Llegaste tu (juliantina)

New York (patre 3)

JULIANA

La noche nos había alcanzado, pero eso no parecía importarnos, caminábamos sin ninguna preocupación, sonreíamos de cualquier cosa, incluso por momentos parecía que todo transcurría en cámara lenta, memorizaba cada cosa de ella, su sonrisa, esos ojos, la manera en la que se acomoda el cabello y sobre todo como toma mi mano.

-¿en que tanto piensas?- me pregunto sin dejar de sonreír

-en la suerte que tengo- hice una pausa -todo esto es tan perfecto, haces que todo parezca un sueño-

-mi única intención es hacerte feliz- continuamos caminando hasta llegar al hotel, el ambiente era mas cálido, subimos por el ascensor y al abrir la puerta de la habitación me encontré con algunas velas y flores por toda el lugar

-¿que es esto?- pregunte sorprendida

-un detalle- me sonrió

-¿como?- 

-tengo mis trucos- esta vez yo sonreí con ella, sin pensarlo mucho la bese, era un beso lento, tenia tiempo sin estar así con ella, realmente quería disfrutarlo y transmitirle lo mucho que la amo. Al separarnos no podíamos evitar seguir sonriendo

-te amo- susurro, ante eso cerré mis ojos y sentí como me volvió a besar con un ritmo lento, delicado...

El celular de Valentina comenzó a sonar, desvío la llamada y se volvió a concentrar en mi, pero no paso mucho tiempo cuando volvió a sonar

-debe ser importante- me separe un poco de ella, miro su teléfono con algo de enfado y contesto dirigiéndose al balcón, al ver que pasaban algunos minutos decidí colocarme la pijama y acomodarme en la cama a ver la televisión, admito que me distraje fácilmente con un programa de hacer pasteles, la única vez que intente hacer un pastel eche a perder el horno de la casa, pero aun así me entretengo viendo esos programas, después de algunos minutos Valentina volvió a entrar al cuarto, acomodandose a mi lado, aunque aun no la tocaba podía percibir lo fría que estaba, fijo su vista hacia la tele sin decir nada -¿todo bien?- pregunte

-era Guille- no dejaba de ver la pantalla -Eva le contó lo de las fotos-

-¿y que paso?-

-primero me dijo que no podía creer que fueras esa clase de persona, antes de que te atacara mas preferí decirle la verdad, le conté lo que paso con Mariana y que en realidad las dos estamos acá buscando a Lucia-

-¿y que te dijo?- realmente me había sorprendido

-dijo que parecía de película, creo que al principio ni siquiera me creía, pero con forme le conté todo lo fue asimilando, incluso me dijo que si necesitamos algo le avisemos- volteo a verme y me sonrió

-entonces esa es una buena noticia- afirme

-si- no la veía muy convencida

-¿Por qué esa carita?- pregunte

-sigo sin entender todo esto Juls, es mi hermana- sabia a lo que se refería, removí un poco las sabanas y la abrace

-mi mamá siempre me decía que por amor uno llega a hacer cualquier cosa, pero por desamor haríamos cualquier cosa sin pensar a quien podemos dañar, supongo que algo así le esta pasando a Eva, no la a tenido tan fácil- comencé a acariciarle la mejilla para intentar tranquilizarla

-supongo que tienes razón- volteo a verme y me dio un fugas beso, nos sonreímos y pude ver que se había percatado de algo

-¿en que momento te cambiaste?- me pregunto levantándose un poco mas

-cuando hablabas con tu hermano-

-no pretenderás volverte a quedar dormida ¿o si?-   

-¿y no se supone que tu no estas de humor?-reproche