Aula 155

Improvisar

Hola! He vuelto con el último de hoy. Jeje. Mañana continuaré con este fic y el de Breacking chains.
Aprovecho para daros las gracias porque he tenido un día dificil y tanto por aquí como por twitter me habéis animado, no os merezco.
Disfrutad de la lectura y hasta mañana.

CAPÍTULO 9: IMPROVISAR

Eran las siete de la mañana cuando su teléfono la despertó, luchando aun contra el sueño miró quién podía llamarla a esas horas y se incorporó al ver que era Pablo. El muchacho no solía llamarla nunca e imaginó que pretendía darle los buenos días, ya que cada día le sorprendía con un detalle distinto.

Con una sonrisa en su rostro adormilado, se acomodó el pelo, a pesar de que su novio no la vería, y contestó a la llamada, intentando sonar enfadada​, cuando en realidad las mariposas revoloteaban en su estómago a marchas forzadas.

-Pablo, son las siete ¿Qué ocurre?

-Ire, siento despertarte pero necesito verte antes de que vayas a clase.

-¿Sucede algo?

-Necesito hablar contigo.

-Estaré lista en media hora.

-Paso a recogerte.

Colgó dejándola con la palabra en la boca, el ceño fruncido y mil dudas bailando en su mente. ¿Qué querría Pablo? ¿Qué sería tan urgente?

Se arregló como pudo, con prisa, a pesar de que estaba hermosa, su rostro mostraba consternación, quizás Pablo se había cansado de esperarla, querría dejarla por ser tan cobarde y no atreverse a dar el paso, a ir más allá.

Tras media hora salió de su casa y Pablo la esperaba en la entrada, había aparcado la moto y se estaba fumando un cigarro mirando al infinito.

Al llegar hasta él, lo saludó con cariño y se sintió aliviada al notar que este le devolvía el saludo y la besaba como siempre, no había cambiado nada. Él cogió su mano y empezaron a andar, mientras Irene notaba que se congestionaba de dolor de vez en cuando.

Frenó en seco, la angustia la estaba matando y necesitaba poner nombre a sus incógnitas por lo que miró los ojos oscuros del muchacho y preguntó sin rodeos.

-Pablo ¿Qué sucede?

-Me han amenazado, alguien quiere que me separe de ti.

-Eso es una estupidez ¿Quién podría querer algo así?

-No lo sé, no la conozco, pero tiene fuerza. Me destrozó la espalda contra una pared.

-¿Una mujer?

-Sí, yo no la había visto nunca pero ella te conoce.

-¿Cómo era?

-No muy alta, castaña, tenía los ojos oscuros y una mirada mortífera, llevaba una chaqueta negra… no recuerdo más solo sé que está loca, me amenazó para que rompiéramos, me abordó ayer en el parque.

-Sé exactamente quién es…

-Pues ve con cuidado con ella amor, está loca.

Llegaron a la facultad y se despidieron con un suave beso, Pablo se alejó tras asegurarle que la llamaría por la tarde e Irene, llena de ira, se encontró con Ruby para ir a clase. No pronunció palabra pues le hervían las entrañas y a última hora tenía clase en la 155, Inés Arrimadas había ido demasiado lejos, había amenazado a su chico sin motivo alguno y ella no iba a quedarse callada.

***

Inés se levantó sintiendo el peso del mundo sobre sus espaldas, había dormido mal pensando en lo que había visto esa misma tarde.