10.

3.9K 720 108
                                    

Al día siguiente me levanté con mucha energía —extrañamente—, y para mamá fue tan obvio que eso no era parte de mí, que me preguntó qué traía entre manos cuando bajé como un torbellino las escaleras —con cuidado de no caerme, por supuesto— para hablarle a Lisa, quien había llegado tan puntual como lo había prometido. 

Por obvias razones, mamá no podía saber nada —o se pondría peor que Rosé, estoy segura—, así que le mentí —por primera vez en mi vida— diciéndole que Lalisa me había prometido que saldríamos juntas porque quería conocerla mejor y viceversa y por esa razón Rosé no estaba con ella —aunque si lo pensaba bien, no era del todo una mentira. Lalisa y yo nos estábamos conociendo mejor con todo esto y cada vez la aprobaba aún más para Rosé—.  Ella nos despidió repitiendo más de tres veces que tuviéramos cuidado y ambas partimos.

—¿Nerviosa, Jen? —me preguntó Lisa, una vez estuvimos fuera de mi casa.

—Un poco —no pude evitar jugar con mi bastón inquieta, y por mi respuesta estoy muy segura que ella sonrió. Pasó una mano por mis hombros después y me acarició el cabello como si fuese mi hermana mayor, aprovechándose de su altura en el proceso.

—Te entiendo. Yo también estaría nerviosa si fuese tú —dijo.

—Muchas gracias, Lisa. Eso ayuda mucho —bufé, escuchando su risa de fondo. 

De repente, ya no se escuchó más y ella se detuvo abruptamente, provocando que yo también lo hiciera. Fruncí  el ceño ante la inusual acción y traté de averiguar qué había salido mal.

—¿Sucede algo? 

—No, solo... Bueno... —suspiró—. Si Rosie nos viera así ya me hubiera apartado de ti desde hace tiempo —trató de bromear, sin embargo, eso no evitó que el tono triste con el que hablaba la delatara. 

Así que eso es lo que está mal... Ella y Chaeyoung...

—Tú y Chaeyoung... ¿Discutieron o algo así? —me atreví a preguntar, después de unos segundos en un incómodo silencio.

—Sí... No... Bueno, es complicado —soltó una risa que no sonó para nada divertida. No era como ninguna de las que ella solía soltar.

—¿Lo hicieron? 

—Algo así... Ella sigue molesta porque te estoy apoyando en esta locura. O eso dice —volvió a suspirar—. No quiere que nada te pase... Y lo entiendo, pero suele encerrarse en esa burbuja cuando algo así sucede y no hay forma de sacarla de ahí. 

—¿Es frustrante, eh? 

—Lo es. Como no tienes idea —gruñó dejando libres mis hombros—. Es tan difícil a veces para mí entenderla. Te juro que lo intento y trato de tener paciencia... Ahora, por ejemplo, no quiere hablarme y se la ha pasado ignorándome todo el día... Pero aún así, y a pesar de todo, la amo... Ella es... Especial.

Reí ante su forma de describirla y tomé el que supuse era su antebrazo, dando un ligero apretón.

—Y sé que ella te ama también. Pero Chaeyoung es así, desde que somos pequeñas realmente... Lo de su padre le afectó mucho y el hecho de que la molestaran por esas cosas solo empeoraba todo —guardé silencio durante unos segundos—. ¿Aún se culpa? 

—Ya no tanto como antes, pero lo hace —dijo—. Todas las noches antes de irse a dormir tiende a recordar todo y llora mucho... Odio verla así, de verdad me rompe el corazón. Quisiera que todo su sufrimiento acabara... Quisiera acabar con él.

—Pero no puedes —negué, tratando de buscar las palabras correctas—. Lo único que puedes hacer es apoyarla. Estar ahí para ella cuando te necesite y no dejarla sola. Ella solo necesita amor, Lisa, y tú puedes ayudarla con eso. Estoy segura de que si te permitió entrar en su vida fue por algo. No intentes acabar con sus problemas, lucha con ella y lo agradecerá más. Créeme... Yo desearía tener a alguien para luchar a mi lado como tú. Ella tiene suerte. 

Durante breves instantes lo único que sentí fue sus brazos envolverme y no pude hacer más nada que confortarla.

Solo no dejes que la oscuridad la consuma... Por favor, Lalisa. Es lo único que te pido.

—Jamás —negó, plantando un beso en mi mejilla al momento de separarse—. Lo prometo Jennie.

—Gracias —susurré, sonriendo.

—Bueno, llevamos mucho tiempo aquí —volvió a su optimismo y alegría usual—. Y no hay tiempo que perder, so... ¡Vamos por tu chica, JenJen! —eso me hizo sonrojar levemente y ella volvió a pasar su brazo por mis hombros.

—No es mi chica —me negué, sin embargo, algo dentro de mí se alegró infinitamente por escucharlo.

—Lo será en cuanto ambas hablen, ¡Ya lo verás! 

Realmente tener una amiga como Lisa me iba a servir mucho. Su felicidad es contagiosa, ¿Eh? 

Iba a encontrar a Jisoo. Por supuesto que iba a hacerlo.

...

Pero, a pesar de mi optimismo fugaz y mis enormes ganas de encontrarla, todo lo que recibí fue una negativa para algo que yo ya sabía. 

Ella no se encontraba allí.

Lalisa tampoco iba a rendirse fácilmente, y me empezó a preguntar si ella y yo alguna vez visitamos otro lugar en el parque, haciéndome recordar el lugar con los amables viejitos, la pequeña cancha de fútbol y el puesto de hot dogs. Ella rápidamente me guió hacia los tres lugares en orden, sin embargo, como la suerte no parecía estar de mi lado estas últimas semanas, no encontramos ni una sola pista sobre su paradero actual.

Al final del día, Lalisa me dejó en la puerta de mi casa con un montón de promesas y esperanza renovada gracias a sus palabras.

Debería ser motivadora personal... Fue lo que pensé.

No obstante, el día siguiente tampoco la encontramos allí.

Ni al día después.

O el día después de ese.

O el día después del día después.

Tampoco la semana siguiente.

Y después de buscar el sábado siguiente entre todos los lugares mencionados, empecé a perder la esperanza.

El sentimiento de culpa creía cada vez más. 

Y mi alma se desgarraba con cada paso.

Parecía como si la tierra se la hubiese tragado. No habían señales de que volvería, era como si todas las luces rojas estuvieran encendidas en mi contra. 

Jisoo... ¿Dónde estás...?

¿Sería mucho pedir que me dejen sus votitos por mi cumple? :'v
Ahre

¡Aquí tienen el capítulo justo como les prometí, sip! Espero que les haya gustado y muchas gracias por leer, votar y comentar. 

Pd: Se acerca el final uwu.

Eyes┊JenSooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora