Enemigas intimas CAMREN

Parte 2

-      ¡Hola! –Saludaba efusivamente Camila a su amiga y compañera Normani, abrazándola.

-      Todavía sigo sin entender por qué me saludas como si hiciera una vida entera que no me ves –Decía Mani, riéndose, correspondiendo al abrazo.

-      Porque eres mi mejor amiga y te quiero  -Respondió con una amplia sonrisa, rompiendo el abrazo- Oye, vine a darte una buena noticia.

-      A ver, sorpréndeme.

-      Nos asignaron un caso importante, esta noche tenemos una salida –Anunció.

-      -Asintiendo con la cabeza- Vale, ¿aviso a alguien o vamos nosotros solos?

-      No, nosotros solos. Ve al despacho de Austin a que te pase los informes para que te enteres de qué trata el caso.

-      Ok, pues voy para allá –Dijo, dispuesta a dirigirse al despacho de Austin.

-      No, no, espera un momento –Pidió, agarrando a su amiga del brazo- Tengo un problema.

-      ¿Cuál?

-      Estoy enamorada.

-      Ay no –Suspiró- ¿Otra vez?

-      No, no, escúchame… esta vez es enserio.

-      -Se rió- Sí, claro, como todas las anteriores.

-      Mani, de verdad –Afirmaba, muy segura de eso.

-      A ver, ¿quién es?

-      Nick

-      ¿Qué? –Se rió- ¿El del gimnasio?

-      Es que… es tan… tan…

-      -Mirándola mal- ¿Tan qué?

-      Pues no sé, pero tiene algo que me encanta.

-      -Riéndose- Mila, sabes te quiero mucho, pero creo que de aquí  a que tú te enamores de verdad, van a pasar mil años.

-      Ay… ¿por qué me dices eso?

-      Pues porque estoy segura de que lo único que sabes de él es que se llama Nick y que entrena en el gimnasio de la esquina… –Camila guardó un corto silencio, dándole a entender de que así era- ¿Ves? –Se rió.

-      Bueno, ¿sabes qué? Voy a olvidarme de los hombres por un tiempo y me voy a centrar en cuidarme a mí misma –Decidió, muy segura de sí misma.

-      Ya no sé cuantas veces he escuchado eso… -Se reía, mirando divertidamente a su amiga.

-      Esta vez va  enserio –Dijo, algo más seriamente.

-      Claro que sí, lo que tú digas amiga –Le dio la razón, sin la más mínima gana de discutir- Voy con Austin, luego nos vemos, ¿ok?

-      Vale, vale, hasta luego –Decía, quedándose pensativa por lo que acababa de hablar con Normani.

 

Diez de la noche, a fuera del lujoso restaurante ya nombrado anteriormente. Camila, Mani y Austin se encontraban en un coche, simplemente esperando la ansiosa llegada de Lauren. Y ese momento llegó. La castaña se bajó de un coche, acompañada de dos hombres: Justin y Joe.