17▪Lástima

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URSS

México se cruzó de brazos molesto; mirando a los demás países frente a él con desagrado, no habían pasado ni siquiera dos días desde la muerte de Reich y sus compañeros ya estaban decidiendo qué hacer con Alemania, ignorando por completo el hecho de que había un pequeño niño que se acababa de quedar huérfano llorando en el pasillo. No entendía por qué tenían que hacer todo esto ¿Por que no dejar al país tranquilo? Ya habían sufrido suficiente durante la guerra y ¡Ahora querían dividir a la nación en cuatro partes!

A criterio de México, Francia ni siquiera debería estar ahí, ella literalmente no había hecho nada relevante durante la lucha.

-Come on México! We won! At least try to look like if you were happy!-

El grito alegre de Estados Unidos resonó en la pequeña sala de reuniones, México se encontraba sentado en una esquina luciendo indignado y bastante agotado, las miradas de los demás países pronto se posaron sobre él, algunas eran confusas y otras desinteresadas pero el hecho de que el mexicano no estaba feliz con la decisión a la que habían llegado era bastante obvia.

-At least try to look like if you were happy- Repitió el otro americano con enojo -¡¿Como quieres que esté feliz con todo esto?! Ninguno de ustedes está considerando a Alemania en todo esto ¿Que no piensan en lo mucho que el niño ha sufrido? Literalmente su padre estuvo a punto de matarlo-

El enojo de México hizo que su tono de voz aumentara más y más hasta que se convirtió en un grito, resaltando aún más su mirada llena de odio e irá; todo el asunto le había hecho recordar al momento en el que lo separaron de su madre y de su abuelo.

-Gezz, Mexico, calm the fuck down, Why are you so worry about Germany?- Los gritos indignados del latino solo consiguieron subir de tono ante la pregunta, no entendía como alguien podía ser tan desinteresado ante el sufrimiento ajeno.

Del otro lado de la habitación, URSS observaba la pelea con desgano, era divertido hasta cierto punto ver cómo Estados Unidos era intimidado por los gritos de México, pero la pelea comenzaba a darle jaqueca; sería mejor para todos si simplemente terminarán los tratados, así podría regresar a casa con sus otros hijos que seguramente estaban preocupados por él y por su hermano mayor; de cualquier manera ya no había nada que pudiese hacer por el pequeño Alemania, ahora el niño estaba solo y debía aceptar eso.

-Okay, That's enough...- La voz de la unión salió como un susurro suave pero autoritario, logrando atraer la atención de las "jóvenes" naciones -Now, México, What is the problem? Is something wrong?-

Aún con su voz calma, URSS se acercó al mexicano lentamente, mirándolo sin expresión alguna como era su costumbre; no era que al mayor le interesarán los problemas del latino, no demasiado, sino que sabía que si no solucionaban el problema probablemente seguiría peleando con su vecino.

-Yes, there is a problem Sir. URSS, we...well- Se corrigió a si mismo -All of you are not thinking about Germany, he is just a kid, he should not pay for his parent's sins- La mirada del pequeño se comenzaba a tornar cada vez más emocionada, esperando que su discurso pudiese hacer entrar en razón a las otras potencias pero ese brillo se cortó cuando una segunda voz lo Interrumpió.

-Laaaaaaaame!- La voz fastidiada de Estados Unidos resonó por el lugar, haciéndolo merecedor de dos miradas de odio, una por parte de México quien estaba ofendido por ser interrumpido de tal manera, y otra por parte de Inglaterra, quien no esperaba que su hijo fuese tan irrespetuoso.

-U.S.A. please, México is talking- Con un suspiro cansado Unión Soviética recriminó a la joven potencia, estaba acostumbrado a tratar con varios niños a la vez por lo que su paciencia fue la suficiente como para no levantar su voz.

Lessons ||One-Shots|| [México]Where stories live. Discover now