Lo siento, soy gay [RyanxTom]

Es real.

Ryan había estado muy ocupado durante los últimos meses. Se había divorciado de Blake oficialmente y públicamente, provocando un gran asombro a nivel masivo pero ellos explicaron que no habían terminado en malas condiciones, que seguirían siendo muy buenos amigos y disfrutarían de su compañía de vez en cuando saliendo con las niñas como familia.

Luego, consiguió un apartamento porque al estar soltero sentía que una casa sería demasiado para él solo, a pesar de que las niñas se quedaban con él algunas semanas. La mudanza fue agobiante y le dio varios días angustiantes, sobre todo cuando por el movimiento de polvo le dio un horrible resfriado que le duró toda una semana. Terminó por quedarse en su antigua casa durante ese tiempo que estuvo enfermo, siendo cuidado por Blake.

El rodaje de su película comenzó solo un par de semanas después de la mudanza y se vio a sí mismo agradeciendo por eso. No podía soportar un día sin tener la mente ocupada. Cuando no estaba ocupado, su cerebro comenzaba a divagar y entonces se llenaba de pensamientos y recuerdos de aquel chico que quería olvidar.

Se le hizo tan malditamente difícil, tan jodidamente doloroso. Se preguntó si tenía que vivir toda su vida con esa punzada en su pecho, con esas ganas de querer llorar, pero por encima de todo, con esas ganas de correr hacia él. Quería tanto volver con Tom que cuando entraba al navegador a buscar cualquier otra cosa, se sorprendía buscando vuelos a Londres. Más de una vez perdió dinero por boletos de avión que compró y luego regaló.

Estaba allí, intentando pensar en cualquier otra cosa mientras estaba en un receso del rodaje. Tuvo ganas de embriagarse hasta perder la conciencia solo para no tener que vivir con eso. Pero claro, estaba en horas de trabajo y no podía beber. De pronto se puso ansioso, justo cuando su cuerpo comenzó a añorar alcohol o a Tom, cualquiera de las opciones era imposible para él tener en el momento, así que estaba tamborileando con los dedos en la mesa frente a él mientras respiraba profundo frente al espejo.

- Puedes hacerlo, idiota. Solo faltan tres minutos más, sopórtalo por tres minutos más y pasará. -Se repitió una y otra vez-

Y entonces un recuerdo lo azotó. El recuerdo del último mensaje que le envió Tom hace dos meses.

No sé por qué me había ilusionado, perdóname. Seguro fui muy molesto este tiempo, ¿no? Siendo un joven estúpido que se enamora con facilidad aún cuando nunca hablamos sobre tener una relación. Perdóname por ser tan inmaduro e infantil, por favor. Me lastimaría todavía más pensar que voy a perderte como amigo también, porque eres fantástico, Ry. Fue difícil para mí hablarte desde un principio, está bien jodido que después de mis esfuerzos ya no hablemos más. No sé porqué pensé que podrías fijarte en mí, no sé de dónde salió tanto egocentrismo de mi parte, así que perdóname. Mil veces perdóname. Si estás de acuerdo en que sigamos siendo amigos, escríbeme, pero si estoy siendo demasiado molesto ignora este mensaje como hiciste con mis otros mensajes.

El puño de Ryan golpeó la mesa con frustración y luego le secundó su cabeza, esta última golpeando una y otra vez. En un último golpe se quedó con la cabeza a poyada en la mesa pero comenzó a gritar cuando tuvo el impulso de tomar su celular y responderle, pero no para ser amigos, sino responderle que quería ser algo más. Así le encontró el director y después de jurar varias veces que no estaba drogado, volvió al trabajo felizmente.

Se despidió de sus compañeros actores y del staff para caminar hacia su auto. Quería beber algo y estaba tan feliz de que ya podía ir a casa y beber de alguna botella de cualquier bebida alcohólica. Una vez abrió la puerta de su apartamento, su plan se vio frustrado por una llamada de RDJ, que tomó de mala gana, sentándose en el sofá en medio de la sala.

- Hey, Downey.

- No me respondas como que no has hecho nada mal, sabes bien por qué te llamo.-Escuchó la voz enojada pero calmada del otro- Dispara.