Parte 16

1.8K 100 8
                                    

Sus manos sostenían mi cabeza suavemente. No podía creer lo que estaba pasando. Minho y yo estábamos en mitad de un apasionado beso. De repente el sonido de las puertas empezando a cerrarse nos interrumpió. Por suerte estábamos a dos pasillos de ellas, por lo que llegaríamos a tiempo. 

"Debemos volver" dijo Minho. 

Empezamos a correr hacia el Claro. En la entrada estaba Newt, Chuck y Alby esperándonos.

"Ahí están" gritó Chuck nada más vernos aparecer por el pasillo inicial.

Nada más entrar al Claro las puertas se cerraron por completo. 

"Pensábamos que os había pasado algo!" Dijo Chuck.

"Nos preocupamos al ver que todavía no habíais regresado" dijo Newt.

"Que ha ocurrido?" Nos preguntó Alby.

Minho y yo nos miramos a los ojos. Creo que ambos pensamos en lo mismo. No debían enterarse de lo que acababa de ocurrir. Suerte que pasó en un pasillo interior y no pudieron verlo.

"Nos encontramos con un lacerador" respondió Minho, mientras recobrabamnos el aliento.

"Tranquilos estamos bien" respondí para tranquilizarlos al ver de caras de preocupación.

"Os han picado?" Preguntó Newt. Minho negó con la cabeza. 

"Lo habéis visto? Cómo habéis escapado de él?" Continúo preguntándonos Chuck muy ansioso. 

"No les agobies Chuck, en la cena nos lo contarán todo, ahora id a daros una ducha!" Dijo Alby mirándonos y empezando a caminar hacia la casa. Todos empezamos a caminar. Chuck se fue con unos clarianos que a estaban preparando la hoguera y Newt hacia los huertos. Llegando a la entrada del bosque Minho me dijo: 

" Yo iré primero a hacer los mapas" Hice la intención de seguirle hacia la sala de los mapas pero me miró y me dijo:

"Tranquila, ve a ducharte, yo me encargo" Asentí. 

Me dirigí hacia las duchas. No había nadie más por lo que estaban enteras para mí sola. Todavía seguía en shock por lo que acababa de pasar. Había sido mutuo, pero los dos continuamos el beso. Me sorprendió mucho su reacción, pero también la mía. Minho me gustaba, la idea de morir en el laberinto había sacado a la luz ese sentimiento. La ducha me sentó muy bien. Estaba agotada, escapar de ese lacerador fue muy duro.

Durante la cena estuvimos hablando sobre nuestro encuentro con ese lacerador, obviamente sin mencionar nada a nadie sobre lo que había ocurrido entre Minho y yo.

"Ahora salen a plena luz del día?" Preguntó Wiston extrañado.

"Eso parece..." dijo Gally.

"Hacía mucho tiempo que eso no ocurría" dijo Ben.

"Que vamos a hacer?" Preguntó Jeff.

"Algo está ocurriendo ahí afuera, sabéis lo que pasa cuando os encontráis con uno de ellos..." Dijo Gally.

"Eso no volverá a ocurrir!" Dijo serio Alby.

"De qué hablas Gally?" Le pregunté.

"Están volviendo a ocurrir cosas raras, primero te suben a ti en la caja y luego os topais con un lacerador a plena luz del día..." Continúo explicando Gally.

"Solo ha sido un lacerador, no hay por qué preocuparse!" Dijo serio Minho, quitándole hierro al asunto.

"Así es! No es la primer vez que ocurre. Todo está como siempre! Así que dejemos de darle vueltas!" Dijo serio Alby.

Mientras terminábamos de cenar y hablamos de otros temas, Minho y yo cruzamos miradas un par de veces. Me había gustado lo que había pasado entre nosotros. Ese beso me hizo darme que cuenta de que en realidad me sentía atraída por él. Su forma de ser me atraía: serio, pero con un toque sarcástico, siempre controlando la situación y muy seguro de sí mismo. Aunque todavía no sabía si el sentía lo mismo... Además, me olvidaba de donde estábamos... Y de qué quizás Alby y los demás jamás aceptarían algo así...

Nos sentamos al rededor de la fogata, como hacíamos todas las noches, a charlar antes de irnos a descansar. Fritanga tomó bastante de la bebida especial de Gally. Fue muy divertido. Nos reímos mucho.

"Vamos, ya está bien por hoy! O si no mañana te dolerá demasiado la cabeza!" Le dijo Newt mientras lo agarraba pasando su brazo por encima de su hombro ayudándole a tenerse en pie. Mientras andaban hacía la zona de las hamacas Fritanga decía: "Chicos! Os quiero! Sois como mi familia! De verdad que os quiero" Todos nos reímos. Fritanga era muy buen compañero. No sé llevaba mal con nadie.

Nos quedamos en silencio unos segundos. Hasta que Gally sacó a la luz de nuevo el mismo tema de la noche anterior:

"Y tú ________? Hay alguien de aquí que te guste de ese modo?" Gally no escuchó lo que dije ayer, estaba demasiado ocupado persiguiendo a Fritanga por confesar que yo le gustaba.

Minho me miró a los ojos. Ahora no tenía tan claro que responder. Quizás Minho esperaba que cambiara mi respuesta. Pero no podía confesar algo así ante los demás. Además admitirlo sería darles esperanzas, y debía mostrarme tajante en ese tema. No quería que pensaran en mi de esa forma, eso solo complicaría las cosas. Pero con Minho era distinto... No quería que creyera lo mismo que los demás. Para él no iba este mensaje. Estaba entre la espada y la pared. 

" No! Ya lo dije anoche..." Respondí. Miré a Minho, quería ver su reacción. Y esperaba que captara que lo que dije no iba por él. Pero evitó mi mirada el resto de la noche. Tras un rato más charlando decidimos irnos a dormir. De camino a las hamacas intenté acercarme a Minho. Tenía que explicarle que lo que había dicho no iba por él. Pero no tuve oportunidad, se fue muy rápido hablando con Ben. Mañana lo intentaría.

Me desperté más temprano que de costumbre para poder hablar con él.  Me acerqué a la hamaca de Minho, esperando encontrarlo todavía durmiendo. Pero estaba vacía, ya se había levantado. Salí al Claro a ver si lo veía. Ni rastro. También me acerque a la sala de los mapas a ver. Tampoco estaba allí. Decidí ir a por el desayuno, pronto o temprano le encontraría. Fritanga estaba durmiendo, así que en su lugar estaba otro clariano preparando el desayuno. 

"Buenos días! Has visto a Minho?" Le pregunté.

"Sí, desayunó y se fue con Alby hacia allí!" Dijo señalando con el dedo. 

"Vale, gracias" respondí.

Terminé el desayuno y me dirigí hacia donde me había señalado. Hacia la torre. Cuando llegaba les vi allí arriba, hablando y mirando hacia el laberinto. No podía interrumpirles, no tenía una buena excusa, y no quería que Alby se enterara. Rezaba por qué Minho no le estuviera contando nada. Decidí esperar a que bajaran. Se acercaba la hora de que se abrieran las puertas. Así que fui a la sala de los mapas a por mis cosas. Cuando volví, ya estaba Minho con los demás corredores en la puerta esperando.

"Buenos días _______! Se te han pegado las sábanas?" Me preguntó Ben.

"Cuando me he levantado, tú aún seguías durmiendo" le respondí. Los dos nos reímos. Minho siguió hablando con los demás corredores, sin prestarme atención. Esperaba que hoy Minho también me emparejara con él para salir al laberinto. Teníamos mucho de lo que hablar.

"Bien, hoy revisaremos las mismas secciones que ayer..." comenzó a emparejar a los demás hasta que me nombró a mi: "______, hoy correrás con Edd, la sección 2, Ben y yo revisaremos la zona donde nos encontramos a ese lacerador!" 

"Por qué? yo también puedo hacerlo!" le dije muy seria mirándole a los ojos. En ese momento las puertas empezaron a abrirse. Minho me ignoró y empezó a correr junto con Ben hacia el laberinto. No me lo podía creer. 

"Vamos?" me preguntó Edd. Asentí y empezamos a correr. 

El Corredor Del Laberinto - Minho & ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora