4 - Capítulo

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Rápidamente pensé en la posibilidad de que fuera una broma de Ushijima para reírse de mí, no me sorprendería nada, pero, Ushijima no haría una broma de este tipo, Tendo también es su amigo, si quisiera vacilarme no sería con Tendo en medio de la broma. Le di un voto de confianza y me centré en mi mejor amigo.

- ¿A qué hospital lo han llevado, Ushijima?
- En el hospital del centro "Mishuriko" - respondió él rápidamente.
- Vale - justo cuando fui a colgar me dijo.
- Espera, Li, di que eres familia sino no te dejarán pasar a verle.
- Claro, gracias Ushijima - y tan rápido como colgué salí corriendo hacia la parada de autobús más cercana. Justo esperando, adivinad quien estaba, claro Nishinoya.

- Hey, Li ¿qué pasa? – preguntó bastante preocupado.

- Tendo... no está bien voy... voy al hospital.

- Espera, espera despacio, ¿Quién es Tendo?

- Mi amigo en.... en Shiratorizawa – dije yo intentado calmarme.

- Vas a ir a verle al hospital ¿Cuál? ¿el Mishuriko?

- Si si

- Bien, voy contigo, tranquila Li, tranquila, respira – me abrazó – voy contigo.

Me separé de aquel abrazó extrañamente reconfortante, cogí aire muy fuerte y me traté de tranquilizar. El autobús llegó unos minutos después, subimos en silencio, validamos la tarjeta y nos sentamos uno al lado del otro. En cuanto nos sentamos le envié un mensaje explicándole todo a Tobio, sabe lo mucho que me importa Tendo y eso ayudó a que no se enfadara tanto por mi repentino viajé. También le dije que Nishinoya estaba conmigo, por lo menos no iría sola al otro lado de la ciudad.

El viaje era largo, la última parada de la línea 76. Íbamos en silencio, lo único que se oía era mi pecho cogiendo y soltando aire tratando de relajarme y pensar en positivo. Nishinoya lo noto y se pegó un poco a mí yo apoyé mi cabeza en su hombro y milagrosamente me sentí mucho más tranquila. Qué tendría ese chico.

Casi una hora entera más tarde llegamos a la puerta del hospital y entré casi corriendo hacia la recepción.

- ¿La habitación de Tendo Satori? Soy su hermana – añadí pensando en el consejo de Ushijima.

La recepcionista sin apenas molestarse por mis formas miró en una especie de libreta enorme que tenía en el mostrador y mientras señalaba hacia los ascensores de la izquierda añadió:

- Habitación 145, segundo piso.

- Muchas gracias – y salí corriendo hacia los ascensores.

Al llegar al segundo piso vi la puerta 145 me paré justo delante, cogí aire y toqué la puerta y alguien desde dentro nos abrió, Tendo estaba en la cama sentado con un batín del hospital y un tubo conectado a su brazo por el que fluía el suero. Ni me lo pensé dos veces fui a abrazarlo, no podía esperar más.

- ¡Li! – no se esperaba mi visita.

- Hola - dije a punto de llorar - No te veo en un par de meses y tienes un accidente, esto es un problema – dije en broma más para mí que para él.

- No te veo en un par de meses y ya tienes novio – me respondió siguiéndome la broma mientras miraba a Nishinoya. Fue a hablar y le corté diciendo:

- No, Nishinoya no es mi novio, es un amigo de la preparatoria, también juega a vóley.

- Hola – le dijo Nishinoya unos metros más atrás.

- Hola, soy Tendo Satori, encantado – saludó mientras me miraba con cara de cómplice.

En ese momento entro Eita, me quedé congelada.

6 meses atrás...

Eita, mi novio en aquel entonces, y yo habíamos quedado para ir a un parque de atracciones un sábado, llevábamos unos meses saliendo y en ese momento Eita era el amor de mi vida. Quedamos en la entrada del parque y allí estuve esperándole alrededor de una hora, pero nunca llegó. Yo enamorada perdida intenté no darle mucha importancia y pensé en que algo le habría surgido y no pudo avisarme. Entonces mientras volvía a casa decidí pasar por su casa para ver si podría darme alguna explicación razonable.

Le vi delante de su portal, al acercarme estaba junto a una chica, no quise parecer celosa y sacar conclusiones. Pensé que sería un familiar o algo por el estilo, pero cuando me acerco unos pasos más los veo besarse, en ese momento deseo morirme y salgo corriendo hacia mi casa.

Más tarde, en casa por mensaje le escribí a Eita "Lo dejamos" y después le bloqueé, no quería ni saber su respuesta. Se lo conté a Tendo y él me ayudó a superarle, he estado evitando a Eita desde entonces.

Ahora...

Había superado a Eita hace varios meses, pero no le había visto y en ese momento solo sentía asco. Quería salir corriendo y eso hice, fui hacia el pasillo, no quería hablar con él, estaba más que olvidado.

Eita me alcanzó y empezó a hablar

- Li...

- No quiero hablar contigo, no quiero nada de ti - sentencié.

- Solo quiero pedirte perdón.

- Después de todo este tiempo, ¿ahora? ¿ahora quieres hablar? ¿en serio Eita?

- Si, de vedad Li...yo

- No me llames Li, no me llames de ninguna manera, déjame en paz.

- Vale Liliane, lo siento, de verdad, me dejé llevar no quería hacerte daño y sé que esto – se señaló y después a mi - ya no va a ser igual que antes, pero ¿me podrías por lo menos perdonar?

HAIKYU x READERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora