Protection from Darkness T1 (YAOI) [FINALIZADA]

Capítulo 3 - Amatista y Carmesí reunidos

Largo estaba siendo aquel viaje hacia la residencia del director Cross, para Kaname y su séquito hubiera resultado menos complicado encontrarse con aquel adulto si este no hubiera cerrado tan repentinamente la escuela de la cual era director, cuando supieron de ello por los periódicos no pudieron creerlo, dicha academia fue creada principalmente, "aunque en fachada", para conseguir disolver diferencias entre vampiros y humanos, Kaien siempre se mostró entusiasta por aquella idea pacifista, por lo cual no podía entenderse los motivos para haber cerrado la escuela como si nada. Muchas cosas estaban siendo difíciles de entender, y todo se vio más confuso cuando al investigar los motivos para la ausencia de Cross fue saber que aquel chico, quien llevaba desaparecido varios meses, se encontraba residiendo en casa del mayor. Kaname entregándose a sus pensamientos intentaba dar con algún motivo tan fuerte como para que alguien acostumbrado a vivir independiente accediera a vivir junto a alguien a quien se mantenía reacio a aceptar su ayuda.

Llegando a la residencia de Cross, todos quienes viajan junto a Kaname encontraron sorprendente pasar por un jardín delantero tan bellamente cubierto por toda clase de flores, tal vista no sería una propia para un viejo más preocupado por atender asuntos importantes que por cuidar simples plantas. Avanzando más su transporte se detuvo bajo un bello árbol sakura el cual se encontraba al centro del lugar rodeado por una extensa capa de césped, y que en una de sus ramas colgaba un amplio columpio, lo suficientemente extenso para asemejar una cama individual. Dirigiéndose a la entrada Kaname advirtió a sus acompañantes, así como a Yuuki no olvidar la clase de recibimientos que daba el cazador de vampiros a cualquiera que bebiera sangre, preparados llamaron a la puerta estando listos para defenderse, pero al ser el mismo Cross quien los recibió pudieron relajarse un poco.

—Kaname-kun, Yuuki-chan, tiempo sin verlos —comentó Cross algo relajado para él, resultaba extraño no verlo abalanzarse hacia Yuuki montando un drama e intentando forzarla a llamarlo papá, incluso la chica parecía algo confusa ante el comportamiento tan "maduro" que su padre estaba mostrando. Ingresando en la casa para Kaien fue fácil notar lo cuidadoso que estaba siendo el grupo de vampiros, era como si estuviera esperando ser atacados en cualquier instante, ante ello le fue inevitable no soltar una pequeña risa para después dirigir una pequeña mirada a sus invitados—. Tranquilos, nadie va a atacarlos. Yagari no se encuentra y, Kaito-kun y Zero-kun están en la planta alta.

Al momento de ser el nombre de Zero pronunciado Kaname poco tardó en dejar a flote todas las dudas que se habían acumulado en su mente desde que le habían dado el primer informe sobre la desaparición de aquel chico—. Así que es verdad que Zero está viviendo con usted.

—Eso es raro, Zero siempre repetía lo mucho que le molestaba vivir acompañado —comentó Yuuki recordando el tiempo en que ella y dicho chico llegaron a residir junto a Kaien.

Estando todos cómodamente instalados en la sala comenzaron a hablar brevemente sobre algunos casos de vampiros purasangre, pero su conversación se vio interrumpida cuando vieron a Kaito pasar con una bandeja plateada sobre la cual llevaba dos vasos de limonada y unas rebanadas de pay—. ¿Kaito, ya tomó Zero sus medicinas? —pregunto Kaien olvidando por completo lo desinformados de sus invitados. Por su parte Kaito poco tardó en mirar con desagrado a todos quienes estaban ocupando los sillones de la sala, sobre todo su mirada se clavó fieramente sobre Kaname quien, pese a mantener su actitud tranquila, por un momento sintió confusión por tal instante—. Acaba de despertar, pero ya se las doy —mirando agresivamente una vez más a sus invitados fue que Kaito se alejó del lugar.

Quedándose el lugar en completo silencio, Kaien tras pedir una disculpa explico el motivo para aclarar la hostilidad de Kaito. Todos los presentes no podían creer lo que escuchaban, estaba siendo difícil creer que alguien tan fuerte como Zero terminará quedando incapacitado para ejercer como cazador, no podía concebirse en la mente de los vampiros que quien fue su más grande dolor de cabeza ahora viera pasar sus días sumido en oscuridad y debiendo ser dependiente de otras personas.