Two - Headed Boy (Invisible Boy Serie)

Capítulo 10

Ve a un hombre que se ve sorprendentemente joven y sorprendentemente guapo poniendo la mesa, escuchando a la mujer que está sacando del horno una bandeja de pan con ajo y que le cuenta del tráfico en el camino a casa desde el trabajo. Audrey camina hacia el hombre y se pone de puntillas para presionar un beso en su mejilla, mostrándose radiante cuando le devuelve el beso.

—¡Hola chicos! Él es Sam. Sam, esta es mi madre, Carrie, y mi padre, Henry. Puedes llamarlos así —. Audrey se aparta mientras Henry se acerca, ofreciendo a Sam una gran sonrisa y una mano fuerte.

Sam se incorpora con los hombros hacia atrás y le estrecha la mano con firmeza. —Un placer conocerle señor.

Henry entrecierra los ojos mirando hacia Sam. —Tú padre es militar, ¿eh?

Sam solo parpadea. —Uhm. ¿Cómo lo supiste?

Henry señala con la cabeza hacia el cuerpo de Sam, al conjunto de sus hombros. —Tu postura, tu tono, tu cortesía. Ninguno de los otros amigos de Audrey es así de agradable.

—¡Oye! —. Audrey se ríe y golpea a su padre en el brazo, correteando hacia la cocina para esconderse detrás de su madre. —¡Abby es amable!

—Abby es una listilla, y es por eso que la amamos. Vamos, Sam. ¿Te importa poner los cubiertos en la mesa? —. Henry pasa un brazo por los hombros de Sam y lo guía a la cocina. Carrie está esperando con un puñado de cubiertos y una sonrisa ilegible que golpea a Sam por completo.

—Dios, eres guapísimo. Audrey, no me dijiste que era tan guapo. Dios mío —. Le da a Sam los cubiertos y se estira para ahuecar sus mejillas, tirando de él hacia abajo para poder mirarlo directamente a los ojos, admirándolos como si estuviera mirando la Mona Lisa. —Lo juro, todos los colores del mundo están en tus ojos.

—¡Mamá, para! Lo estás avergonzando. Sam es un poco tímido —. Audrey está justo al lado de Sam, con una mano alrededor de su antebrazo, lista para arrastrarlo lejos de su madre. Las mejillas de Sam están ardiendo bajo las palmas de Carrie y él baja la mirada, una sonrisa tímida apareciendo en sus labios.

—Eh..., gracias, señora.

—Háblame de ese novio tuyo. ¡Creo que Audrey está medio enamorada de él y ni siquiera lo conoció! —. Carrie apila los trozos de pan caliente en un plato y se lo pasa a Audrey antes de coger cinco vasos y seguirla a la mesa. Sam parpadea hacia Audrey con un poco de pánico, congelado a mitad de camino de la mesa con los cubiertos de plata en la mano.

—Mamá por favor, no lo hagas —. Audrey también se sonroja un poco, estirando las mangas hasta el límite para poder enroscar la tela en sus manos, ocultándolas como siempre. —No lo abrumes, ¿vale? Solo comamos.

Henry abre la puerta que lleva al patio trasero, levantando la voz para que se le oiga. —¡Stephen, vamos! ¡Puedes seguir más tarde!

Un chico un poco más bajo que Sam entra corriendo a la cocina sudando. Sonríe a Sam y se acerca para ofrecerle su mano ahuecada. Ok, ese es el apretón de manos del tipo.

—¿Qué pasa, hombre? Soy Stephen, el hermano de Audrey.

—Hey, soy, uh. Soy Sam.

—Impresionante —. Stephen le da una sonrisa de un millón de dólares y da un paso atrás, asintiendo con la cabeza hacia las escaleras. —Mamá, me voy a dar un lavado rápido. Vuelvo enseguida.

Desaparece con un estruendo de pisadas por las escaleras y Carrie se sienta a la mesa. —Bueno, no voy a esperar. Maldita sea, tengo hambre.

Audrey se sienta al lado de Sam y Henry a continuación, comenzando a servirse comida en sus platos sin ninguna ceremonia. Sam se relaja un poco y coge un pedazo de la legendaria tostada de ajo cuando le llega el plato.