18- Botella

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Revolvió el contenido de la olla lentamente, procurando que la mezcla se uniera de forma perfecta. Podía oír una respiración agitada en la habitación siguiente, así como el crujir de la leña que es consumida por las llamas de la chimenea. Encontró a la muchacha a las afueras de una iglesia, con claras heridas punzantes en su cuerpo y un rastro enorme de sangre cerca de la clavícula. 

Al principio creyó que estaba muerta, su palidez y frialdad lo hacían suponer eso. 

Hasta que revisó sus ojos; carmesí. 

La traslado a su cabaña que por suerte no quedaba muy lejos, donde allí podría proveer la ayuda que claramente necesita. 

Shouto es de los pocos hechiceros que manejan dos elementos: hielo y fuego. La gente lo tachaba como un brujo debido a la herida de su rostro y por el aspecto atemorizante que solía transmitir, pero lejos de su vestimenta, en realidad solo es alguien que viaja tratando de brindar ayuda. 

Aunque bien sabe el, que esto es para redimirse a sí mismo de los pecados que cometió con anterioridad.

Con un cucharón, traspaso parte del líquido a una botella de vidrio. Debía dejarla reposar a la luz de la luna durante una noche. 

Dejó la botella encima de la ventana y salió de la habitación.

No se sorprendió cuando se encontró con una figura demacrada esperando por el. 

—La poción calmara tu sed por un tiempo, hasta que te acostumbres a tu nueva vida —Dijo de forma calma, siendo consciente que la vampira en cualquier momento podría saltarle al cuello. 

—¿Quien eres tu? ¿Y por qué me estás ayudando? —La iniciada se encogió en su sitio, agarrando su cuello con una mano. Toda su garganta ardía, la sed era insoportable. 

Shouto se acercó sin miedo alguno, apoyando su propia mano sobre la de ella. El frío que recorrió su cuerpo la alivio. 

—Todoroki Shouto, el hechicero de fuego y hielo —Suspiro—. Serias peligrosa si vas suelta por allí. 

Sabe que lo último dicho es una mentira, pero ella no tiene por que enterarse. 

(T/n) lo observó con sus ojos rubí, los ojos de un depredador. 

Hay algo de el que se le hace familiar, mas no puede recordar que. 

Murmuró un agradecimiento por lo bajo y el color de sus ojos volvió a la normalidad. 


Ah, allí está, aquel color que Shouto recordaba. 


INKTOBER 2018 [BNHA x Fem!Lector]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora