Capítulo 3 (girasol)

535 40 21
                                    

Despierto por la mañana al no sentir el cuerpo de mi esposo a mi lado. Abro los ojos poco a poco y la luz del sol entrando por la ventana con cortinas claras me ciega. Me siento en la cama descubriendo la parte de arriba de mi cuerpo y froto mis ojos para poder ver con más claridad, me asomo al reloj despertador en el buró del lado de Yoongi, las diez con cero dos minutos.

-Vaya es tarde. –La puerta de la habitación se escucha y veo entrar a Yoongi con una mesa para cama, dónde había un girasol, desde el día que nos casamos comenzó a regalarme girasoles de vez en cuando, el día que le pregunté la razón me dijo que era por qué simbolizaba lealtad, fidelidad y amor eterno, y yo no pude no amarlo más. También en la mesita había un plato con una tostada y crema Filadelfia, un plato con fruta y un jugo de naranja. Pero lo que había en la mesita de cama no fue la razón de mi felicidad, si no verle entrar con una sonrisa radiante, un brillo en sus ojos inexplicable y su cabello revuelto y mojado por lo que supongo acaba de ducharse.

- Buenos días, mi amor. –me dice mientras coloca la mesita a cada lado de mis piernas y se sienta a un lado, me sorprende con un beso cálido y me dedica una sonrisa.

- Buenos días, cariño. –le respondo mirando el girasol y lo tomo para olerlo.

- ¿Qué tal dormiste? –me da un sonoro beso en la frente y acaricia mi cabello con parsimonia

-Dormí muy bien, ¿y tú? –como no podía dormir bien, si tuve una buena noche.

- No puedo dormir mal cuando tengo al amor de mi vida a mi lado. –Me dice y me guiña un ojo.

-Espero que esas dulces palabras me las digas toda la vida. Las necesitaré diario.

-Seré tu poeta personal, cielo.

- Amo cuando me dices así.

- Sé que el cielo, es la segunda cosa que más amas ver.

- ¿A sí? ¿Y cuál es la primera? - sonrió al saber la respuesta que saldrá

- Yo por supuesto –río y no lo puedo negar, él es mi vista favorita, me acerco para besarlo y el después toma el tenedor para darme de comer. -¿por qué no te equivocas? -como lo que me da.

- Porque yo soy sabio –Me hace reír. Termino de comer lo que me preparó Yoongi y me levanto para recoger las cosas, me pongo una pijama blanca y acomodo él edredón, él está abajo haciendo quién sabe que, bajo y lo atrapo limpiando la cocina, dejo las cosas allí y recojo mi plato, vaso y cuchara para lavarlos pero él me detiene.

- Déjalo amor, yo lo hago.

- Pero quiero ayudar –pongo una cara triste arrugando mi frente y el besa esa parte.

- Yo lo hago –repite dejándome atrás. Resignado voy por un florero y lo lleno de agua para meter mi girasol en él. Con una sonrisa en el rostro y los pies descalzos voy a la sala para ponerlo en la mesita de centro, es de cristal azulada y la rodean nuestros sofás color café oscuro, mi casa es bastante grande, es familiar aunque solo vivamos dos personas aquí. La observo sintiendo ese aire especial de enamorado y arreglo una campanita que se cayó del árbol, la pongo de nuevo y siento unos brazos rodear mi cintura.

- ¿Iremos a ver a nuestros padres hoy? - Me pregunta mientras coloca su barbilla en mi hombro

Yo me giro para verlo mejor

-Si, primero a los míos, luego a los tuyos en la noche ¿te parece?

- Me parece bien –junta su nariz con la mía y termina por darme un beso tierno.

-Bien alistémonos. –Subo a la habitación y tomo algunas cosas para ducharme, una toalla, ropa interior, crema de cuerpo y fragancia, me doy un baño de veinte minutos y salgo con la toalla enredada en la cintura, al salir Yoongi está allí arreglándose la chamarra que le regalé en su cumpleaños, es larga y de invierno, el gorro tiene mucho peluche y antes de que cierre el zipper me meto en ella y lo abrazo sintiendo el peluche de la chamarra y el calor de su cuerpo. El ríe porque parezco un niño y besa mi cabeza mojada.

Yo soy la estrella [yoonkook] (WATTYS 2019)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora