—¿Puedo saber qué es? —le pregunto a la doctora. Dean asiente y yo sonrío.
—¿Segura?
—Sí. ¿Dean?
—Admito que quería que sea una sorpresa, pero la intriga me mata.
—Bueno, pues yo ya lo sabía desde hace algunos meses. Y debo decir...
—¿Un niño? —pregunto cerrando los ojos.
—Casi, solo que este niño no tiene un pene. Es una niña Kim, felicidades.
Suelto un jadeo y mis ojos se nublan por las lágrimas.
—¿No me miente?
—No.
Dean limpia mis lágrimas y lo veo.
—Una niña Dean...
—También estoy feliz, Kim. —El pega su frente a la mía y me abraza —. Me haces muy feliz, Kim.
—Debo darte algunas indicaciones, Kim. Estos tres meses son los últimos para ti.
—Sí. Gracias.
Mientras la doctora habla, Dean y yo prestamos mucha atención. Luego salimos de ahí para festejar esta gran noticia. Yo estaba muy emocionada, adoraba a mis hijos, pero también me agradaba saber que tendría una hermosa niña.
No podía pedir más.
*******
Beso el hombro de Dean mientras le vira una de las carnes. Mis manos recorren su musculoso cuerpo y él ríe.
—No aquí.
—Eres delicioso.
—¿Qué es delicioso mamá?
—La carne, Joshua. La carne.
—Yo quiero un poco de eso.
—Ya comerás. Anda, ve con Diego.
Mi pequeño hijo sale corriendo y los dos reímos.
—Deja de tocarme —dice él riendo. Yo me apego mucho más a él y beso su cuello.
>>Kim...
Riendo me alejo de él y voy al patio con los niños. Nuestro sábado pasa tranquilo mientras los niños cenan, Dean me ayuda a llevarlos a la cama.
—Me gusta que Dean me arrope, mamá.
—No puedo creer que lo quieras más a él que a mí.
—También me gusta cuando tú lo haces, mamá.
Abrazo a Diego con fuerza, beso su cabeza y apago la luz de su lámpara.
Camino a mi habitación y busco mi camisón. Me aseo en el baño, cuando salgo, Dean me mira y se acerca a mí.
—Todo bien. Ellos duermen.
—Gracias.
Dean me besa despacio mientras sus manos se mueven para levantar mi camisón, los dos nos desvestimos en poco tiempo y luego de eso, me lleva a la cama.
Buscando la posición adecuada por mi abdomen, Dean me hace el amor una y otra vez. Finalmente cuando estamos saciados nos acomodamos en la cama para descansar un poco.
—¿Quieres darte un baño?
—Muero por eso.
—Alistaré a ducha.
![](https://img.wattpad.com/cover/173076883-288-k367824.jpg)
ESTÁS LEYENDO
JEFE, QUÉDESE CON NOSOTROS
RomanceQuedarse viuda y con tres hijos resultó ser lo más difícil que jamás imaginé. Llevaba un estilo de vida que no sabía era existente, apenas dormía lo suficiente como para decirle a mi cuerpo que soportaría otro días más. Entre ser mamá, trabajar, aca...