Alexandra, una vampira en una manada.
Se resignó a su vida permaneciendo alejada y callada.
Hasta que cosas cambian inexplicablemente.
Su hermana asesinada, su hermano vuelve, a quien conoce desde pequeña se transforma.
Todo cambia, pero su vida ti...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Bolsas de sangre? Esa es tu idea— miro a Scott dejar las bolsas sobre mi cama.
—Mi madre trabaja en el hospital ¿recuerdas? — asiento —No es tan difícil entrar y tomar unas para ti—
—¿Entonces para no matar a inocentes prefieres robarles a los enfermos? — pregunto.
—Será menos grave, siempre hay más donaciones de sangre, no es algo malo— suspiro —¿Podrías solo intentarlo? O tal vez quieras seguir con la sangre de carne cruda—
—Paso— él sonríe —Está bien, esto es bueno, gracias Scott—
Mi teléfono suena, lo que es raro ya que extrañamente suena.
—Derek—respondo.
—Los necesito, vengan a la casa y tomen mi auto, necesito una distracción—responde.
Solo dice eso y cuelga la llamada, miro a Scott y éste sale de mi "casa" y pasamos por Stiles.
—¿Por qué debemos tomar el auto de Derek? — pregunta él.
—Porque él me lo pidió— le respondo.
—¿Y tú haces todo lo que te pide? — bufa.
—Si él me pide algo es por alguna razón importante— aclaro.
—Porque Derek es súper razonable ¿no? —
—Stiles...—
—Pueden detenerse— me interrumpe Scott —¿Dijiste que tu padre salió por una persecución? — pregunta él a Stiles.
—Eso dije— afirma Stiles.
—¿Qué tan probable es que sea por Derek? — vuelve a preguntar Scott.
—No creo que sea así, si no...—
Me detengo en seco haciendo que Stiles se silencie y miro a lo lejos a través de los árboles, el auto de Kate estacionado frente a la casa Hale.
—Ya entendí porque la distracción— dice Scott mirando lo mismo que yo.
—¿Qué diablos ven? — pregunta Stiles ante su visión poco desarrollada de humano.
Básicamente arrastro a Stiles de manera silenciosa, el auto de Derek está al otro costado de la casa, casi gateando nos acercamos a él, las puertas están abiertas, así que entramos por el lado del copiloto para evitar que Kate nos vea, Scott conduce y el auto de Kate no tarda en seguirnos.
Ella toma más velocidad, pero Scott no.
—¿Más rápido? — pregunta Scott.
—Mucho más— responde Stiles mirando el auto que nos persigue.
—Ella está acercándose, Scott— informo.
—Creo que no entiendes el concepto de persecución— reclama Stiles.
