열 넷

2.4K 282 89
                                    

La temperatura ha descendido a tal punto que me cuesta creer que no esté en pleno invierno, pero no... no es la estación, no es el viento ni ningún factor ambiental, es el impreso sobre mis manos, que me atosiga y me orilla al borde de la psicosis.

Esto no podía estar pasandome a mí, esto no tenía que ser más que una cruel e irrisoria broma. No debía comerme la cabeza y la razón tratando de adivinar quien podría ser el responsable de esta atrocidad.

«Conviviré con los tuyos» «Pusiste sus vidas en mis manos»
Esas frases le daban un toque distinto al miedo que sentía en comparación a la primera nota, está vez era más que desgarrador y acuchillante. Es esquizofrénico y en contraposición más real.

¿Qué haría? ¿Cómo lo soluciono? ¿Estaría bien contárselo a alguien?
No sé cuanto o nada puedan ayudar pero yo pondría al tanto del asunto a la policía.

El teléfono suena otra vez interrumpiendo mis pensamientos, lo miro con cierta paranoia dejando que zumbe. El ruido es insitente, lo sujeto y exhalo reconfortado al ver el nombre de Jimin en la pantalla.

—Jinnie hyung, ¿Qué tal te viene una noche de cine con Hoseok y conmigo?—exclama Jimin apenas le doy a contestar.
—No es buen momento yo...
—Por como te oyes se nota tienes problemas, y yo soy el remedio—asegura.

—Tengo algo que hacer antes.
—¿Es algo que no puedes hacer mañana?
—No, pero...
—No se diga más, te recogemos en 15 minutos.
—Espera...
—¿Qué? Hyung no te oigo—dice medio riendo y cuelga.
—Tramposo— le digo a la pantalla.

Hoseok y Jimin resultaron ser la fórmula perfecta para hacerme olvidar. Sus chistes, bailes y diálogos sin sentido eran tan graciosos que incluso el guardia que nos escolto fuera de la sala de cine parecía estar a punto de estallar de la risa.

El camino a mi casa no fue diferente, cantaban a todo pulmón cada canción que sonaba en la radio, me hubiera quedado afónico de tanto reír de no haber sido porque la imagen de mis queridos acompañantes siendo lastimados aparecía en mi mente una y otra vez, haciendose más presente en la soledad de mi habitación rodeado de oscuridad y desolación.

El camino a mi casa no fue diferente, cantaban a todo pulmón cada canción que sonaba en la radio, me hubiera quedado afónico de tanto reír de no haber sido porque la imagen de mis queridos acompañantes siendo lastimados aparecía en mi mente una y ...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Estaba muy nervioso y abatido, giro la vista hacia el reloj sobre la pizarra cada cinco minutos, después de esta clase iría a la estación policial.
Espero me tomen enserio, no hay nada de insignificante en esta amenaza de muerte; siento ganas de llorar de tan solo pensar que ellos vean esto como una broma y me nieguen su ayuda.

Por otro lado me extraña que Taehyung no haya asistido a clases, aunque no sé porqué, se supone es un prodigio en la materia así que saltarsela no es tan increíble, para nada esto tiene que ver con lo que paso ayer ¿Verdad?
—Y dicho esto ya pueden marcharse—anuncia el maestro poniendo fin a la clase.

Camino a prisa en busca de la salida, encontrandome en recepción con una pequeña aglomeración, una chica llorosa en medio de ellos, despertando mi curiosidad por lo que me acerco a ver que ocurre.

PERDIENDO MI NORTE (Taejin/Kookjin)Where stories live. Discover now