3

7.4K 567 495
                                    


Esta mañana Louis se levanto feliz, quizás iría a pasear un rato y no quedarse todo él día encerrado, bajo las escaleras sujetándose de la barandilla.

Tenía puesto una camisa azúl, unos jeans negros y unos vans negros igualmente, casi suelta un grito al ver a Harry comiendo su desayudo tranquilo.

Louis se quedó en blanco, no sabia que movimiento dar, intento caminar pero sus pies se quedaron pegados al piso, así que sólo se quedó viéndolo.

—Oh, hola Louis,Lynna dejo preparando eso para ti— señalo un plato de frutas picadas y un envase de yogur —Y dijo que vendría mas tarde de lo habitual, quizás podríamos conocernos mejor — se encogió de hombros extendiendo una sonrisa en sus labios.

Louis asintió y se acerco a tomar su plato y sentase en una silla quedando frente a Harry, resopló con fastidio.

—¿Que sucede?— pregunto Harry con un gesto divertido.

—Odió que me trate como un niño, ella cree que si le deja la corteza a las manzanas me voy atragantar y ahogarme— rodó sus ojos.

Harry soltó una suave risa.

—Quizas es porque eres un dócil bebé— pasó la lengua por sus labios observándolo provocativamente.

Louis se sonrojo ante su acto —No es cierto— titubeó —Yo ya soy grande y puedo comer manzanas con corteza— aseguró cruzando sus brazos.

Harry se rió estirando su mano hasta tomar una de las mejillas sonrojadas del menor y peñiscarla levemente.

—Eres tan adorable, un muy lindo bebé adorable— él sonrojo de Louis se encendió aun mas.

—No es cierto— dijo, retiró la mano de Harry  con brusquedad.

Louis aparto su plato y se levantó subiendo las escaleras, bajo con una chaqueta mirando de reojo a Harry que sonreía, siempre con ese sonrisa que no sabía de que manera interpretar.

—¿Adónde vas?— preguntó autoritario borrado su sonrisa viéndolo seriamente.

—¿No es obvió? voy a dar una vuelta— rodó sus ojos acomodando sus mangas.

Harry se levantó caminado a grandes zancadas hasta el, tomó su mano volteándolo para que lo mire a los ojos.

—¡No irás a ningún lado! Lynna no te ha dado permiso— apretó sus dientes.

—No lo necesitó, tengo 18 se cuidarme solo— reprochó.

Harry respiro profundo una, dos y tres veces calmándose —Bien, puedes ir a dar una vuelta, pero tienes que llamarme si no recuerdas él camino porque si no apareces hasta que vuelva Lynna nos matará a ambos— habló seriamente.

Louis asintió esperando que Harry lo suelte.

—uhmm, ¿Podrías soltarme?— susurró.

Harry le sonrió y lo dejo ir.

 
[...]

Louis bufo caminando lejos de la casa de su hermana, ¿Quien era ese Harry? Estaba seguro de que daba miedo y si no fuera porque ya podía manejar él miedo él hubiera temblado bajo su agarré, pateó una lata de coca-cola que estaba en él pisó, debía conseguir algún amigo ahora que esta de regreso porque los que tenía antes no recuerda la mayoría de sus nombres y pensándolo bien él único amigo que tenía era su hermana y nunca le importo tener más, ni siquiera en él internado recuerda sus años solo y cree que es momento de dejar ir su soledad y salir a algunas fiestas, pero para eso primero tendría que conseguir algún amigo.

En un parque vio unos columpios y sonrió, hace mucho tiempo que no subía a uno; exactamente 10 años, casi corrió cuando un niño quiso subirse a uno pero llegado él antes, sentándose deprisa él niño lo miro molesto y le saco la lengua,Louis boqueo sorprendido he imitó él acto del infante, su madre llego hasta él niño que lloraba y le mostró una mueca disgustada al menor, Louis decidió ignorarla y comenzar a columpiarse.

Pasaron varias hora y él aun no quería irse pero empezaba a hacerse cada vez mas tarde y no quería que su hermana armará un escándalo. Así que decidió regresar pero no recordaba si se había alejado mucho, por lo que saco su teléfono y marco él número de Harry.

—¡Louis!— casi le gritó.

—Harry...— rió nervioso —¿Puedes venir por mi?—

Louis podría jurar que esta sonriendo.

—Claro, ¿Donde estas?—

—En un parque y no me preguntes cual porque no lo se— habló rápido.

—De acuerdo— respondió divertido, Louis pudo oír él sonido de las llaves y la puerta cerrándose —Esperame— y colgó.

[...]

Louis espera cerca de treinta minutos hasta que vio a Harry apareció en su campo de visión con un café en sus manos, Louis se levantó para esperarlo, Harry camino más rápido tropezando y regando él líquido tibio sobre la camisa de Louis.

—¡Mierda!— susurró Louis.

—¡Maldicion! Lo siento Louis— se disculpó tirando él vaso en un contenedor de basura que estaba a dos pasos de él.

—¡No importa!— dijo pasando sus manos por su ropa.

Harry contuvo una sonrisa, esta situación le daba una idea. Louis comenzó a caminar junto a él hasta llegar a su auto, Harry le abrió la puerta dejando que entre primero.

—Louis no puedes quedarte así, podrías resfriarte—

Louis no tuvo oportunidad de responder cuando Harry se acerco a él retirado su chaqueta.

—¿¡Que hacés!?— gritó alarmado tratando de alejarlo.

—Intento ayudarte, quieto— ordenó mirándolo seriamente.

Louis lo observo respirando irregularmente, Harry llevo sus dedos al borde la camisa levantado la lentamente dejando que sus dedos se rocen en la piel algo bronceada del menor, presionó suavemente sus dedos sobre sus pezones, Louis jadeo suavemente y Harry sonrió satisfecho terminado de sacar la camisa, casi no se notaba los rojas que estaban sus mejillas pero Harry sabia que era así, se inclinó pasando por él cuerpo de Louis para buscar algo en él asiento trasero, cuando lo encontró regreso pasando su rostro muy cerca de las mejillas calientes de Joel dejando que sus labios rocen en su piel, tomo una de las manos de Louis pasándola por la primer manga, luego la segunda, después su cabeza y luego bajarla igual a cuando saco la otra rozando sus pezones y recibiendo otro jadeo de sus labios.

—Mucho mejor— dijo con una sonrisa, Louis asintió sin verlo, tomo su chaqueta colocándola sobre su estómago y ocultando su entrepierna. Harry sonrió aún mas al notarlo.

Cerró la puerta, rodeo él auto subiéndose a este, poniéndose su cinturón y poniendo en marcha él auto, había comprobado lo que estaba buscando y él juego acaba de comenzar.

𝑭𝑬𝑻𝑰𝑺𝑯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora