P R Ó L O G O

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0.

Los músicos permanecían perfectamente alineados al lado del altar, listos para el gran momento.

Aquella iglesia lucía majestuosa con los tulipanes blancos que adornaban su entrada, y los impecables lienzos de tul que caían sobre las bancas.

Había invitados de renombre, personas de importante perfil, familiares y demás amigos de los novios. Todos estaban a la expectativa del evento del año, la esperada boda que representaba la unión de dos familias de alcurnia. Era la vista al mundo de la pareja perfecta y el inicio de su vida como esposos.

La emoción en el aire era latente; sobre todo para la familia Jeon, porque este sería el día en que Jungkook, su único hijo, finalmente contrajera matrimonio.

Los padres del joven, no podían estar más contentos con la mujer que estaba por convertirse en su nuera. Una chica hermosa e inteligente que les había conquistado desde la primera vez que la habían visto, esa que era la candidata perfecta para formar parte de su familia y que habían elegido para su hijo.

La música comenzó a sonar en cuanto el auto de la novia arribó a la iglesia. Todos los presentes se pusieron de pie para recibirla cuando bajó del vehículo mostrando su espectacular vestido blanco y el fino velo que ocultaba su rostro.

Se quedó quieta; los violinistas ejecutaban la marcha nupcial pero faltaba algo importante. El murmullo de las personas que se veían intrigadas entre sí comenzó mientras fijaban su vista al frente en el espacio vacío en el altar.

Los padrinos permanecían estáticos del lado izquierdo, recibiendo todas las miradas de los invitados sin saber qué ocurría.

El más alto de ellos preguntó discretamente al resto—: ¿Dónde rayos está Jungkook?

Todos los invitados movían la cabeza intrigados en la iglesia mientras esperaban a que el novio se dignase a aparecer; pero no, Jungkook estaba demasiado ocupado en el baño besando a uno de sus padrinos mientras gemía.

Su traje estaba arrugado, y ahora su cabello se había alborotado por el sudor que descendía por todo su cuello.

—Te quiero demasiado pero haces que te odie mucho justo ahora. Llegaré tarde por tu culpa —dijo mientras sentía sus manos tirar de su cabello.

—No pueden culparme por robarme al novio un par de segundos.
—Taehyung le vio tentándolo—. Porque después de todo, también es mi novio —dijo cínico.

—Nosotros no podemos seguir con esto, Taehyung. —Las manos del rubio se habían deslizado dentro de su camisa para quitársela mientras lamía su cuello.

—No te engañes —dijo desafiante—. Ambos sabemos que nunca cambiarás, no podrías alejarme de ti aunque quisieras, me necesitas.

—¿Y tú? —Recorría su torso desnudo mientras respiraba profundamente la esencia de aquella colonia en su piel.

—Yo también te necesito.

Aunque hubiese conseguido engañar a todo el mundo dentro de esa iglesia. Aunquesus padres y a su novia creyeran que se habían salido con la suya, jamás podría engañarse a sí mismo y negar lo mucho que necesitaba al rubio, lo mucho que deseaba con desespero quedarse allí con él.

Así que ahora, no sabía qué era más fácil: si caminar hacia el altar y seguir con la vida que habían escrito para él o huir en ese momento con el chico que tanto adoraba.

Maldita sea, estaba jodido. No podía cambiar lo que había sido estipulado desde hacía ya cinco años atrás. Tenía que casarse, pero los labios húmedos de su amado y sus ojos llorosos lo estaban haciendo flaquear.

—¿Me querrás después de hoy? —le preguntó como si temiera la respuesta.

Taehyung se alejó de él.
—Lastimosamente, lo haré.

—Sé que no tengo derecho de pedirtelo pero, ¿Puedo verte después de la ceremonia?

—No lo sé. —Las cosas serían diferentes, tenía mucho que asimilar. Sabía que debía renunciar a él justo ahora, pero no quería hacerlo y estaba seguro de que Jungkook tampoco quería.

—Taehyung...

—Deberías irte, te están esperando.

—Tienes razón, es hora de que cumpla con mis padres —dijo con desdén.

Salieron del cubículo donde estaban encerrados, ambos arreglaron sus vestiduras tratando de guardar la compostura y aparentar que eso que pasaba entre ellos no existía. Tratando de fingir que ellos no se amaban desde que era tan solo unos niños.

Taehyung acomodó el corbatín de Jungkook y peinó su cabello antes de dejar un beso en su frente.

Contenía sus lágrimas e intentaba sonreír—. Te ves muy guapo de traje —dijo resignado—, es irónico porque siempre creí que te vería así en nuestra boda, y ahora resulta que es solo tuya.

—No digas cosas como esas, por favor.

Negó con la cabeza, no tenían más tiempo. —Te veré en la noche, Kook.

Ambos salieron de allí, y juntos, entraron a la capilla para continuar con la farsa a la que estaban condicionados. Jungkook entró primero y se movió rápido hasta el altar donde debía estar.

Todas las personas—sobre todo sus padres—volvieron a respirar con tranquilidad cuando lo vieron allí enfrente, luciendo como un príncipe de mirada oscura.

Taehyung tomó su lugar entre los demás padrinos minutos después, cuando toda la atención estaba sobre la hermosa novia que caminaba realizada hasta llegar al lado del pelinegro.

—Amados Hermanos, estamos aquí para presenciar la unión de dos almas en sagrado matrimonio...

La ceremonia tomó su curso, y el rubio no podía hacer más que contemplar a la chica que representaba todo lo que él nunca podría ser.

Como en la mayoría de las bodas era una tradición que la novia portase algo nuevo, algo usado, algo azul, y algo prestado. Y efectivamente, así era.

Taehyung veía como su vestido nuevo, el collar usado y los pendientes azules que tenía cumplían totalmente con la tradición. Era un pena que lo único prestado que tuviese la chica fuera el hombre a su lado; porque Jungkook había sido suyo antes que de ella.

Era su mejor amigo, su primer amor, su alma gemela y no sabía por cuánto tiempo más aguantaría tener que compartirlo.

Reaccionó justo después de que dijera sus votos. Eso que había temido escuchar durante tanto tiempo estaba a punto de decirse, no había marcha atrás.

—Jeon Jungkook, ¿Aceptas a esta mujer como tu legítima esposa?

—Acepto.

Ambos tragaron con fuerza, ojalá esto hubiese sido más fácil.




Mayoritariamente ficción.

Contenido Homosexual.

Si te ha gustado la idea tanto como a mí cuando me animé a escribirla, vota y házmelo saber en un comentario.

Manténgase con vida. J.S.

E A S I E R 《KookV/Taekook》Where stories live. Discover now