Capítulo 16

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Samira Rockefeller

Salí de su cuarto, después de todo  necesitaba descansar, además no me permití seguir allí después de todo lo que dijo.

Era lo que quería escuchar, pero se sentía muy mal tener que oírlo de él en ese estado.Si pudiera hacer feliz a todo el mundo con solo desaparecer, no dejaría ni siquiera huellas y haría lo imposible para que todo se aclarara de una buena vez.

Quiero protegerlo alejandolo de mí. 

Sé que eso no bastaría y que es imposible, pero a pesar de eso lo intento.
Lo intento, porque sé que en algunos momentos, aunque sean pocos, hubo una linda experiencia compartida. 

A veces se necesita saber que es la tristeza, para poder conocer la felicidad.

A veces me detengo a pensar que quizás lo más probable es que en mi vida me enamore de alguien con quien no podré estar nunca, sea cual sea la razón. Yo nunca busque a nadie para ser feliz, creía que no tenía ojos para eso del amor por mis traumas y demás, un día y sí, el día menos esperado lo conocí , un desconocido, fue algo extraño, misterioso, inquietante y tierno a la vez, después de un largo tiempo solo nos miramos a los ojos y sabíamos que estábamos atrapados uno con el otro, fue increíble, maravilloso, no  quería cambiar eso por nada, ese sentimiento no se finje no es mentira solo nace y florece sin que uno pueda controlarlo... 

 Odio decirlo con tanta pena pero lo amo... Él ha hecho cambios profundos en mi, solo espero el momento de poder verlo feliz aunque no sea conmigo. 

Al salir de su cuarto, Priscila una chica del equipo A me detiene por que al igual que todos en el club estábamos angustiados por Sebástian. 

— ¿Como esta? — Preguntó Priscila mordiéndose las uñas. Ella fue quien encontró a Sebástian en la entrada al llegar. 

— Esta mejor, se despertó hace poco, pero lo dejé descansar. No recuerda mucho de lo que pasó y me gustaria que lo mantengan así. 

—Que bueno que el señor está mejor, todas estábamos preocupadas, su sangre aun sigue en la entrada. Fue algo muy lamentable de ver, lo bueno es que todo salió bien. ¿Salió todo bien en sus exámenes?

—Salió perfecto, en las tomografías todo estaba bien, nada en su cerebro, no tiene ninguna infeccion por que fue atendido de inmediato. Lo demas, bueno... todo bien. La herida sanara poco a poco.

—Gracias a Dios. Me alegro por él. 

— Lo bueno es que esta mejor, Priscila. Gracias por llamar a Fausto justo en el momento de verlo desplomarse en el suelo, de no ser por ti...

— No hay que agradecer, todo por mi jefe.

Le dejé el encargo de no dejar pasar a nadie a la habitación de Sebástian hasta que él lo permitiera. No se encontraba en condiciones de recibir a nadie y menos ahora. Además, está recuperando la memoria y tiene una fuerte jaqueca.  Con todo el drama y que hace pocas horas llego del hospital es un hombre de acero, tiene más vidas que un jodido gato.

Ordené que limpiarán la sangre, las personas se fueron yendo del lugar, no por las chicas, si no, por lo sucedido. Y que Fausto cerro el club por si algún escándalo salga en los periódicos. 

— Samira, tenemos que hablar. — Era Fausto, venía a paso doble y muy molesto. Su rostro mostraba como se sentía, agotado y con ganas de salir corriendo y dejar todo este drama atrás. 

Ahora no quiero más drama. — Pensé mientras él se acercaba.

— Es necesario que hablemos, Samira. Esto no se puede quedar así, no puedo seguir con esto, como si no me afecta, yo... 

Acuerdos [Vol 2] [Trilogía Relaciones Toxicas]Onde histórias criam vida. Descubra agora