Vida en el Norte

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Estamos en una tierra donde la vida era una celebración bastante importante, ya que por los tiempos que corren en esta región, el pasto no abunda cerca de casa y el principal sustento es la pesca que provee el Río Frusen y el Puerto de Kallt. Esto estaba a punto de acabar, pues entre las altas paredes de roca y hielo del Templo de Is, gritaba una mujer y pronto se escucho el llanto de un niño.

- Matrona: ¡Adelante majestad, empuje, ya se le ve la cabeza!

- Gina Rajastak: ¡ya lo hago! ¡Aaaaaah duele! (resopla intensamente y empuja)

- Matrona: Excelente majestad, ya ha sacado la cabeza solo un poco mas. - A la doncella: Misella llama al rey -Misella con prisa, corre hacia la sala adyacente donde se encontraba regio y preocupado por su reina, Näve Rajastak, el rey.

- Misella: Mi señor vuestro primogénito ha nacido, daos prisa. 

El rey, oyó el llanto, así que rápido y audaz acudió a la cámara, y cuando entró en ella, pudo ver a la reina con su primogénito en brazos - no pudo evitar soltar una lagrima que se congeló en su mejilla-, se aproximo a ella, miro a su primogénito y luego a su reina, la besó intensamente, de una manera que haría desaparecer el frió que allí existiera. La reina medio atónita por el beso mirándolo a los ojos preguntó:

- Gina Rajastak: ¿Amor, que nombre le pondréis?

- Näve Rajastak: -Pasando la mano con ternura por el rostro del nacido- Joseph, Joseph Rajastak. 

La matrona que aun estaba presente reclamo la atención de la pareja:

- Matrona: Perdón sus majestades, no querría interrumpir tan hermoso momento pero... mirad su frente y el dorso de sus manos.

- Näve Rajastak: ¿Que les pasa? ¿Tienen algún defecto?

- Matrona: Al contrario majestad, una bendición.

El Rey lo comprobó y casi no pudo creerlo, incluso pasó las manos para intentar borrar lo que veía pero no pudo. Su hijo portaba las tres marcas de la peculiaridad de los Rajastak, tres marcas de nacimiento en forma de gota de agua. De pronto el niño abrió los ojos, eran de un azul tan intenso, que casi podía congelarte con la mirada. El vio a su padre y levantó las manos, con este gesto el hielo del suelo en forma de punta se elevo y al caer en el regazo de su padre, se derritió como si el sol mas brillante de verano hubiera tornado sobre este.

- Näve Rajastak: Llamad al Anciano de Regnskog. Ha nacido un Peculiar.

- Anciano: -Desde el umbral de la puerta- No es necesario buen Näve, estoy aquí. 

Aunque importante, esto no era lo único que pasaría en el Reino de Nagar.

HISTORIAS DE NAGARWhere stories live. Discover now