Descanso y partida

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Entre en la habitación, tenía un gran espacio ya que solo había una cama, un armario y una cómoda, pero eso si con una gran ventana, por la cual se podía ver la ciudad, era increíble. Al lado estaba el cuarto de baño y había una enorme bañera circular, me desvestí y me metí allí a relajarme. Cuando acabé nos llamaron para ir a cenar con Aphrodita, seguimos a las vigilantes, tan solo descendimos un par de plantas, y entramos a un enorme salón, con una gran alfombra y una mesa en el centro, pero lo que más nos impresionó fue la lámpara de araña gigante de madera dorada que se situaba sobre nuestras cabezas, con grandes ventanales y cortinas finas , que a veces ondeaban a causa del aire, Aphrodita nos pidió que nos sentáramos, aun ser la mesa pequeña, la distancia entre cada uno era de un metro o más, a mi no sé porque me pidió estar en la esquina de su lado derecho, no me vestí con lo que llevaba puesto sino que cogí uno ropajes que estaban en el armario, entonces nos trajeron comida, parecía deliciosa pero claro vegetales, además unos hombres empezaron a entrar semidesnudos y otros con instrumentos, estos se pararon y empezaron a tocar mientras esos hombres bailaban, Aphrodita se disculpo si no les gustaban, pero a ella les gustaba la forma de moverse de esos hombres, era una de las pocas formas que tenia de distraerse y ya que tiene invitados. A mí no es que me encantasen pero al menos bailaban bien, eso sí estaban musculosos y llevaban como un chaleco y una faldita casi transparente, lo que nos avergonzaba a nosotros, pero nada que envidiar. Al terminar de comer le agradecí su hospitalidad, me levante de la mesa y mis compañeros conmigo mientras ella se quedaba en la mesa sola. Subí hasta las habitaciones y me fui a la cama, con los ojos cerrados pensé. Gracias a la amabilidad de Aphrodita, hemos descansado y recuperado fuerzas pero mañana seguiremos nuestro camino, saldríamos temprano. Es increíble que todavía no haya recibido una carta de la situación de mi padre, aunque más preocupante es no tener noticias sobre el estado de mi pueblo, encarcelado, espero que sean fuertes y resistan un poco más, también es increíble que hayamos encontrado a alguien más que se nos haya unido al equipo, me refiero a Atena, luego me perdí en mis pensamientos como siempre hago.

Al día siguiente con los primeros rayos de sol,me levante me puse mi ropa, que extrañamente encontré que estaba limpia, me coloque mi mochila, y espere en el pasillo a que salieran todos, y nos bajamos juntos, hasta la entrada, pero en la sala del trono, vimos que Aphrodita ya estaba allí, nos pareció extraño pero fuimos a despedirnos, pero a ella se le ocurrió una idea nos dijo. -Que tengáis buen viaje, pero antes de iros se me ocurrió una idea, ¿Qué tal si os acompaño? Si eso os acompañare-.    

Hermes, Heraldo del lagoWhere stories live. Discover now