Llegaste tu (juliantina)

Caja de chocolates

VALENTINA

Mas claro no lo puedo tener ¡odio viajar en avión! Los asientos son demasiado pequeños, la comida no sabia buena y mi maleta se atoro en el porta equipaje dos veces.

Al salir del anden ahí estaban mis hermanos esperándome, ellos habían llegado días antes, me sonrieron y yo les conteste de la misma manera, nos abrazamos como si tuviéramos años sin vernos.

-¿que tal el viaje?- pregunto Guille

-ni me lo recuerdes, mejor llévenme a comer algo-

En el camino al hotel le llame a Juliana

-¿bueno?- contesto con voz adormilada

-olvide que vamos a 2 horas de diferencia-

-aparte de eso, hoy es sábado- los sábados acostumbraba a levantarse mas tarde

-solo hablaba para saber como estabas-

-estaba dormida- Juliana es de esas personas que si despiertas antes de tiempo la tendrás molesta gran parte del día.

-siento haberte despertado- escuche como suspiro antes de contestarme

-no te preocupes, me da gusto que hayas llegado bien-

-supongo que mejor hablamos mas al rato ¿verdad?-

-¡si- exclamo de manera un poco graciosa

Después de despedirnos colgué y mire por un momento la pantalla, fue ahí cuando entendí que me estaba costando estar separada de Juliana y ella tenia razón, era solo un fin de semana, de alguna manera también necesitamos tener nuestro propio espacio, cerré un poco los ojos y tome aire, le daría su espacio.

JULIANA

Después de que me marco Val me volví a dormir, ya ni siquiera recuerdo cual fue el ultimo fin de semana que tuve libre, al lado de ella siempre hay algún compromiso que cumplir, no me desagrada pero hoy que pude dormir más me di cuenta que extrañaba un día así.

Lo que resto de la mañana me la pase viendo televisión, había pedido algo de comer, no tenia intención de salir, hasta que Emma llamo.

-hoy no te puedes negar, voy a pasar por ti y vamos a algún bar-

-¿no tengo opción?- pregunte resignada

-¡no! Te doy 1 hora para que te arregles-

-los bares los abren después de las 6 y son las 2-

-¿te pesa pasar un día con tu amiga?- me pregunto haciendo ese tono característico de ella

-no- conteste rápidamente -tienes razón, solo deja que me bañe y si quieres le hablo a Alirio para que venga por nosotras-

-¿Alirio? ¿El chofer de Val?- pregunto sorprendida

-si, el- afirme

-tienes a tus pies a la Carvajal- me dio un poco de gracia su comentario

-te veo en una hora- corte la llamada, me metí a bañar y me arregle, justo a la hora tocaban a mi puerta, al abrir me tope con una Emma demasiado sonriente

-¡amiga!- me abrazo -hoy será nuestra noche- clásico en ella cuando salimos juntas

-Alirio ya nos espera abajo- le comente mientras tomaba mis cosas -¿a donde iremos?-

-vamos a comer, tengo ganas de pizza- no puse ninguna objeción, salimos del lugar y como ya es costumbre se encontraba Alirio con una sonrisa y la puerta abierta esperándonos, tras algunos minutos de viaje llegamos al lugar, el espacio se presta para poder platicar en compañía de una buena pizza.