Lindas mascotas

🐰Capitulo 2 🐇

Tras ponerse de acuerdo de que harían, Wally carga a Richard estilo princesa, lo que hace que se sonroje y que agache sus orejitas de conejito, mientras movía su esponjosa colita, no sabía porque se sentía tan nervioso al estar cerca de su mejor amigo.

Wally también se sentía nervioso, pero no entendía muy bien, o mejor dicho no lo quería aceptar. Estaba enamorado de su mejor amigo, ¿Desde cuando?, no lo sabía exactamente, solo sabe que de un momento a otro paso.

Al llegar a la casa de sus tíos Wally, dejo a Dick en el sillón, el seguía con sus orejas agachadas y algo sonrojado, lo que lo hacia ver muy adorable, al punto de vista del pelirrojo.

-Bueno siéntete como en tu casa, eres libre de hacer lo que quieras, ya sabes donde esta todo y si quieres puedes dormir en mi habitación, yo dormire en la de mis tíos- Informo el pelirrojo.

-Gracias Wally, ¿Podrías prestarme algo de ropa?- Pregunto levantando sus orejitas y mirando a su amigo.

-Claro, en seguida regreso- Contesto y fue corriendo a su habitación, cuando regreso llevaba solo un pantalón de pijama y en la mano la playera.

-¿Ah?- Exclamo Dick confundido y sonrojado de verlo así, si bien no era la primera vez que lo veía sin playera, aún le avergonzaba un poco, pero trataba de esconderlo.

-Mi ropa es muy grande para ti, lo hemos comprobado, ¿Qué tal si solo te presto la playera?- dijo sonriendo pero se sonrojo al pensar bien sus palabras-B-bueno s-si quieres claro esta- Hablo rápido, intentando no sonar nervioso pero fracasa.

-Esta bien - Acepto y empezo a quitar su uniforme para colocarse esa playera muy sonrojado de que su amigo lo viera así, no era la primera vez que se cambiaba frente a su amigo pero esta vez estaba avergonzado, y no entendía el porque.

Por otro lado, Wally lo observaba con atención, cada detalle del cuerpo de Richard hasta llegar a su trasero, donde rápidamente aparto la vista y intento no imaginarse nada subido de tono.

Al terminar de vestirse pidieron una pizza, o mejor dicho varias a petición del velocista, y se sentaron a ver películas y jugar videojuegos.

Las orejas de Dick se movían dependiendo de sus emociones, eso le causaba gracia a Wally, su cola no era la excepción, que se movía de igual forma, se veía tan suave y esponjosa que daban ganas de tocarla.

-¿Puedo acariciar tus orejas?- Pregunto Wally, de repente mirando al menor, con una sonrisa típica de el.

-¿Eh?...cla-claro- Respondió después de pensarlo un poco, de cierta forma no le sorprendía que su amigo quisiera acariciar sus orejas, raro se le había hecho que hasta ahora se lo pidiera.

Dick permanecio quieto, solo se inclino un poco para que Wally, tocara sus orejitas, el mayor acerco poco a poco su mano para tocar las largas orejitas peluditas, que ahora portaba el primer Robin, claro lo hizo con cuidado.

Richard debía admitir que las caricias en sus orejas se sentían muy bien, que involuntariamente pego su cabeza un poco más a la mano de Wally para que continuara, Dick cerro los ojos y sonrío, a West eso le causo mucha ternura que no pudo evitar exclamar un "Aww" al verlo.

-Wow viejo, te ves muy adorable...Son tan suaves y esponjosas- Se burla el pelirrojo sonriendo y provocando un sonrojo en el pelinegro, por aquellas palabras.

Después de un rato de estar así, los 2 se miraron muy sonrojados y solo pudieron reír nerviosamente.

Siguieron comiendo, intentando hacer como si nada pasara, por lo que cambiaron de tema, y continuaron viendo la película que habían puesto.

Después de terminar la película, cada quien se levanto para recoger todo e irse a dormir Dick a la cama de Wally y este a la de sus tíos.

~ Dios que me pasa, no puedo creer que lo acaricie sus orejas son tan suaves,¿Su colita sera igual de esponjosa y suave? Me gustaría acariciarla, aunque se ve aún más esponjosa que sus orejitas... Espara un momento ¡En que estoy pensando! Richard es solo mi amigo y los amigos, no tienen ese tipo de pensamiento~ Pensaba Wally sacudiendo su cabeza, para ignorar ese tipo de ideas de su mente, intentando dormir un poco, aunque solo daba vueltas en la cama.

Dick al contrario, de su compañero, pensaba en lo mucho que le había, gustado las caricias del mayor, pero en fin de cuentas eran mejores amigos, no había nada de malo en que el pelirrojo le acariciara sus orejitas temporales de conejo, ¿Verdad? Tampoco había nada de malo que le gustara tener la atención del pelirrojo ¿Cierto?