Sumisos

•|Lo siento amo|•

Tocan a la puerta el chico menor que se encontraba en su cuarto jugando videojuegos baja rápidamente a abrir.

- ¡Amo! Que bueno que llegaste te extrañe muchísimo

- Si yo también te extrañe bebé _ Le dio un casto beso en la frente y dejó su sacó en el perchero junto a la entrada. - ¿Hiciste lo que te pedí está mañana gatito?

- Eh ¿Qué me pediste amo?

- ¿No lo recuerdas? Te pedí de favor que metieras a lavar las sábanas de mi cuarto y el tuyo, porque la que lo hace ahorita tiene problemas familiares y no iba a poder venir _ Soltó un suspiro pesado

- Oh ya recuerdo... _ Mencionó el chico con una voz apenas audible

- ¿Y lo hiciste? _ Dijo el azabache aflojandose la corbata, mientras se dirigía a la cocina

- Yo... Lo lamento amo pero no lo hice ¡Pero no fue porque no quisiera! Es sólo que lo olvidé _El chico agachó la cabeza y sé fue caminando lentamente hacia la cocina

El mayor tomó una pequeña pala de madera que se encontraba en un cajón, jaló una silla y prosiguió a sentarse en está.

Tocó sus piernas para que el menor fuera a ellas, cosa que el chico entendió a la perfección y colocó su torso en las piernas de su amo.
El amo subió la blusa larga del chico y bajo su boxer a media pierna, sobo suavemente las nalgas de su esclavo de repente dio un gran golpe con la pala en el trasero del joven, el antes mencionado se estremeció y soltó un pequeño grito. Así fue durante 10 largos minutos, cada nalgada era más fuerte que la anterior haciendo que él soltará varios gritos de dolor, dejándo el trasero del chico extremadamente rojo.

Una vez terminado el castigo se levantó de las piernas del mayor y prosiguió a ponerse bien el boxer que traía, tal cosa hizo que esté chillara por el dolor que provocaba la fricción contra sus nalgas.
El de menor estatura estaba decidido a irse a su habitación suponiendo que su castigo había terminado. Al dar los primeros pasos el azabache se levantó de la silla tomó el brazo del chico impidiéndole irse y lo acerco a su pecho.

- ¿A dónde crees que ibas?

- A-a mi habitación

- Mmm ¿Enserio? Bueno me parece que está vez te quejaste demasiado por tú pequeño castigo _ Toma entre sus manos el trasero del pequeño y lo aprieta haciendo que el antes mencionado suelte un leve gemido

- Es que me dolía amo _ Se acurrucó en el pecho de esté

_ ¿Y qué me dices de esa vez en estábamos follando y te hice lo mismo?

- Bueno tú lo has dicho amo, estábamos follando y la única manera en que me guste es que estemos haciendo algo pervertido

- Es bueno saber eso, pequeño

- ¿Si? ¿Por qué amo? ¿Qué vas a hacerme?

- Hm, haré algo que te encantará _ Lo cargo entre sus brazos y lo subió a la mesa, tirando todo a su paso.

Le empieza a besar mientras le soba los pezones por encima de la blusa larga que traía, el chico agarra una de las manos del mayor quitandola de su pecho mientras la dirigía cerca de su entrada.

- Amo, porfavor _ Le mira con súplica.

- ja, eres tan lindo cuando quieres ser pervertido.

Este empieza a sobar suavemente el pene del menor haciendo un vaivén lento, provocando que suelte pequeños gemidos.

- T-tú me has hecho así amo _ Lleva una de sus manos hacia el pantalón del mayor, le desabrocha el botón y le baja el cierre, mientras le empieza a sobar suavemente por encima de su boxer

- Me encanta que alguien tan pequeño y lindo como tú, pueda ser tan pervertido a la vez.

En un solo movimiento le saca los bóxers del castaño y prosigue a meterle dos dedos en una sola estocada lo que provoca que el menor suelte un gemido sonoro haciendo que haga eco en la cocina, provocando que paré sus movimientos y jale del collar a su esclavo poniéndolo a la altura de su bulto.
Él que se encuentra incado le empieza a besar sus piernas, pelvis y cerca de su pene, el azabache jala con firmeza  de su cuello y lo pone directamente contra su pene. El menor baja los bóxers de su amo, empieza a abrir su boca lentamente y lo mete despacio, el mayor desesperado por la lentitud de las cosas toma por la parte de atrás de la cabeza del menor y mete rápidamente su pene en la boca del menor, apretando su agarre para que así  no se separé.
El castaño quién sabe hacer un garganta profunda, aún así le cuesta con su amo, sigue siendo bastante grande a su parecer.
Empieza a jalar de su cabello del menor para sacar su pene, y pudo observar que esté sé quedo lleno de saliva tal cosa hizo que se le pusiera aún más duro, si es que eso se podía.
_ Se acercó a la oreja del chico y le susurró - ¿Sabes ahora dónde me gustaría meterlo?

_ El esclavo al entender su mensaje se para y pone su torso en la mesa dejando al descubierto su trasero -Amo porfavor házlo, eh sido muy desobediente hoy amo

-De acuerdo

Se acerca y comienza a empotrarlo rígidamente, el esclavo solo levanta el trasero y deja la cabeza contra la mesa para disfrutar del momento que le está dando su amo. Comienza a nalguearlo mientras le penetra intensamente, él castaño le pide más y comienza a ser penetrado con más intensidad, el líquido preeyaculatorio se comienza a parecerse al semen en su ano.
En el cuarto se escucha el sonoro sonido de los gemidos de él y las nalgadas que le da su amo.

-Amo lo haces increíble... Más amo más _ Le chilla mientras se aferra a las orillas de la mesa
-Inclinate más y abrete un poco para que te dé más _ El amo comienza a subir más la velocidad hasta que empieza a cansarse.
Él menor empieza a sentir como ahí abajo empieza a calentarse mucho, era un placer indescriptible y sigue gimiendo aún más.

Él azabache sigue follandolo incluso después de correrse, ambos sienten como está muy mojado y como el semen se mezcla entre los dos, como fluye fuera de el ano penetrado del castaño, él mayor finalmente se cansa y termina sacando el pene.

Él menor se incorpora y se da media vuelta con las piernas abiertas dejándole ver cómo sigue saliendole el semen de su entrada.

- Amo ¿Puedo limpiarte?

-Por favor, limpia este desastre

Se pone de rodillas y toma con una mano el pene de su amo se lo lleva a la boca lamiendolo como había hecho antes de ser penetrado.

- Hasta para limpiarme el pene eres demasiado bueno ¿Acaso lo haces a propósito? _ El menor quién seguía haciéndole un oral al mayor decidido no responder. - Se siente tan bien terminar y que me acabes limpiando con esa lengua y boca

- Siempre que terminemos ¿Puedo limpiarte amo?

- Si siempre lo haces así de bien claro, será tú premio

- Ow gracias amo _Le sonrió cálidamente con una mirada muy tierna.

- No me hagas esa cara que me dan ganas de besarte

Él pequeño se sonrojo y sonrió tímidamente.

- No puedo resistirme _ Lo toma de los cabellos y jala para poder darle un beso

El pequeño lleva sus brazos al cuello de su amo, se pone de puntillas y le susurra - Amo te corriste demasiado que siento como baja tú semen en mi entrepierna.

- Es tú culpa por excitarme tanto...

               [Continuará]