𝔱 𝔯 𝔢 𝔦 𝔫 𝔱 𝔞 𝔶 𝔰 𝔢 𝔦 𝔰

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—deme un reembolso. —exigió la castaña a penas la señora se asomara en la puerta.

—¿Aún no has entendido nada de esto? —la señora dió espacio en la puerta dando a entender a la castaña que pasará a su casa.

—¿Qué se supone que debo entender? —entro al lugar y tomo asiento en la mesa donde la atendió con anterioridad.

—dame tu mano. —pidió de nuevo.

—¿Piensa que voy a creer es- ¡Auch! —la menor quito su mano—, ¿Qué me hizo?

—tu mano, hay un punto el cual duele porque lo que estás haciendo es imposible. —la señora era de pocas palabras.

—ok anciana, no le entiendo nada, ¿Quiere dinero? —Eunbi puso su cartera en la mesa—, dígame lo que tengo que saber y haga lo que yo quiero.

—no es el dinero. —miro la cartera—, chan no está destinado para tí.

—¿Usted sabía eso? —eunbi suspiro molesta—, me dió un maldito collar para nada.

—el collar sirve, chan no recuerda nada de hace 1 año, pero hay algo por lo cual estás aquí, ¿No es así?

—el té, hace que su cabeza duela y extrañamente la de EunYi. —hablo confundida.

—ellos están conectado, como la brujería cambia cosas, el cielo las escribió antes. —explico tranquilamente.

—me estafó.

—no cielo, tu querías que chan perdiera la memoria, lo hizo. —se excuso.

—mierda, es muy buena. —se cruzo de brazos ante ya no poder seguir discutiendo—, pero, ¿Qué pasa con el té?

—esa ya es tu decisión, pero sí lo sigues intentando es probable que el chico muera. —sentencio.

—bien, como sea, si no es mío no será de nadie más.






—¿Hablaste con tu mamá? —jeongin tomo de su jugo.

—le expliqué, pero me dijo que no tenía pruebas suficientes y lo que necesito es un poco de ese té, pero cada que chan lo toma Eunbi se lleva su termo y si le digo a chan lo que pasa es probable que no me crea. —minmi suspiro.

—¿Qué hacen acá afuera? —eunyi llegó a la habitación del australiano encontrándose a los castaños afuera de esta.

—estabamos esperándote, nadie ha visto a chan hoy y sería mejor que la primera fueras tú. —jeongin sonrió.

—exacto, entra y haz lo tuyo. —MinMi empujó a su amiga dentro de la habitación.

—no le has dicho nada tampoco, ¿Verdad? —el menor miro a su novia con esa mirada acusadora.

—pues es obvio que no, prácticamente ella es la viuda. —sonrió.

—vamos, dejémoslos solos un rato.

—que raro. —eunyi miró la habitación mirando que el mayor no estaba en la cama y se acercó a esta—, no se dónde estás. —sus lágrimas empezaron a correr—, no tienes idea de cuánto te extraño.

—¿Cómo se supone que me abotone mi camisa con una mano? —el australiano salió del baño tratando de abotonar su camisa y eunyi se volteó rápidamente al ver que el mayor tenía su camisa abierta dejando ver su pecho blanco—, ¿EunYi? —chan miró a la chica confundido—, ¿Estás llorando?

—disculpa, es que. —comenzó a limpiarse las lágrimas y se acercó al mayor—, será mejor que me vaya. —dio la vuelta pero las palabras del mayor la pararon—.

—oye, yo realmente lamento no recordarte, no sé qué decir.

—no tienes que decir nada, todo es culpa mía. —sus lágrimas siguieron cayendo—, por creerte. —hablo tan bajo que el australiano no pudo escuchar lo que acababa de decir.

—discúlpame, por todo pero tampoco puedo detenerte si quieres irte pero antes, puedes. —suspiro ya que la situación era incómoda pero necesitaba ayuda—, ¿Puedes ayudarme con mi camisa?

—mira hacía el techo. —pidió.

—¿Para qué? —el mayor no entendió.

—si hacemos contacto visual será incómodo para ambos. —ante esa explicación el mayor asintió.

—bien, ya puedes voltear. —chan miró el techo como la menor pidió.

—ok. —esta se acercó a abotonar la camisa, pero por un momento miró las clavículas del mayor, era demasiado bonito como para que realmente se haya fijado en ella.

—¿Ya? —el mayor bajo la mirada encontrándose con los ojos de la menor, esas ventanas hermosas de las cuales se había enamorado.

—no aún no termino. —esta siguió abotonando la camisa pero chan tenía una mala costumbre, la besaba cuando no sabía que responder—, ¿Qué te pasa? —eunyi se separó rápidamente del mayor—.

—quiero besarte antes de que te olvide de nuevo. —este siguió con el beso.

—¿Hay alguien adentro? —alguien tocó la puerta haciendo que ambos se separan y chan escondiera a la menor detrás de él—, chan, ¿Qué haces a fuera de la cama? —eunbi se acercó al mayor de manera rápida haciendo que su collar brincara y captará la atención del mayor—.

—¿Es nuevo tu collar? —chan fijó su mirada en este.

—sí, ¿Te gusta? —sonrio.

—es lindo, ¿Me lo puedo quedar esta noche? —sonrio.

—claro. —esta esta se quitó tal objeto y lo dejo en las manos del mayor—, cuídalo con tu vida.

—lo prometo. —sonrio.

—traje té también. —eunbi hablo emocionada.

—yo me lo tomaré, pero me iré a bañar, ¿Puedes no estar aquí? —sonrio.

—pero, ya tienes el cabello mojado. —eunbi tocó el cabello del mayor y lo miro confundida.

—me estaba bañando cuando llegaste y salí rápido. —se excuso.

—bien, regreso al rato, ya que otra vez me escape y si MinMi se da cuenta estaré castigada nos vemos. —la castaña trato de acercarse al más alto y darle un beso pero EunYi jalo a este hacía atrás—, claro. —sonrio nerviosa—, nos vemos. —salio de la habitación—.

—oh por Dios. —eunyi salió de su escondite en la espalda de chan—, eso salió muy bien.

—lamento haberte hecho llorar. —chan miró a EunYi—, no quiero ni imaginar cuánto lloraste en casa. —dejo un beso en la frente de su novia—.

—espera, tu memoria volvió, hay gente trabajando en tu caso. —eunyi rápidamente comenzó a pensar en que hacer— iré por MinMi.







—¿Chan? —minmi fue la primera en acercarse al mayor—, ¿Quién soy? 

—no sé, ayer me dijiste que la novia de Jeongin, ¿No?

—¿Qué? —eunyi se acercó a chan y este le guiño un ojo haciendo que está solo riera.

—min, no recuerda nada, tal vez solo fue momentáneo. —jeongin miró a su novia.

—miren al señor Yang, todo un adulto. —molesto el australiano.

—sí recuerdas mentiroso. —minmi suspiro.

—sí, ya volví. —sonrio y saco un collar de su bolsillo—, y tengo muchas cosas que hablar con ustedes.

 -𝐛𝐨𝐝𝐲 𝐜𝐡𝐚𝐧𝐠𝐞- || 𝐁𝐚𝐧𝐠 𝐂𝐡𝐚𝐧Where stories live. Discover now