Mi Amor Accidental Eres Tu. Love By Chance

Capitulo 16 Ae

+ Quizás tengas razón, este no es asunto mío.
+ tampoco, tampoco es asunto mío si tu sigues enamorado de él.

- No, eso no, nunca más podré amarlo.

La sola idea de pensar que Pete siguiese amando a ese sujeto me dolía, no se exactamente el porque, pero no me gustaba esa idea

+ ¿entonces porque lo defiendes?

Necesitaba saber la razón de todo y el único que podría darme una explicación estaba frente a mi.

- No es por él,
- no quiero que mi madre se entere de esto, no quiero que ella se preocupe demasiado.

Una ves que supe su razón, mi enojo no tenía motivo para seguir existiendo.

+ Lo siento Pete, me enoje pensando que todavía podías estar enamorado de ese tipo.

- No, Ae.
- nunca mas.

+ Te creo.

Tome su mano suavemente y la sujete con la mía, deseaba transmitirle mi calor aunque sea sólo de esa forma.

+ Pete, ve a darte un baño para que no te resfries, yo iré a una farmacia.

- Ok.

Salí y regrese lo más rápido que pude, gracias al cielo la farmacia estaba cerca y pude comprar lo necesario, espere un momento en la habitación hasta que él regreso, estaba envuelto en una bata de baño blanca como su piel misma.

+ Ven, déjame ver tus heridas.

Poco a poco fui abriendo la bata que cubría su cuerpo, los golpes se marcaban claramente en su piel, así que no fue difícil ubicarlos.

Era la primera ves que observaba el cuerpo de otro chico tan detenidamente, su abdomen era mucho mas delgado y musculoso que el mío, cuando comencé a aplicar la crema para heridas, el sólo contacto de mis dedos con su piel hicieron que Pete soltara una especie de gemido y de inmediato tapó su boca..

+ he, no tienes porque ser tímido, yo también soy un chico.

No se porque dije Eso, quizás sólo quería hacer que él se sintiera un poco mas tranquilo.

Esparci la crema con mucha delicadeza, parecía como si Pete fuese a romperse por el dolor que sentía así que trataba de ser muy delicado, era una sensación muy agradable, era como si mis dedos estuviesen tocando una nube, mis ojos se cruzaron con los de Pete y nos quedamos mirándonos fijamente el uno al otro durante un buen momento, sin querer presione más de la cuenta causando que Pete reaccionara al dolor.

+ Lo siento, pero ya está listo.
+ creo que debería irme ya.

- Ae.

Apenas me di la vuelta, Pete sujeto mi camisa con fuerza, pero cuando regrese a verlo, él la soltó.

+ ¿ que sucede?

- No, no es nada.

+ Pete, si quieres algo, sólo dímelo.

- Podrías quedarte esta noche aquí.

Verlo pedirme algo con una mirada de niño pequeño era casi imposible de resistir.

+ Ok, me quedaré.
+ ¿puedo darme un baño?

- claro.

Entre rañidamente a la ducha, no quería dejar tanto tiempo sólo a Pete me bañe y salí lo más rápido que pude, me envolví con una bata que había en el baño y regrese a la habitación.