CAPÍTULO 5.

17 3 0
                                    

Accedí a irme con el profesor, me desvié un poco al ver a Celeste de ahí se fue solo el profesor y yo me fui con Celeste. Al llegar al salón pudimos observar que ya estaba el profesor de geografía anotando algunas cosas, llega demasiado temprano, o será que él se duerme en la escuela.

- Odiarás a este profesor, Grecia

- ¿Por qué lo dices, Celeste?

- Es el típico profesor que deja miles de tareas y nunca la revisa y cuando las revisa nosotros no la hacemos y se hace una guerra hasta que termina en un reporte grupal.

Sonreí al escuchar lo que dijo Celeste, me levanté y me dirigí al profesor Sebastián para platicarle que soy de nuevo ingreso y que ojalá me pudiera dar permiso de hacer todos los trabajos. Accedió muy a su pesar, yo no tenía la culpa que mis padres hicieran sus berrinches de niños pequeños, tocaron la campana para iniciar las clases y el profesor se puso a pasar asistencia a los alumnos.

- Sergio Rodríguez Ocampo. –Volteo a ver el pupitre vacío. - ¿Segio?

- Lo siento por llegar tarde, había mucho tráfico. –Entró un muchacho como loco al aula.

- Ya le dije señor Rodríguez que después del toque ya no puede entrar, a parte entró como si estuviera en su casa.

- Si le pido permiso no me dejará entrar y yo no estoy dispuesto a perderme la clase. –Dijo sentándose a un lado de mí, volteo a verme y me dedicó una sonrisa.

- Tendremos que hablar con su tío, para que ha... -Sergio interrumpió al profesor.

- Yo tengo a mi padre y a mi madre mi tío no tiene por qué meterse en mis asuntos, no vivo con él y mucho menos me mantiene, si algo desea arreglar le diré a mi padre que venga mañana a hablar con usted. –Dijo dedicándole una sonrisa al profesor.

- Como no estoy dispuesto a perder mi clase por su culpa, seguiré pasando lista y después revisaremos la tarea.

Siguió pasando asistencia y la clase la comenzó proyectando un vídeo un tanto aburrido, todos estaban recargado en la paleta de sus pupitres, otros estaban haciendo tareas de otras materias, los únicos que poníamos atención éramos Celeste, Sergio y yo. Cuando terminó el vídeo nos puso en equipos de 3 personas e hicimos una actividad que nos dio, poco tiempo después sonó la campana avisando el fin de la clase. El profesor nos pasó una hoja pequeña a todos y ¡oh sorpresa! Era toda la tarea que teníamos que entregar mañana, ahora sé porque dijo Celeste que odiaría a ese profesor.

- ¿Y la va a revisar toda? –Dijo Sergio.

- Ese es mi problema usted cumpla con hacerla y ya. –Respondió el profesor enojado y se salió dando un puertazo.

- No haré ni madres, tengo otras materias más importantes que atender, ¿no Celeste?

- Eso sí, solo haré los resúmenes, cuestionarios y las demás las dejaré a medias, Sergio te presento a mi amiga Grecia, ven para acá Grecia. –Me acerque un poco a ellos.

- Un placer Grecia.

- El placer es mío Sergio.

Salimos del aula a acompañar a Sergio a la papelería por algunos materiales que se le olvidaron.

Cuando ya íbamos a regresar al aula vimos al profesor Nicolás, Sergio al verlo se adelantó y nosotros lo seguimos, llegamos y nos pusimos a platicar en lo que llegaba el próximo profesor o profesora.

- ¿Hicieron la tarea de ortografía? –Pregunto Celeste.

- Sí, ¿quieres que te la pase? –Le respondí

- Por favor, no tengo en donde imprimirla y me da demasiada pereza ir hasta el ciber a imprimirla y eso que yo tengo mi propio ciber.

- Eres demasiado floja, déjate de hacer tonta con tu novio y dedícate a la escuela. –Dijo Sergio.

Los tres nos miramos y nos comenzamos a reír, pero, todo valió cuando entró la profesora de química, todos estaban pálidos al ver que la profesora entregaba exámenes sorpresas. Todos estábamos demasiado nerviosos, pero, qué más podemos hacer más que contestar pura babosada en el examen, sin exagerar nos dio toda la clase, a parte había llegado demasiado tarde. Me levanté de mi asiento y  le entregué el examen al igual que los demás profesores le dije que era de nuevo ingreso y todo eso, era más amigable y me dio un sí de inmediato. Me pidió que saliera del aula para que no distrajera a mis compañeros, salí y me coloqué en el barandal, sabía que aún faltaban 10 minutos. Saqué mi teléfono para marcarle a mi padre, pero, no atendía mis llamadas, tal vez este en una junta de suma importancia, así que ignoré todo eso y mejor le mandé un mensaje de texto y por si no lo veía se lo mandé también por whatsapp guardé el teléfono y fui a comprarme una botella de agua. Mientras caminaba pasé por la sala de profesores y ahí se encontraba él, apresuré mi paso y me fui a la tienda, ya no tenía ganas de volver a pasar por ese lugar. Así que decidí tomar un atajo y era dar toda la vuelta por la cancha, al llegar a mi edificio él salió de la sala y se fue acercando hacía mí...

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

- ¡HOLA!

- Si no te gusta la historia, por favor no insultes solo ignórala. Te lo pido de corazón. Tampoco la adaptes ni la robes, me esta costando redactarla, hazme ese favor.

- Hasta ahora...

Chica en casa.Where stories live. Discover now