Buscando el esposo perfecto [KookMin]

Capítulo 15

A las siete y media en punto del sábado, Jungkook llamó a la puerta de la casa de Jimin. Cuando él abrió, se quedó como pasmado mirándolo.

---- Pasa, tengo que ponerme los zapatos ---- le dijo con ojos chispeantes.

Jimin llevaba puesta una elegante camisa negra, de cuello caído, que se ajustaba muy bien a su torso, enmarcando su sensual cuerpo y que dejaba al descubierto gran parte de su cuello y pecho. Encima de esta, usaba un chaleco abierto, rojo brillante, cubierto de lentejuelas negras en los puños y bordes.
El pantalón de cuero negro fino, resaltaba muy bien sus muslos, trasero y piernas porque le quedaba bastante ceñido, además mostraba pequeñas partes de su suave y delicada piel, porque estaba rasgado, por encima de la rodilla. Un cinturón de cuero negro rodeaba su delgada cintura.

Se había puesto una gargantilla de brillantes a juego con los pendientes y anillos en sus manos; y se había peinado de una forma que lo hacía parecer muy elegante y sofisticado. El lápiz negro en sus ojos, hacía resaltar su expresión penetrante mucho más, y el balsamo aplicado en la boca, enmarcaba la perfección de sus labios.

---- ¿Jimin?

---- ¿Sí?

---- Sólo quería asegurarme de que eras tú. Estás maravilloso.

---- Bueno, me gusta arreglarme un poco cuando quedo con mis amigos. Siempre pienso que un ladrón un poco mañoso podría hacer una auténtica fortuna con toda la chatarra que nos ponemos encima en estas ocasiones.

---- Ponte los zapatos, la limusina está esperando.

En realidad, después de aquella visión, ya no le apetecía tanto ir a la fiesta. Prefería quedarse en el departamento y descubrir más cosas de aquel fascinante hombre. Lo último que hubiera esperado de él, era aquella transformación. Así vestido, no desmerecía en absoluto comparado con Taemin o Baekhyun.

Bien pensado, tenía su explicación, ya que todos ellos habían ido a los mismos colegios y pertenecían a las mejores familias de San Francisco.

Jimin se había puesto unas botas negras de cuero, llevaba un chal en las manos para cubrirse del frío, y llevaba un regalo para sus amigos.

---- Yo no sabía que había que llevar algo.

---- No te preocupes, ni siquiera te conocen. Sin embargo, HyunA y yo somos amigos desde pequeños. Y me llevo muy bien con E'Dawn.

---- ¿Pero no me habías dicho que no pensabas ir?

Jimin asintió.

---- Sí, ya sé que este estilo no me pega mucho. La verdad, prefiero los vaqueros... Pero me ha parecido más apropiado, ya que habrá muchos invitados. Además, ahora tenemos una meta que alcanzar.

---- ¿Tu amigo se llama de verdad E'Dawn? ---- le preguntó Jungkook mientras le ayudaba a ponerse el chal.

---- Es un apodo. En realidad se llama Hyo-jong. Se lo pusieron en el colegio, no sé muy bien por qué.

Jungkook aspiró el perfume de Jimin, fresco y sensual; lo había echado de menos... y también a él.

---- Venga, vámonos ya, Jungkook ---- antes de salir, Jimin lo tomó por el brazo, mirándolo directamente a los ojos ----. Encontrarás al hombre que buscas esta noche, ya lo verás. Después, tendrás que cumplir tu parte del trato. Te pido por favor que pongas algo de tu parte, ¿me oye, señor Jeon?

Él sonrió divertido ante aquel sermón.

---- Sí, lo oigo señor Park, pero ya veremos si sucede como dices.

Él le dirigió una mirada cargada de odio; sin hacerle caso, Jungkook se agachó para besarlo. Sus labios sabían diferentes, pero su calor era el mismo.