Capítulo 25: Como los viejos tiempos

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Narra Katsuo:

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Narra Katsuo:

A la mañana siguiente no tenía mucho que hacer, era mi día de descanso y mi hermano no estaba en casa. ¿Qué hago?,¿Bailar en ropa interior a todo volumen mientras actuó como si yo fuera el cantante? Pues si. Ahí estaba quitándome la ropa mientras elegia una canción.Ya había cerrado todo con seguro. Pero mientras elegia una canción recibí un mensaje.

Desconocido.
Hola!
Sigues viviendo en el mismo lugar?
Te veo en 10 minutos.
Va?

Me quedé unos momentos analizado el mensaje, viendo de quién podría ser.
Hasta que recordé a Fumio.

Aún no le había respondido, no sabía que hacer.Al final decidí no responder y alistarme para cuando el viniera,ni modo,para la próxima ya podré bailar en ropa interior.

Me tuve que cambiar, ponerme ropa más "decente" por así decirlo, me había puesto una sudadera amarilla con una una pequeña frase que estaba en el pecho a la derecha con pequeña letra cursiva que decía Somebody else; unos pantalones rasgados de las rodillas y unas pantuflas,claro,estoy en mi casa.

No lo había comentado antes pero yo uso lentes de contacto, uso también gafas pero eso es para andar en casa y la verdad tenía mucha pereza de ponerme los de contacto así que solo me quedé así, también me moje un poco el cabello, para que me vea genial y pareciera que estaba saliendo de bañarme cuando no lo he hecho, al final solo me puse desodorante y listo.

Justamente sonó el timbre, era el, me había puesto nervioso, no sabía si abrir o no, poner la escusa de que no hay nadie en casa, no Katsuo espérate, es tu oportunidad, hace mucho que no ves a tu amigo de infancia, debo de volver a ganar la bonita amistad que perdí hace mucho tiempo.

Entonces abrí, y wow, estaba hermoso, iba con una playera blanca debajo de una chaqueta rosa, unos pantalones negros y unos converse blanco, se veía tan atractivo, tenía buen cuerpo y su cabello se lo había cortado, pero por lo menos sigue teniendo esos ojos y esa sonrisa bonita.

-¡Genial!, Sigues viviendo en el mismo lugar, ya estaba apunto de irme.- mencionó mostrando una pequeña sonrisa.

-Ah si, lo siento apenas voy saliendo de bañarme, pero pasa- pero que mentira más grande; le había hecho paso a la casa.

-Oh lo siento, te interrumpí en tu baño.- Río-Vaya creo que de pequeño nunca había entrado a tu casa, es muy bonita y espaciosa para ti y tú hermano, por cierto,¿Cómo esta él?- preguntó ya se sentado en el sillón mientras miraba por todos lados.

-Él esta bien, tiene un buen trabajo para mantener esta casa y los gastos.- respondí mientras cerraba la puerta.

-Me alegra.

-¿Quieres algo de tomar?

-No,gracias.- decía mientras movía su mano en señal de negación.

-Esta bien.- me senté al lado del para poder platicar. Aun que no se noté estaba muy nervioso y emocionado.

-¿Vives aquí de nuevo?-tenía que romper la tensión además, quiero saber de él, que ha hecho en su vida.

-Si, vivo con mi novio en un departamento desde hace un año.- su novio... Es cierto. De la nada se me bajaron los animos.

-¿De verdad?,que bien.. Que hayas vuelto.

-Si, extrañaba este lugar.

-Por cierto, ¿dónde te habías ido? Bueno, te mudaste,pero nunca dijiste a dónde.- me siento incómodo, presiento que va salir el tema de cuando nos separaron.

-Me había ido al extranjero, fue agobiante, era otra rutina,no comía y acoplarse su idioma era difícil para mi.

-Oh vaya, ya me imagino...

-¿Y tú? Cuentame de ti.- se acercó más a mí.

-Pues que te puedo decir, cuando te fuiste no volví a tener amigos como tú, sólo conocidos, cuando mi tía supo lo que pasó no volvió a tener contacto con nosotros, lo bueno es que ya vivía aquí, imagínate seguir viviendo en su casa, me mata- y real, mi tía al saberlo se decepcionó de mi, sin embargo mi hermano me apoyo, por eso lo quiero mucho.

Pude escuchar una risa leve de Fumio, realmente estaba disfrutando este momento.

-Bueno, me alegra que estes sano, vivo y con mucho próspero en tu futuro.- me tocaba el hombro en señal de que me daba apoyo.

-Gracia Fumio.-Sonreí y el me la había devuelto.

-Extrañaba esa sonrisa.- y yo la tuya.

-Bien, aprovechando de quedas cambiado vamos a salir. Esta es nuestra tarde.- se había levantado del sillón de golpe.

-Esta bien deja me pongo unos zapatos.- yo también me había parado mientras señalaba a las escaleras.

-Voy contigo, quiero conocer tú cuarto.

Habíamos subido y entrado al cuarto el directamente se había tirado a la cama.

Había escuchado un suspiro de parte de el.
-Huele a ti.- decía mientras abrazaba una almohada mía.

-Y según tú, ¿a que huelo?- mencioné, buscando unos tenis blancos.

-No se, tienes un olor sencillo y bonito, un olor que no encontraré en otra persona más que en ti.- Me había sonrojado mientras  amarraba las agujetas, en eso, sentí como Fumio me abrazaba por atrás, me estaba oliendo la nunca y la espalda y se sentía tan bien, me daba escalofríos y eso me gustaba.

-Sigues siendo el mismo.- decía dejando de oler y para poder abrazarme bien.

-Tu también. Vamos.

Habíamos salido de la casa, no sé a dónde pero íbamos a un lugar.

Como lo extrañaba, en el camino Fumio me contaba cosas sobre el, de sus aventuras en el extranjero o de sus nuevos amigos. Yo sólo observaba y sonreía. Extrañaba esto, poder platicar sólo con alguien que tú conoces y que tienen cosas en común, a pesar de la distancia que tuvimos antes,todo volvería a ser como antes.

O...¿No?

Disculpen la tardanza y los errores ortográficos UwU

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¿Por qué a mí? •Gay/Yaoi•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora