CAPÍTULO IV

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CAPÍTULO IV

Hey you with the red dress onI gotta find a way to take it offI got a lot of love and it's growing strongWhen I see you with your red dress on.

Nueva York, marzo de 1942

Roxie, ¿estás bien?

Cassandra se sentía triste al ver a su mejor amiga tan apagada. Habían pasado ya dos meses desde que ambas habían conocido a James y Steve y todo había cambiado. Y hacía poco más de una semana que James les había dicho que al fin había sido destinado al frente. . . y que tendría que irse.

–Sí –contestó la muchacha francesa cabizbaja.

Pero Cassandra sabía perfectamente que era mentira. Llevaba una semana deprimida sabiendo que el tiempo se escapaba como agua entre sus dedos. Estaba irremediablemente enamorada de James, de eso estaba más que segura, pero era como si hasta aquel momento hubiese decidido olvidarse y hacer como que no existiese ninguna guerra a la que él tendría que partir de un momento a otro.

Se iría al día siguiente.

Y Steve se estaba esforzando por partir también. Sabía que Roxie no estaría sola. Le había pedido que ella se quedase siempre a su lado. . . y eso haría. Nunca la dejaría sola, al menos hasta que James volviese del frente.

Le pasó el cepillo por el cabello a Roxanne. Aquella sería su última noche con Bucky hasta que regresara, sólo dios sabía cuando, y tenía que estar preciosa. Por supuesto que ella misma también saldría, y Steve también, pero habían maquinado dejarles a solas en cuanto tuviesen oportunidad. Debían disfrutar de aquella noche solos.

Roxanne se miraba la punta de los zapatos. En su mente se repetía una y otra vez la conversación que había tenido con Bucky días antes, cuando le había dicho que finalmente tendría que irse. Cuando sintió como un millar de agujas se clavaban en su pecho y el aire se le escapaba de los pulmones. Recordaba perfectamente aquel dolor en su mirada, la forma en la que doblaba los dedos irritado, y era incapaz, por primera vez desde que se conocieron, de mirarla a los ojos.


Era marzo, pero el frío perduraba. La primavera se estaba tomando con calma el aparecer por fin. Roxanne y James paseaban tomados de la mano por Manhattan como una pareja normal y cualquiera. Ella se había arreglado un poco, él se había esforzado al peinarse, pero guardaba una terrible noticia que le daría la vuelta a todo. Le escocía en el corazón y le quemaba la lengua. Las palabras luchaban por salir, pero debía pensarlas bien para que tuvieran sentido, para que no le rompiera en mil trocitos.

–Roxie –la llamó.

Ella alzó la mirada y sus labios se curvaron en una tímida sonrisa. Adoraba escuchar su nombre de él. Le adoraba completamente.

–Tengo una mala noticia.

Sus labios temblaron y la sonrisa desapareció poco a poco. Él no la estaba mirando. No estaba perdido en su mirada, en su todo, sino en sus propios pensamientos. Le temblaban los dedos de las manos. De repente, paró en seco.

–En una semana seré enviado al frente. Primero entrenaré en campos, pero luego iré a pelear. Defenderé mi país con mi vida.

Roxanne ya se imaginaba lo que aquella mala noticia iba a ser mucho antes de que él dijese nada, pero seguía doliéndole como un cuchillo clavado en el alma el que él no la mirase a los ojos, que no alzase la mirada hacia ella y la abrazara fuerte.

Red Dress [Bucky Barnes]Where stories live. Discover now