best of me [ym]

[ten] Buenos y malos candidatos.

Observé a YoonGi hyung con confusión, él se encuentra mirando alrededor mientras caminamos hacia la cafetería.

- Hyung, cuando invita a almorzar a una persona debe prestar atención a esa persona. - Digo. - No al resto.

- Yo no te invité.

- Me obligó, es lo mismo. - Comento rodando los ojos ante su frialdad (de la cuál ya estoy acostumbrado).

Estos días YoonGi había estado más extraño de lo normal, y comienzo a creer que no va a seguir ayudándome a mejorar mis poderes. Tal vez se rindió y se dio cuenta que es tiempo perdido.

Ayer estábamos en la biblioteca y de la nada comenzó a preguntarme por mis antiguas relaciones.

- Bueno, creo que es muy obvio que soy gay, así que sólo he salido con chicos.

- ¿Has llegado a enamorarte de alguno?

- No, y dudo que eso pase algún día.

No sé por qué está tan curioso acerca de mis relaciones, o de mi gusto por los chicos.

Oh no. No me digan que el hijo de los Min, una de las familias más poderosas de nuestro mundo, está enamorándose de mi.

Lo miro cautelosamente, intentando inspeccionarlo.

- ¿Qué te sucede? - Pregunta mientras elige una mesa. - ¿Todavía sigues con una contusión por aquel día que te desmayaste en el bosque?

Olvídenlo, es imposible que alguien como YoonGi se fije en mi.

Además no es algo que me interese, un chico así de frío y soberbio definitivamente no es mi tipo. Mucho mejor si no hay confusión entre nosotros.

- ¿Quieres que te traiga el almuerzo? - Pregunta mirándome directamente a los ojos. Me pareció raro porque YoonGi no es de hacer eso.

- Sí, por favor. - Sonrío como un niño pequeño pero el único sentimiento que lucía haber provocado en YoonGi fue aburrimiento.

YOONGI

Tengo que pensar muy bien en los posibles candidatos.

Me alejo observando el panorama de todos los estudiantes y comienzo a pensar en opciones.

Por un lado está Jeongguk, pero es demasiado rebelde e inmaduro como para que JiMin pueda llegar a sentir algo. Además que no tiene ninguna característica de un dragón.

NamJoon dijo que las cosas que suceden en la realidad varían con las que sucedieron en la leyenda, así que tal vez el chico elegido no llegue a tener las mimas características que el dragón.

Sigo buscando y observo a Kim TaeHyung. Pero lo descarto enseguida al ser el mejor amigo de JiMin. Si algo existía entre ellos dos ya debía de haber surgido.

Ningún chico cumple con las características que debe tener el merecido dueño del corazón de JiMin.

Suelto un suspiro en el momento que la mujer de la cafetería me entrega la comida y la coloca en mi bandeja.

- Gracias. - Murmuro y voy hacia JiMin.

Un elefante se columpiaba sobre la tela de una araña...

Una mueca de diversión aparece en mi rostro al escuchar los pensamientos de Park. Simplemente no puedo creer que es él el Ave Fénix.

Probablemente su dragón debe ser alguien con un buen corazón, que sepa proteger a quienes ama y luche por lo que deba.

Además los dragones son controladores del clima, pero como NamJoon es el único del Internado capaz de hacer eso, me conformaría con un chico que pueda controlar algún elemento.

Entonces la risa de HoSeok se hace presente y aparece frente a nosotros.

Me siento como aquellas caricaturas donde una lámpara prende arriba de mi cabeza.

- ¡Hola, hyung! ¡Hola, Jiminnie! ¿Cómo se encuentran hoy?

Aigo~ Hobi hyung es taaaan adorable~

Un carraspeo escapa involuntariamente de mis labios pero, ignorando el pensamiento de JiMin, le sonrío levemente a mi compañero de cuarto.

- Realmente hace semanas que no sé lo que es sentirse bien. - Comento. - Por alguna razón tengo ganas de encerrarme en mi habitación y no salir nunca más.

Siento la mirada fulminante de JiMin y lucho para que ninguna tonta sonrisa se escape por mis labios.

Al menos hacerlo enfadar logra recuperar mi humor.

- Tienes suerte de tener a JiMin a tu lado cuando no te sientes bien. - Dice sin lograr captar mi broma pesada. - ¿Sabes de quién soy mentor? ¡De Jeongguk!

- ¿Qué? Pero si tu poder es el agua y el de Jeongguk es el fuego. - Habla Park sin comprender.

- Son elementos, está dentro de la misma categoría. Aprender a dominar el agua es lo mismo que aprender a dominar el fuego. - Soy yo el que responde mientras como parte de la comida que había traído para JiMin.

- Intenté que me cambiaran pero no lo logré, realmente deseo ser mentor de cualquier otra persona ahora mismo.

Observo a HoSeok con una ceja alzada. Es gracioso que las personas se olvidan que puedo leer sus mentes.

Mi mirada pasa hacia JiMin y él sonríe notando que había descubierto el secreto de mi compañero de habitación.

- Entiendo, debe ser estresante enseñarle a un niño de 15 años. Son tres años de diferencia y a esa edad se vuelven muy inmaduros. - Comento con fingida importancia.

- Bueno... - HoSeok titubea. - Jeongguk no es tan inmaduro como parece, de hecho sabe comportarse cuando se debe. Es rebelde sí, pero está intentando cambiar. - Parece defenderlo. - Además está a punto de cumplir los dieciséis.

JiMin y yo asentimos sin decir una palabra y nos lanzamos miradas cómplices.

Pero entonces, si HoSeok ya está enamorado de alguien debo descartarlo de los posibles dragones.

Esto parece más difícil de lo que creí.

Todo sería más fácil si supiera quién está enamorado de JiMin, pero parece que ni el chico es conciente de ese sentimiento todavía.

Sea quien sea el chico, estoy comenzando a odiarlo por retrasar todo mi trabajo.

Aunque por alguna razón me siento totalmente relajado.

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