18

30 4 2
                                    

Observé su rostro por varios minutos, parecía calmado y a la vez pensativo, curiosa observaba cada peca que hacía resaltar sus hermosos ojos color azul que ahora me miraban. Sin darme cuenta estos brillaban como nunca.

Envolvió sus brazos en mí y siguió su mirada en la ventanilla de avión.

-No se que tanto miras, Lottie.-Se apoyo en mí.

-Yo solo quiero saber en que tanto piensas.-Conteste.

-En lo que quieres qué piense.-Bromeo.

-¿Por qué decidiste coquetearme en la infeliz fiesta?-Pregunte.

-Te veía distinta al resto. Supongo que después de tantos cambios físicos me sentí más confiado para hablar contigo.

-¿Pensaste que solo me importaba el físico?

-Todos hacemos eso, inconscientemente la persona más linda es la más tonta, pero igual insistes en hablarle, mientras que el feo, solo se queda observando como el lindo superficial gana todo lo que una mente maestra debería ganar.

-A mí me gustaba el adolescente de buzos holgados dientes chuecos y rubio.-Lo anime.

-Tú nunca me diste la hora.-Negó a gusto de la conversación.

-¿Qué querías que hagas?-Salte a la defensiva.

-Que me digas que sí cuando te invite a tomar un helado. No sabes lo penoso que fue que me digas que no.

Estaba por replicar su comentario hasta que escuche como sonaban los parlantes del avión, me había pasado la mitad del avión mirándolo y la otra mitad hablando con él. 

-"El vuelo con destino a Vienna Australia aterrizara en cinco minutos, por favor abrochar sus cinturones de seguridad."-Repitió dos veces.

-Bueno, la hora de confesiones termino.-Suspiro para apartarse de mí.

Observe hacia el pasillo y pensé alguna que otra pregunta hacerle.

-¿Por qué nunca me juzgaste al usar este estilo de ropa?

-¿Qué?-Pregunto sin entender.-Tú eres así, tú te vistes así.

-Todo el mundo dice que me visto feo.

-Tú te sientes cómoda, Charlotte. No te preocupes por el resto. Yo me vestía peor.

-O sea que me visto feo.-Deduje.

-No, te vistes como eres.

-¿Entonces soy fea?-Pregunte molesta.

-No dije eso...

-¿Sabes?. Ahórratelo antes de que discutamos nuestra fealdad.

El aire en Vienna era aun más fresco de lo que especulaba. Sentí una pequeña ventura en mi, estaba excitada de felicidad en verdad quería conocer cada rincón de ese hermoso lugar.

-¿Quieres ir al shopping?.-Pregunto.-Antes de que vayamos para los Alpes.-Pregunto.

-¿Cuando vamos a los Alpes?.-Pregunte aturdida por el paisaje.

-A la noche, supuse que querías conocer Vienna también.

-¿A la noche?

-Son dos horas, si partimos a las ocho de la noche llegaríamos para comer y dormir.-Comento mientras caminaba hacia los adentros del aeropuerto.

-¿Como iremos?-Pregunte con algo de expectación al ver lo hermoso que era el aeropuerto. Un lujo que nunca podre pagar.

-En avioneta.-Comento sin una pizca de humor.

CHARLOTTE (N.H)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora