Simplemente Amor.

90 0 0
                                    

                                                                    PRÓLOGO.

Cuando a los 18 años decidí casarme con Gabe, fue porque no me anime a decirle que no a su romántica propuesta en la clase de gimnasia de nuestro último año de escuela.

                                                            * 2 años atrás*

     -Hannah Hooligan – Escuche detrás de mí mientras tomaba agua luego de correr media hora sin parar, me sentía mareada y con ganas de vomitar. Me giré y Gabe se encontraba de rodillas frente a mí con un anillo en la mano.  – ¿Aceptarías estar a mi lado por el resto de nuestras vidas? –Genial. Simplemente genial, no podía creer esto, estaba con Gabe hace no más de un año. Y la realidad es que no lo amaba, solo estaba con él porque… No sabía porque estaba con él, supongo que después de cortar con mi último novio, quién realmente fue el amor de mi vida, necesitaba un reemplazo para él,  apareció Gabe, y lo tomé.

      -Yo emmm – No podía defraudarlo, no podía decirle que no, quedaría en ridículo y yo no era capaz de hacer eso. Fingí sorpresa y me tapé la boca con la mano obligándome a llorar, pero ninguna lágrima salió. Pensé en mi gatita Katy, quien murió cuando tenía 15 años. Y una lágrima salió cuando recordé el día que fue atropellada por un auto. Otra más cayó al recordar cuando nos dijeron que ella no viviría. Él me vio con una expresión de entendimiento y se levantó dirigiéndose directamente hacia mí, abrazándome. Enterré mi cabeza en su cuello y ahí le dije que sí.

Mi mamá suspiró al enterarse de su propuesta y mi papá no estaba feliz pero tampoco estaba enojado. Pero podía saber que pensaba. Era mejor Gabe que mi “Estúpido y delincuente” ex novio.

   -Hija, siempre supe que Gabe era un muchacho excelente, serás feliz el resto de tu vida con él – Se levantó de su silla y se dirigió a abrazarme – Te felicito mi niña – Susurró en mi oído. 

   -Creo que es muy temprano para estas cosas, pero Gabe siempre me agradó, no como ese estúpido y delincuente que tenías por novio. – Finalmente dijo papá. Era imposible que no dijera eso.

   -Deja de decirle delincuente papá, solo porque tenía un tatuaje en brazo no significa que sea delincuente. Además esto es entre Gabe y yo, él no tiene nada que ver en esto. – Mamá sonrió sarcásticamente.

   -¿Que sucede mamá? – Pregunté.

   -Nada cariño. ¡Tendremos que comprar un vestido! – Dijo de repente.

   - No lo sé. No quiero hacerlo mamá, no me siento segura en cuanto a mis sentimientos por Gabe, tengo miedo de cometer una locura y luego arrepentirme. –

  -Oh hermosa! Deberías estar segura sobre Gabe, es el chico indicado, tal vez sea diferente a ya sabes quién, pero ya supéralo,  la vida continua, y mientras menos a parecido a él, mejor, ¿No crees? – No, no lo creía, no era fácil superar a la persona que amaste por primera vez, y aún peor, si aún la amabas.

                                                               *Actualidad*

  -Gabe! – Grité.

Luego de casarnos nos mudamos a un complejo de departamentos cerca de la universidad donde asistíamos.                                                                                                                                                             Yo había decidido estudiar Profesorado de Inglés. Y aunque a Gabe le iba pésimo en inglés en la escuela, decidió seguirme para “Estar juntos a cada momento”. Mis compañeras de universidad suspiraban con nuestra historia de amor, creían que yo vivía en un cuento de hadas. Pobres ingenuas.                                                                                                                                                                Enserio, ¿Quién quiere a un chico que no te deja sola un momento?  Mamá decía que hacia estas cosas porque era muy hermosa y temía que alguien me arrebatara de sus brazos, según ella eso era romántico. Mi concepto de romántico era otro. Por ejemplo, que se arriesgue a que mi padre lo mate solo porque no me había visto en todo el día. 

  -¿Qué sucede cariño? – Dijo Gabe.

  -Alguien se encuentra en el lobby, pregunta por ti, y dice que se llama Sean o algo así. –

  -Sean..? – Pensó. – Sean! – Ahora exclamó.

  -Quién es Sean? – Pregunté curiosa.

  -¿Recuerdas que te dije que había un chico que trabajaba para mi padre que estaba por estudiar aquí? Bueno se encuentra en la ciudad y lo invité a cenar, quería conocer a mi hermosa esposa. – Dicho esto me besó la frente y se retiró abajo.

Acomodé un poco la sala y luego me arreglé para recibir a quién sea que estaba por entrar a mi departamento. Minutos después Gabe apareció en la puerta con un  hombre de ojos azules como el océano, pelo color negro y chaqueta de cuero. Todo a mí alrededor comenzó a dar vueltas. Mi vista estaba mal, tenía que parpadear varías veces para enfocar bien.

-Cielo, él es Sean, pero todos lo conocemos por… -                                                       

Simplemente Amor.Where stories live. Discover now