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—¿Vas a abrir los ojos? —pregunto el australiano con una sonrisa gigante en su rostro.
—no. —eunyi sentía tanta vergüenza que sabía que si miraba al rubio su cara sería un tomate.
—pareces una bebé. —chan molesto a la menor.
—quiero salir corriendo. —confeso.
—¿No quieres seguir jugando?
—¡Oh por Dios! Sí quiero. —y con eso abrió los ojos encontrándose con el dulce mirar de chan, ¿Cómo había conocido a una persona tan linda como el?
—tu cara está un poco roja. —molesto.
—es tu culpa, ahora carga con eso. —eunyi jamás de había puesto roja, pero acababa de dar su primer beso ¿Que esperaban?
—espera, te prepare algo. —chan saco de su bolsillo su carta terminada.
—chan. —fue lo único que dijo mientras abría la carta—, está en inglés. —se quejó—.
—aprende inglés.
—bien, Zhemin. —la castaña se sentó enfrente de la pelinegra.
—Moon ZhouMin. —se presento la contraria.
—claro, ZhouMin. —minmi sonrió nerviosa ante la chica—, ¿Eres china?
—¿Tengo cara de china? —pregunto molesta pero no de manera grosera.
—tus ojos son grandes y de forma de gato, tal vez si tú estatura fuera de menos 20 centímetros. —analizo la estructura de la chica de pelo largo que tenía enfrente.
—no soy china. —sentenció.
—esta bien. —hablo nerviosa lo que de le olvidó cuando sintió su teléfono sonar—, ¿Que paso Jeongin? —contesto de mala gana—.
—chan me contó algo super genial y raro. —el menor hablo emocionado por el otro lado de la línea.
—jeong, estoy en medio de algo importante, cuando termine te devuelvo la llamada, ¿Ok?
—¿Que puede ser más importante? —el castaño hablo con ese tono triste que la mayor ya conocía.
—luego tendré tiempo de explicarte todo, lo juro. —trato de enmendarlo.
—bien, adiós.
—espera. —la mayor suspiro pesadamente al escuchar el tono de que colgó—, carajo.
—¿Era tu novio?
—algo así. —guardo su teléfono en su bolsillo—, escribe todo lo que sabes en inglés en esta hoja, colores, días, meses, números, animales, comida, lo que sea.
—no se nada. —confeso.
—es una broma, ¿Cierto? —minmi no podía creer la ignorancia de la chica enfrente de ella.
—no, no lo es. —sonrió molesta la chica—, si supiera algo de inglés no estaría aquí para que me des clases.
—no pareces muy contenta de estar aquí.
—no lo estoy, solo necesito pasar un estúpido exámen o mi mamá me regañara de nuevo.
—sí bueno, yo no quiero perder tiempo y tu tampoco quieres, podemos llegar fácilmente a un acuerdo. —sonrió maliciosamente, MinMi necesitaba dinero para un regalo para su novio.
