Capítulo 6. Cazadores.

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Me bajé de la moto una vez había llegado a la veterinaria de Deaton después de dejar el encargo con la señora Amanda.

El olor de perros inundó mis fosas nasales. A pasos lentos me acerqué a la puerta y entré en ella.

- Deaton, ¿Los perros vinieron? - cuestioné apenas entré.

Pero la bienvenida me lo da muchos pares de ojos en mi cuerpo, toda la manada se encuentra adentro, alcé una ceja sin darle importancia recargándome contra la pared mas cercana.

- Stiles - Deaton me regañó, o al menos es ese tipo de tono que usó.

- ¿Que? - me encogí de hombros - por cierto tu encargo está hecho - le avisé.

- ¿Que hace Stiles aquí? - cuestionó molesto Scott dirigiéndose a Deaton.

- Lo que haga o no haga aquí, no es de tu incumbencia - le respondí yo.

Noté sus ojos cambiar de color, sus garras aparecieron y sus colmillos igual. Me crucé de brazos esperando a que me atacase, mas eso no sucedió en ningún momento.

- ¡Quiero que este asesino se vaya de aquí!  - Lydia me señaló totalmente furiosa - o si no le romperé los tímpanos con mi grito - amenazó.

- Hazlo - la alenté - si quieres convertirte también en asesina matando a todos aquí, recuerda que los perros no aguantan tu grito.

Ella pareció tomar consciencia de eso, por lo que cerró la boca y retrocedió unos pasos atrás junto a Erika. Me quedé observando a los demás miembros de la manada, Jackson mantiene sus puños apretados fuertemente, Derek por su parte a cambiado el color de sus ojos y la golfa Blake se encuentra a su lado acariciando el pecho de Derek sin pudor alguno, dejando escapar una risa al notar que la miro.

Me saqué los lentes y cambié el color de mis ojos por unos segundos, Jennifer retrocedió por acto reflejo hacia atrás totalmente atónita, literalmente solo dejé que ella viese mis ojos rojos.

- ¿Que...? - me señaló incrédula.

- ¿Que de que? - me hice el confundido.

- ¿Que pasa, amor? - le preguntó Derek con un tono meloso, un tanto molesto para mis oídos.

- Es que... Es que... - la mujer no podía dejar de tartamudear - ¿Ustedes no lo vieron? - inquirió mirando a todos, lo cual lo único que recibió fue las miradas de confusión de toda la manada. 

- ¿Ver que? - cuestionó Liam.

- No, nada, creo que solo fue una alucinación mía - negó con la cabeza la profesora.

Todos dejaron de prestarle atención, así que cuando ella volvió a mirarme le regalé una sonrisa llena de burla.

- Stiles, dijiste que irías a comprar en el súper, tal vez deberías irte ya - Acotó Deaton con la clara intensión de que me fuera antes de que la situación se pusiera más incómoda.

Supongo que se a dado cuenta de mi pequeña jugada con la zorra.

- Es cierto - le seguí la corriente, se que él lo hace con buena intensión - Adiós Deaton - me despedí de él antes de salir de la veterinaria sintiendo la mirada de todos en mi acción.

Subí a la moto nuevamente, me volví a colocar el lente y salí de ahí, no se que es lo que la manada hacía ahí, pero lo mas seguro es que haya ocurrido algún ataque, ellos no entrarían en el lugar de trabajo del druida solo por que sí.

Conduje por unos minutos sin dirección alguna, no se donde ir, la verdad no tenía nada planeado hoy, tal vez deba ir a cazar algún animal por el bosque, pero lo mas seguro es que lo haga de noche, todavía no lo e intentado, pero quiero practicar, saber como se siente cazar tu propio alimento, o el sabor de la sangre tibia, seguro es rica. 

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