Pensamiento Multicolor

378 82 7
                                    



Capitulo 8

          "Buscaba una canción y me perdí

En un montón de palabras gastadas,

No hago otra cosa que pensar en ti

Y no se me ocurre nada"

-Joan Manuel Serrat; No hago otra cosa que pensar en ti.                                                                                                                 

.


Te veo.

Te veo entre ese follaje de amapolas anaranjadas como el atardecer, entre jacintos blancos tal cual perlas de océano. Te veo cuidarlas, dando esos pequeños pasos mientras con amor las riegas. Cuando olvidas que te observo, te veo reír entre estas, cuando traviesamente alguna te acaricia la nariz con sus pétalos, te hacen cosquillas con las hojas, tú te das vuelta y las acaricias a todas. Así vas siguiendo el sendero de aquella que es tu selva personal. Les dedicas palabras como si conversaras con ellas, otorgándoles a cada una pedacitos de tu preciada atención, porque según tu crecen mejor al hablarles o con música. Y sinceramente tu voz podría contar como eso, pues es música para mis oídos.

Te veo cargar la amarilla regadera, tarareando estrofas de una canción pegadiza. A veces me pregunto si en realidad eres un ángel que vino aquí a cumplir una tarea de Dios. Atas tu delantal claro en un gesto que se me hace inevitablemente adorable. No sé que es, si tus suaves cabellos rizados como hojas dispersas de madre selva, si son tus grandes ojos que expresan la ternura e inocencia del mundo, brillan como gemas de tesoro de dragón en los cuentos. A veces creo que son jade, otras esmeraldas. Si tan solo yo fuera el dragón de las leyendas de la Edad Media, tu serias mi tesoro, que resguardaría de todos los mercenarios e incautos que se lo quisieran robar. No sé que es, pero me tienes jodidamente hipnotizado.

Esos orbes verdes muestran asombro cuando me encuentras siguiendo tus movimientos, y te ríes, algo avergonzado de que te haya pillado. Tu sonrisa se ensancha a la vez que un ligero rosa acompaña tus pecas. Abres tus labios para llamarme. Sé que lo vas a hacer. Lo sé por cómo me miras, por como inclinas la cabeza a la derecha casi imperceptiblemente. Entonces...

-Bakugou... Bakugou... ¡Bakugou!-

Mis ojos se abren pesada y somnolientamente, buscando quien me llama. Desorientado veo alrededor, encontrando con múltiples rostros y desgraciadamente a mi profesor junto a mi banco.

-Más le vale que esto no se repita, joven Bakugou. A menos que quiera que me queje personalmente con el rector. Ahora lea la pagina 42.-

Aun terminando de despertarme, procedo a ponerme de pie, con el libro en mano. Empiezo a leer como si estuviera en modo automático. Pero aquello no dura mucho. Es un poema, del libro de literatura. Como si no fuera suficiente soñar contigo, llegas juguetonamente a mi mente, entre sonrisas y gestos nerviosos. No puedo evitarlo.

Al terminar de leer, me siento intentando prestar atención, y es ahí cuando me pregunto "¿Pensaras también en mí?" Para seguidamente desearlo.

.

§ Pensamiento multicolor: Piensa en mí como yo lo hago en ti

.

Nota: Im back B)

El chico de las floresWhere stories live. Discover now