-  ¡CÁLLATE!- Gritó.

-  Tae, escuchame. Siento mucho lo que ha pasado en la playa. La verdad no se que...- Empecé pero me detuve al oír el agua de un grifo caer al otro lado de la puerta.- ¡Tae, para!
Está es por mis familiares, que solo buscaban la herencia... está por tu falso amor... está por ese tal Jimin que se quedó con tu corazón...

-  PARA TAE. NO LO HAGAS- Grité desgarrándome la garganta- ME LO PROMETISTE, ME PROMETISTE QUEDARTE.

-  Ojalá te mueras, Min Yoongi- Dijo él en pleno llanto.

-  Cariño, yo ya estoy muerto- Susurré.- Tae, escuchame. Pon tu mano en el corazón, ¿Lo notas?, ¿escuchas tu corazón latir?. Se llama propósito, el mío late igual que el tuyo, seguimos vivos por alguna razón. Me gustas, ¿vale?. No soportaría perderte, no soportaría...

-  Calla...- Le oí decir tembloroso.- ¡Cállate! Deja de pretender que te importo y déjame morir en paz.

-  ¡Pero es que lo haces, Tae!- Dije desesperado.- ¡Tu me importas!