Not That Type

675 96 19
                                    

Regresaron a sus respectivas casas cuando Raina se había quedado dormida mientras comía una hamburguesa y se manchaba con la salsa de tomate. Los dos mayores no evitaron reírse y sentirse plenos. Esa pequeña solo merecía cosas buenas.

MinKi quería que los dos hermanos solo vivieran cosas buenas.

—Fue... Bueno hoy —se giro hacia Jonghyun y le regaló una pequeña sonrisa sincera —Espero que descansen.

—Espera... No te vayas a dormir —Jong acomodó a la pequeña niña sobre su hombro y miro al pelinegro —Ire en un rato a tu casa. Espérame.

Sin darle tiempo de contestar al menor, entro a su casa y cerro al instante. Minki se congelo ante sus palabras, ¿Ir? Pero... Ya no tenía que pagarle nada.

Con una mueca en sus labios entró a su hogar.

—Hola, hijo, ¿Cómo estuvo tu exámen? —Abrio sus ojos enormemente al ver a sus padres en la sala. Oh no...

—B-bien — carraspeó —Pense que llegarían más tarde.

—Decidimos esperarte y salir antes, no pasamos el suficiente tiempo juntos, ¿No es así cariño?

Su padre asintió con la cabeza y regreso su mirada al televisor en donde se emitía cualquier programa de variedad. MinKi les sonrió una vez más y subió a su habitación. Esperaba que Jonghyun no hubiera perdido esa costumbre suya de entrar por su ventana, no quería que sus padres lo vieran, porque estaba seguro de a qué iría Jonghyun. Suspiró. Esos sentimientos lo estaban consumiendo.

Era cierto que no habían pasado el suficiente tiempo juntos como para decir que le gustaba, pero lo hacía. Le gustaba. Eso no quería decir que estuviera enamorado de él, no, eso no. Pero de un momento a otro necesitó ser besado de diferente forma, quiso que Jonghyun lo mirara más que a un simple chico que usaba diferentes coronas de flores que necesitaba tutorías, quería involucrarse un poco más en su vida... Eso no estaba mal, ¿Cierto?

Mordió su labio inferior mientras daba vueltas en su habitación.
Necesitaba decírselo a alguien, quizás a MinHyun, sí, el lo entendería.

Justo antes de que pudiera marcar el número del alto, los golpes en su ventana le quitaron un gran peso de encima. No había usado la puerta, por primera vez le estaba muy agradecido y hasta se podría acostumbrar.
Abrió su ventana y de inmediato Jong se lanzó a sus labios.

MinKi no pudo pensar bien y cuando menos se dió cuenta lo tenía encima suyo devorando su boca. Correspondió de la misma forma. Desesperado y hambriento.

—Te necesito, ahora.

—Jong...

La ropa fue volando por el aire, mientras esté se tornaba más y más caliente, haciendo un perfecto contraste con la noche fría de afuera.

—Mis padres — jadeó—Mis padres... Están en la casa.

Jong beso su cuello y mordió justo en donde se encontraba su manzana, haciendo que MinKi soltará un gemido ahogado.

—Lo sé.

Volvió a besar sus labios callando cualquier protesta que estuviera por soltar el menor.

Las manos de Jong acariciaban con sumo cuidado aquel cuerpo que últimamente no podía sacarse de la mente, llegó incluso a pensar que estaba más suave. Fue repartiendo besos por el pecho y estómago de MinKi. Quito la ropa interior del menor, lo mantuvo a su Merced hasta que el pelinegro le exigió que siguiera.

Cuando ambos estuvieron completamente desnudos, Jong sonrió.

—Seria mentira si te dijera que no creo que eres de lo más hermoso que he visto...

El corazón de MinKi latio tan fuerte que temía que estuviera a punto de explotar, ¿Kim Jonghyun había dicho eso? No iba a detenerse a pedir explicaciones, simplemente iba a disfrutar del quizás último buen sexo que el mayor pudiera ofrecerle.

Sonrió y beso a Jonghyun, exigiendo el control. Un control que Jong no le concedió. Acarició las aterciopeladas y delgadas piernas de MinKi y las separó exactamente para pocisionarse entre ellas. Aún besándose, se introdujo en el menor haciendo que este diera un pequeño salto de dolor.

Jong beso su rostro de una manera demasiado tierna y si no lo conociera, diría que llena de sentimientos ocultos.

MinKi se encontró a sí mismo empujando su cadera, exigiendo más de aquello que lo volvía loco.

El mayor comenzó con un Vaivén lento, pero conforme pasaba el tiempo y los gemidos de MinKi se escuchaban cada vez más alto, fue más rápido. No dejo de besar al menor para que guardará silencio. Sabía que sus padres estaban en la casa y sinceramente el no estaba como para dar explicaciones o ser terriblemente asesinado por el padre del pelinegro.

—Ah, Jong —MinKi enterraba las pocas uñas que tenía en la espalda de Jonghyun. Vaya que era demasiado genial.

—Shh — beso su cuello —Tus padres pueden escucharte.

La mano de MinKi fue directo a su miembro necesitado, ocasionando así que los jadeos fueran erráticos.

Pudo observar una pequeña sonrisa de parte del contrario justo antes de ser levantado y cambiando de posición. Ahora él estaba arriba de Jonghyun y éste lo sujetaba de la cadera. Su rostro se tornó rojo escarlata, pero ni siquiera se detuvo a pensar en eso pues ya se encontraba moviéndose de nuevo.

—Oh, MinKi.

—Jong...

El pelinegro se inclinó para poder besar al otro. O por lo menos, hacer un intento.

El rostro del menor se contrajo y araño el pecho de Jonghyun. Estaba por terminar.

—Hazlo, pero —Dio fuertes estocadas, haciendo que MinKi soltará pequeñas lágrimas de puro placer —Di mi nombre cuando lo hagas.

No tuvo que esperar mucho tiempo para que MinKi se corriera en su abdomen y gritara su nombre.

—¡Jonghyunnie!

El mayor sonrió de lado y beso al menor que aún se encontraba disfrutando de su orgasmo, poco tiempo después, Jonghyun logro correrse dentro del menor.

Dejó que MinKi cayera sobre su cuerpo, salió de él y paso sus brazos por la delgada espalda de éste.

Ambos guardaron silencio mientras intentaban regular su respiración. Eso había Sido demaciado maravilloso y estaban asimilando que es lo que había sucedido.

Cuando Jong logro calmarse, notó la situación. Sonrió. Estaba perdido por ese niño flor. Beso su mejilla y ambos se acomodaron mejor en la cama, sus padres no habían entrado gritando y ni siquiera tocaron una sola vez. Eso había estado bien.

Pasó un brazo sobre la cintura de MinKi y lo atrajo a su cuerpo, beso sus cabellos y un increíble sentimiento de paz lo lleno por completo. Su subconciente lo estaba traicionando, pero no estaba seguro de cómo sentirse. Solo se dejó llevar.

Ninguno pronunció palabra alguna, solo se dedicaron a apreciar aquel momento, que de alguna manera se sentía demasiado bien.

MinKi cerro sus ojos, pero no durmió. Espero a que el contrario lo hiciera y cuando pensó que eso había sucedido, se dedicó a observar aquel rostro tan pacífico.

Jonghyun era sin duda demasiado guapo, no era tan pálido como él, su rostro era simétrico, con unas muy buenas facciones y cuando sonreía se mostraban unos dientes aperlados. Esa era su expresión favorita. Pero también le gustaba cuando estaba serio, cuando sonreía con burla o cuando miraba a Raina con demasiado amor. Quizás y solo quizás... Sentía algo más que un simple gusto. Pero estaba demasiado aterrado como para confirmarlo.

—Me gustas —susurró—Pero tengo miedo de decírtelo. Quiero pensar que jamás te enterarás y que todo pronto volverá a ser como antes... Aunque lo dudo mucho.

Dejó un beso en los labios del castaño y con un suspiro cerro sus ojos dispuesto a dormir.

"También me gustas"

Rock And Flowers [JRen] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora